¡Ahora sí, arrancó el año! Dale play al 2023 con ocho nuevas propuestas de barcitos y restaurantes en Buenos Aires

De diciembre a hoy, la escena gastronómica de la ciudad no dejó de generar propuestas nuevas y diferentes/ Sándwiches de miga plant based, un SeaFood bar de tapeo japonés, pastas disruptivas de colores, un lugar mexicano hiper instagrameable, entre otros/ Para todos los estilos y en distintos spots de capital.

Krill, el nuevo proyecto de tapeo japonés de Iwao Komiyama se sumó a la movida del pasaje Echeverría.

¡Ahora sí, arrancó el año! Dale play al 2023 con ocho nuevas propuestas de barcitos y restaurantes en Buenos Aires. Por Tamara Tornello y Lenchu Rodríguez Traverso.

Diciembre, enero y febrero son los meses de verano. Fiestas, fin de año, vacaciones, viajes. La cabeza suele estar en cualquier otro lugar menos en Buenos Aires, pero eso no quiere decir que la ciudad se congela hasta la “rentreé (como dicen los franceses)”, la vuelta a la normalidad, el demorado inicio de año que suele llegar en marzo/abril, sino que la escena gastronómica no para de generar propuestas ardientes.

A lo largo de estos últimos meses, las aperturas siguieron llegando. Buenos Aires nunca frena. ¡Es una de las ciudades más vigorosas y enérgicas del mundo! Les proponemos ocho novedades de barcitos y restaurantes para conocer ahora que sí empezó el año.

1) SOFÁ: la nueva esquina coctelera de Jorge Newbery / Av. Dorrego 1301, Chacarita.

Sofá llegó a la esquina de Dorrego y Loyola – donde antes funcionaba Apu Nena de la chef filipina Christina Sunae -, para convertirse en un gran punto de encuentro con cocktails de autor originales (¡y clásicos, también!).

Sus dueños, Agostina Elena, Sabrina Traverso, More López Blanco y Seba Almeida, se conocieron trabajando en la pandemia. En un principio, Agos y Sabri – bartenders de gran experiencia y trayectoria -, comenzaron como asesoras del bar, pero algo les dijo que la oportunidad de tener su propio bar era ahora y se unieron al proyecto desde adentro.

Sofá tiene una carta extensa de cocktails de autor, donde la identidad de Agos y Sabri se deja ver. Cada uno lleva una letra del abecedario y el detalle en los paréntesis de la carta te va a hacer sonreír: “Para lxs intensxs”, “Primero: fresco y cremoso, segundo: Francia”. La idea es, para fin de año, llegar a la letra Z (¡van por la L!).

Desde la Ecuación del Disfrute probamos el “A” (Tanqueray, manzana, apio, kale, cordial cítrico, Cinzano Pro Spritz), el “E” (pisco, nuez pecan, vermú blanco, banana) y el “F” (ron, almíbar especiado, zanahoria & maracuyá, mascarpone, crocante de habanero) ¡Una reversión de la carrot cake! “Somos muy estudiosas, queríamos traer técnicas que quizás se ven mucho en otros países. Además trajimos algunas máquinas de afuera, para poder proponer algo diferente”, explicó Sabri.

El ambiente cálido e íntimo del lugar, con todos sus detalles de diseño y arquitectura, fueron pensados al 100% por sus dueños. Para comer hay platitos, platos y postres con varias opciones vegetarianas muy ricas para compartir con amigos o en pareja.

2) SUMAQ: la selva y el mar de Perú en un local imponente en Palermo / El Salvador 5729, Palermo.

De la mano del chef Andrés Pielago Fuentes Rivera (o Chevy, como lo conocen todos), Perú desembarcó en Palermo en forma de un gran restaurante llamado Sumaq, cuyo nombre significa “algo bien hecho y lindo” en quechua.

Su amplio menú nos lleva por distintos sabores del país latinoamericano así como por algunos más argentinos. Encontramos clásicos como las causas, los ceviches y la anticuchada; platos criollos con lomo o con mariscos, sushi, parrilla con cortes de carne y achuras, parrilla marina y la estrella del lugar: los selváticos, cuatro platos cocinados con las técnicas propias de la selva de Perú.

Por ejemplo la chaufa charapa; un arroz salteado al wok con cecina, cerdo ahumado, chorizo amazónico y huevo de codorniz, todo envuelto en una hoja de plátano.

La barra, a su vez, tiene bastante protagonismo también dentro del lugar. Ofrece cocktails de autor con mucho sello peruano (4 de ellos tienen sour), cocktails clásicos, cervezas y bebidas sin alcohol.

3) KRILL: un “seafood bar” de tapeo japonés se suma al happy hour del Pasaje Echeverría (con cócteles del célebre Fede Cuco) / Echeverría 1677, bajo la estación de tren Belgrano C.

El Pasaje Echeverría no deja de crecer segundo a segundo y, para sumarse a su movida que estalla desde el horario after office, llegó “Krill”, un “seafood bar” de tapeo japonés y tragos de autorSu creador es Iwao Komiyama, quien fue uno de los pioneros del sushi en la Argentina, y uno de los referentes de la comida asiática en el país, con más de 40 años en el rubro.

El concepto de Krill es muy simple: buscamos recrear los bares de Japón. Los japoneses salen de trabajar, van al bar y comen, entonces ya llegan a su casa felices y relajados. Con el tiempo me gustaría que acá se aprenda a vivir así”, detalló Iwao.

El menú ofrece yakitoris (pinchos), infaltables en un tapeo japonés, acompañados de onigiri. “Hicimos los clásicos de pollo y de lomo porque estamos en Argentina, de langostinos porque a mí me relacionan con los frutos de mar y algunos vegetarianos de espárragos, papines y hongos que tuvieron un gran éxito desde la apertura”, detalló.

También hay opciones de ceviche, poke, ensaladas y tres variedades de sushi: langostinos, salmón y vegetariano (con hongos grillados). Las porciones están pensadas para mantener el concepto de tapeo con productos de primera calidad a precios accesibles.

Pero igual de importante que su cocina – y lo primero que nos atrae visualmente -, es su barra, cuya carta fue creada por el bartender Fede Cuco y es muy amplia. Hay casi 30 opciones divididas en cocktails de autor y sugeridos. Los más pedidos son la Caipi Krill (vino blanco, lima en trozos, maracuyá y jengibre), Spritz de arándano (Aperol de arándano, almíbar, dash de limón y espumante) y el clásico gin tonic.

4) MAD PASTA HOUSE: juventud y creatividad en un bar que se rebeló ante las clásicas pastas / Av. Libertador 13797 – Martínez.

Lo que empezó como un emprendimiento de tres amigos nacido en pandemia terminó coronándose con un restaurante a la calle en la icónica esquina de Alvear y Libertador en Martínez. Lucas Canga, Clara Corso y Félix Babini se conocieron trabajando en Alo’s Bistro, donde empezaron a gestar Mad Pasta, el delivery de pastas que se tornó boom en la pandemia, y hoy se asentó en forma de restaurante.

La creatividad es algo que caracteriza al trío y su cocina, con platos frescos y juveniles, lo refleja. “La idea era abrir un local con nuestra impronta. Hacemos pastas disruptivas, de colores, e intentamos hacer rellenos atípicos. Tenemos opciones de entradas con un concepto de alta cocina pero realizadas de una manera sencilla para nuestro público”, detalló Lucas.

En la carta de verano destaca el Nino berguese (un gran raviol) de queso ahumado y maíz y crema de ajo asado y cúrcuma; las tortillas de maíz con trucha confitada, los scarpinocc de berenjena con mojo y Limón y los sorpresinis con zucchinis, coco y palta.

La imponente barra, heredada del restaurante anterior (Fortificados Balestrini), es de mármol hecha con piedras de todo el país. Ellos la denominan “barra federal”.

Rodrigo Kohn, sommelier mendocino, fue quien los ayudó en la primera instancia de armado de la carta de vinos que es, sin dudas, la protagonista de las bebidas. Actualmente el seguimiento lo hacen ellos mismos gracias a su experiencia y conocimiento. Destacan los vinos orgánicos.

5) Somos VIRGEN: tradición e innovación mexicana en un espacio que no pasa desapercibido/ Av. Caseros 467, San Telmo.

En el icónico Boulevard Caseros de San Telmo hay un nuevo gran descubrimiento para visitar. Con recetas mexicanas típicas pero reversionadas, una barra de cocktails alucinante y un imponente ambiente de diseño, Virgen aterrizó con una propuesta innovadora en una calle súper tradicional.

Entrar a Somos Virgen es un viaje visual instantáneo: luces de neón, paredes revestidas, pana rosa, cortinas, mesas y barra de mármol y luminaria de diseño. Todo está inspirado en los viajes de sus creadores. Uno de ellos es Diego Sicoli, también dueño de Hierbabuena y La Popular, ubicados en el mismo boulevard.

El menú, creado por Manuel Malacarne, chef con experiencia en México, tiene una gran variedad de entradas, guacamoles, quesadillas, ensaladas, tacos, platos principales y postres. Muchas de sus opciones incluyen pescado, pulpo y salmón. Hay opciones sin tacc y veganas.

Probamos los tacos de pesca del día en tempura, Guacamole, higos y castañas y Aguachile verde (tartare de mar, servido con aguachile de pepino, chile serrano, tomate verde y jugo de limón, tomates encurtidos y perlas de naranja).

La barra ofrece cocktails clásicos y de autor, diseñados especialmente por la reconocida barmanager Brenda Asís, que hacen mucho hincapié en el tequila y el mezcal. También hay cervezas, micheladas y 4 tipos de mocktails para quienes prefieren opciones sin alcohol. Probamos el cocktail “Las Dos Fridas”, uno de los más pedidos, que lleva jugo de mango, néctar de ananá, Apricot brandy, tequila y labiado de togarashi.

Virgen también tiene un salón apartado para eventos privados y mesas en la vereda para disfrutar los días, tardes y noches de verano.

6) Corriente: una joyita de cocina experimental escondida en una calle tranquila / Ferrari 384, Villa Crespo.

Donde antes había una fábrica de dulce de leche ahora existe Corriente, un restaurante de look industrial atravesado por el arte y la arquitectura, con gastronomía experimental y carta de vinos internacionales. De bajo perfil en su exterior, se esconde en una calle tranquila de Villa Crespo, y de a poco fue conquistando a los vecinos y a otros locales que se acercan de distintas partes de Buenos Aires para conocerlo.

Sus dueños son arquitectos y el chef amante de la música y el arte, eso deja ver la creatividad en todas las áreas de la propuesta. “Somos un cúmulo de muchas cosas que fueron curadas para crear un proyecto en una zona que no había ninguna propuesta parecida”, detalló Steve Becker, chef de Corriente. “El restaurant está inspirado en las cosas que nos pasan a nosotros y también tiene mucho que ver con la mercadería con la que trabajamos. Queremos que los platos sean muy espontáneos”.

La carta varía según la estacionalidad de los productos y las inspiraciones del chef. Probamos algunos de los platos nuevos, entre los que destacamos el calamar con crema de ajo blanco y duraznos; el pepino a la parrilla con gazpacho de melón, damasco, alcaparras y mizuna y el postre de duraznos con mascarpone (una reversión de un clásico de su infancia).

Además, Corriente ofrece vinos de primer nivel traídos de Nueva Zelanda, Australia, Francia, Italia y distintas regiones de Argentina. Algunos los destapan con el sistema Coravin, lo que nos permitió disfrutar vinos internacionales por copa, algo no muy habitual en restaurantes de Buenos Aires. También hay una carta especial de vinos dulces con varias opciones para maridar con el postre.

7) La Sorellina (Tiamo Pizza Bar): pizzas con personalidad y vinitos en un local de Colegiales que explota. / Freire 1393 – Colegiales.

Victoria y Carola Santoro, las hermanas creadoras de Tiamo – pizzería de Adrogué – abrieron a mitad de diciembre 2022 La Sorellina, un pizza bar que ya explota en Colegiales. El nombre, traducido al español, quiere decir “la hermanita”, lo que significa para las hermanas este nuevo espacio.

El concepto de La Sorellina es muy diferente a Ti Amo, tiene otra impronta, otro logo y un menú reducido. Al ser un “pizza bar”, se presenta como algo más informal, de paso, donde muchos eligen comer algo rápido y temprano en la barra, con una copita de vino. Justamente se manejan sin reservas, por eso a las 19 hs (horario de apertura) ya está armándose la lista de espera.

Las estrellas del menú son, por supuesto, las pizzas napolitanas by Tiamo. Las más pedidas: la clásica margarita (porque cuando las cosas están bien hechas, menos es más), la Corazón de Burrata con salsa de tomate italiana, albahaca, parmesano y stracciatella y la Roma con salsa de tomate, mortadella con pistachos, albahaca y parmesano.

Detrás de la barra se exhiben botellas de vinos con personalidad para hacerle compañía justa a los sabores de las pizzas. Para quien prefiere el combo más clásico, cuentan con birras de Strange Brewing.

Un dato de color: del personaje “La sorellina”, que ilustraron como una luna con ojos y botas, desprendieron otros personajitos simpáticos y simples que se esconden en los recovecos del lugar, como un juego de niños que te invita a sorprenderte y sonreír con cada nuevo descubrimiento.

8) Sangüich: rebeldía y coraje reversionaron el clásico sándwich de miga / Av. Forest 1300, Villa Ortúzar.

¿Papa a la huancaína dentro de un sándwich de miga? Así es, Sanguich se animó a desafiar a los tradicionales paladares porteños, incorporando ingredientes disruptivos y plant based en los clásicos formatos que todos conocemos.

Tomás Salinas y Luciano Combi, los creadores del local que abrió a principios de diciembre en Villa Ortuzar, se conocieron hace 3 años trabajando juntos en la pandemia. Ignacio es dueño de Fifi Almacén, también a base de plantas, donde Tomás es el jefe de cocina. “Nos costaba encontrar sandwiches a base de plantas que tengan cierto nivel nutricional con buena calidad de producto”, detalló Tomás. “Nosotros somos la primera sandwichería a base de plantas que ofrece una opción sana y sustentable y que no está destinada exclusivamente a quienes mantienen este estilo de alimentación”, agregó Combi.

“El sándwich de miga es parte de la identidad porteña”, asegura Luciano. Y si bien usan ingredientes que no son los más comunes para el paladar porteño, la acumulación de gente retirando su pedido en la esquina de Forest y Virrey Avilés demuestra que sus sabores están teniendo gran aceptación.

En la carta actualmente tienen cinco opciones: Papa Huancaína, una reversión del típico plato peruano, con papa huancaína, cilantro, choclo y tapenade de aceitunas negras; Tofu Revuelto: tofu, salsa sin huevo, queso de cajú y ciboulette; Caprese: pasta de tomates secos, queso crema de cajú y pesto de albahaca; No atún, con queso crema de cajú, no atún y verdeo; y un último de mermelada y mantequilla de maní.

¿Con qué bebida acompañamos nuestro sándwich? Las opciones son jugos orgánicos prensados en frío de Good Juice, kombucha, vermú Salvo y cerveza Perro. Para los que buscan un cafecito también hay variedad y cookies de vainilla y chocolate sin tacc o Ice Cream Sandwich para el postre.

///

Las fotos son cortesía de prensa de los lugares mencionados.