Tres muestras – a la vez – de fotógrafas mujeres que se pueden recorrer a pie (y que van a cambiar nuestra mirada) ¿Dónde? ¿De qué van?

Las fotografías nos regalan una posible forma de ver el mundo: es posicionarse dentro de otros ojos y apreciar eso que han sabido capturar. Desde MALEVA les acercamos tres muestras en donde esa mirada está puesta en lo cotidiano, en los rostros que vemos en el día a día, en los vínculos, en los barrios que nos rodean. Esas cosas que a veces por estar siempre ahí, damos por sentado y dejamos de prestarles atención.

Las obras de mujeres que reinan en las imágenes, de Adriana Lestido en Rolf Art. 

Tres muestras – a la vez – de fotógrafas mujeres que se pueden recorrer a pie (y que van a cambiar nuestra mirada) ¿Dónde? ¿De qué van? Por Candelaria Penido para MALEVA.

Portfolio en Smart Gallery, Donde todo empieza en Rolf Art y Blindados en Cecilia Caballero Arte Contemporáneo son tres exhibiciones de artistas mujeres que nos invitan a adentrarnos en distintas realidades. ¿Un plus? Las tres galerías pueden recorrerse a pie, mientras jugamos a ponernos en el papel que incitan las fotógrafas y prestarle atención a esas cosas que normalmente pasarían desapercibidas: calles, personas y situaciones propias de la city porteña.

«Dos salas en Rolf Art con paredes azul oscuro, luces frías y obras en blanco y negro. Minuciosidad en la presentación de detalles, ojos expectantes y mujeres reinan dentro de las escenas capturadas por la lente de Adriana Lestido. Donde todo empieza presenta una selección de las piezas más emblemáticas de sus series: Mujeres presas, Madres e hijas, Madres adolescentes, Madre e hija de Plaza de Mayo y Metrópolis…»

1) Portfolio de Hilda Lizarazu y Pompi Gutnisky en Smart Gallery: la sorpresa, el juego y la belleza en piezas de pequeño formato. / Alvear 1580 – Recoleta.

Encontrando conexión en la desconexión, Smart Gallery presenta casi 20 fotografías de dos artistas con un amplio recorrido en este arte. Hilda Lizarazu y Pompi Gutnisky nunca han expuesto juntas y menos las obras, curadas por Bruno Dubner, que hoy están colgadas en las paredes de la galería de Recoleta. Alejándose de sus fotos de rock en el caso de Lizarazu y de interiorismo en el de Gutnisky, el espectador es invitado a percibir la mirada de estas dos artistas desde un lugar que difiere a lo que el ojo conocedor de sus trabajos espera.

La sorpresa y el juego reinan en estas piezas de pequeño formato que entablan un diálogo en torno a la belleza. Son los retratos, en ambos casos, los que se llevan la mayor atención. Entre aparentes risas, las imágenes denotan jovialidad. Se exponen vínculos, personajes, espacios interesantes y mucho movimiento.

Los visitantes parecerían gozar de un lugar privilegiado en medio de la escena que discurre ante ellos. Como si hubiésemos irrumpido en ellas, pero sin incomodar, sino, con una invitación a mirar.

2) Donde todo empieza de Adriana Lestido en Rolf Art: mujeres y escenas intensas que hablan sobre el poder de los vínculos. / Esmeralda 1353 – Retiro.

Dos salas con paredes azul oscuro, luces frías y obras en blanco y negro. Minuciosidad en la presentación de detalles, ojos expectantes y mujeres reinan dentro de las escenas capturadas por la lente de Adriana Lestido.

Donde todo empieza presenta una selección de las piezas más emblemáticas de sus series: Mujeres presas, Madres e hijas, Madres adolescentes, Madre e hija de Plaza de Mayo y Metrópolis. Recorrer la muestra es penetrar en la intensidad de las escenas representadas y dejarse llevar por la contundencia de esas experiencias.

Las fotografías expuestas revelan el poder de los vínculos y las relaciones humanas de una forma tan expresiva que parecería que estás ahí con esas mujeres, levantando a sus hijos, esperando a que llegue una amiga, pisando la arena, perdiendo la vista en el vacío.

“No me interesa registrar lo que veo sino llegar a expresar lo que percibo y así poder llegar a ver lo que actúa detrás de lo aparente”, confiaba Lestido. Y es exactamente ese detrás de cámara de tan disímiles cotidianeidades, a lo que accedemos con sus registros.

3) Blindados de Andrea Moccio en Cecilia Caballero Arte Contemporáneo: obras que fluctúan entre fotos y dibujos (donde el error es el principal protagonista). / Suipacha 1151 – Retiro.

La calle, sus autos y transeúntes, los árboles, plazas y monumentos son los ingredientes que componen un escenario diario pero que en Blindados, curada por Marina Aguerre se nos incita a apreciar desde otro lugar. Las imágenes de Andrea Moccio deforman y ablandan esos espacios, haciéndolos más accesibles a sus espectadores.

A partir de un interesante proceso en donde la artista imprime con una vieja máquina, sus fotografías sobre placas de aluminio reciclado —material de descarte proveniente de la industria del packaging—, logra dar vida a obras que parecerían fluctuar entre fotos y dibujos. Donde el error es el principal protagonista.

Me gusta el dialogo que se da entre la rugosidad y vulnerabilidad o inestabilidad del material y sus errores de impresión versus la supuesta rigidez de los camiones de caudales o monumentos. Estas cosas que se presumen fuertes y rígidas porque contienen valor o valores”, le contaba a MALEVA la artista mientras recorríamos la exposición. Esta se ve acompañada de esculturas que replican algunos de los monumentos retratados.

Piezas también realizadas en aluminio, en donde Andrea apoyó el materia contra las estatuas para replicar su relieve. Luego el procedimiento requería desarmar esas formas intentando que estas no se pierdan, transportarlas en cajas mientras viajaba en subte hacía su taller y volver a emplazarlas. Un curioso proceso de armado y desarmado, convertido en acción performática y reproducido en un video también expuesto en la muestra.

///

Fotos: son todas gentileza de las galerías mencionadas.