Porque hay que celebrar que de a poco, pero con ganas y ese no se qué que la hace única, la noche porteña vuelve a pedir pista y son un montón los bares a los que vale la pena hacerles una visita/En esta investigación ardua y placentera, algunas propuestas que no fallan: desde un universo paralelo al que se entra por una heladera (literal) hasta un bar que fue elegido entre los mejores del planeta.
