ya no hace falta viajar al mar ni romper el chanchito para comer una buena ostra, a continuación desde MALEVA contamos sobre seis locales gastronómicos – desde Chacarita hasta Olivos -, donde este pequeño lujo (o ex lujo) se volvió parte del día a día. Con versiones frescas o gratinadas, acentos que van de lo asiático a lo mediterráneo y con precios que no intimidan, cada propuesta ofrece su propia forma (accesible, relajada y sabrosa) de volver al mar, aunque sea por un bocado.
