La rompen: siete artistas jóvenes argentinos que hay que tener muy en cuenta

Talento nuevo que promete y mucho/Se destacan pese a riesgos y dificultades/¿Cómo es la obra de cada uno y por qué vale la pena conocerla?/De «femininjas», cinco sentidos movilizados y arte hecho ternura

Gonzalo Beccar Varela, un artista imprescindible que logra destacar esa belleza que no logramos percibir

 

La rompen: siete artistas jóvenes argentinos que hay que tener muy en cuenta

Desde hace décadas Argentina se destaca por su talento en el campo del arte, demostrándolo en bienales, ferias, residencias, muestras públicas y privadas o publicaciones, no sólo en el terreno local sino alrededor del mundo. Siendo en muchos casos los propios artistas los impulsores de sus carreras. Para cerrar el año en MALEVA (e inaugurar nuestra nueva web) hicimos una selección de siete artistas jóvenes que a pesar de los riesgos y muchas veces con escasos recursos, trascienden los impedimentos, demostrando que el talento nuevo promete mucho. ¡No dejen de conocer sus obras!

1) CAMILA LAMARCA: UN ENTENDIMIENTO EXQUISITO DEL COLOR (Y MUCHO MÁS QUE ESO)
Camila acaba de volver de Miami donde junto a la artista Sol Pochat y la galería Hilo se embarcó en uno de los proyectos más ambiciosos de su corta y creciente carrera, participar de la feria Untitled, una de las más relevantes de la ciudad. Cuando conocí a Camila cometí un sutil error: la catalogué como una pintora con un entendimiento exquisito del color. Si bien no me equivoqué con este segundo punto, con el paso de los años sus trabajos han evolucionado, fusionándose con el espacio y transformándose en objetos, esculturas e instalaciones con las cuales apuesta a incursionar con objetos como el ladrillo o el papel de lija e incluso jugando con la especialidad, como puede verse en sus últimas obras, poéticas y maleables que nos obligan a re-entender el concepto de pintura.

 

2) NATACHA VOLIAKOVSKY: ABOCADA POR COMPLETO A LA PERFORMANCE, SIN IMPORTAR LO ARRIESGADO QUE SEA EL PROYECTO

Natacha está abocada por completo a la performance, que por medio de residencias presenta en otros países más receptivos a la técnica, sin dejar de trabajar constantemente para abrir el campo aquí en Argentina. Ella se manifiesta, plantea y debate temas universales utilizando su cuerpo como herramienta y medio. Ha diseñado performances donde entrena a su cuerpo y mente para que estén a disposición de la obra, como cuando se somete a cirugías plásticas, mientras que en otros casos involucra a terceros, como hizo alguna vez con un grupo de jugadores de hockey y rugby, confiando en la potencia del hacer en conjunto. No importa lo arriesgado que sea el proyecto ella es siempre la responsable de llevarlo a cabo, creando situaciones que permiten entender lo necesario que es enterrar supuestos frente a lo que aceptamos como arte.

 

3) SANTIAGO GASQUET: CUANDO UNO CREE CONOCER SU OBRA, VUELVE A DAR UN GIRO DE 360 GRADOS QUE TE DESCOLOCA COMPLETAMENTE

Santiago es artista, así como también gestor y galerista. Sus pinturas y dibujos, que parecen de otro siglo, nos permiten enamorarnos de los detalles mínimos que encontramos en la naturaleza, los bodegones, la calle y todo aquello que a Santiago lo rodea e interpela, como cuando invitó a su vecino Orlando a que relatara lo que veía en su muestra «¿Qué hago aquí?». Fue allí donde su trabajo se fusionó con la performance y la transformación del espacio. Algo similar sucedió en la muestra en el Museo Pettorutti de La Plata, donde planteó las palabras «¿Dónde estoy?» con una estética de grafiti, atravesando la sala -pared, techo, piso- y jugando con nuestra percepción. Cada vez que creo que conozco la obra de Santiago, logra dar un giro de 360 grados que descoloca gratamente. Vale desatacar además que la labor que lleva a cabo como co-director de la galería Piedras permite que otros artistas puedan crecer y dar a conocer su obra. El poder de la autogestión.

 

4) FÁTIMA PECCI CAROU: LA MUJER CONTEMPORÁNEA, EL FEMINISMO Y SUS GENIALES FEMININJAS

Una de esas artistas es Fátima, quien hace años se expresa a través de la militancia, la música y la pintura donde desarrolla el concepto de «femininjas» (mezcla de feminista y ninja), personajes que se asemejan al animé japonés. Investiga entre otras cosas las problemáticas y el lugar que ocupa la mujer en la historia del arte y como somos representadas en términos generales por la sociedad, haciendo un estudio a partir del feminismo para romper con conceptos instalados por una mirada patriarcal que muchas veces determina lo que se supone debemos aceptar. Sus personajes ayudan a que muchas chicas encuentren una imagen con la que se sienten representadas. Las femininjas son vulnerables, coquetas, seductoras, amorosas y a pesar de que por momentos parecen ocupar el lugar de musa, dominan por completo la situación. El trabajo anterior de Fátima, más crudo, le permitió llegar a esta representación poderosa y afable de la mujer contemporánea.

 

5) NICOLÁS MASTRACCHIO: OBRAS QUE LOGRAN QUE TU CUERPO VIBRE CON LOS CINCO SENTIDOS

Nicolás presenta su primera muestra individual en un museo (MAMBA), que acertadamente continúa gestando exposiciones que nos acercan a artistas argentinos contemporáneos. Aprovechando la oportunidad se arriesgó a crear «Pulso», una propuesta multi-sensorial que lo corre de su medio habitual, la fotografía, para desplazar las imágenes del soporte y utilizarlas como disparadores en la creación de una experiencia espacial para el público. Es así como sus obras, apenas representativas de una figuración incierta, cuelgan etéreas y sin pretensiones, acompañadas de objetos mínimos, en una habitación que parece una nube y donde se llega a una instancia casi inmaterial que nos permite aislarnos del mundo por un rato y habitar en una obra de arte, dejando que el cuerpo vibre con los cinco sentidos.

 

6) MERCEDES AZPILICUETA: TODO LO QUE EL CUERPO PUEDE DECIR, CON UNA MIRADA CASI ANTROPOLÓGICA

«Cuerpos pájaros» es la segunda muestra dedicada a los contemporáneo en el MAMBA que reúne la obra de los últimos ocho años de Mercedes que actualmente vive en Holanda. En términos generales ella analiza, como aquel que estudia a una manada de leones en la selva, nuestras formas de comunicación directas e indirectas, por medio del lenguaje y el cuerpo, las cualidades socio-afectivas, así como también sus consecuencias negativas, como la búsqueda de control y la violencia que se puede ejercer. Estas observaciones casi antropológicas se materializan en instalaciones y piezas sonoras, que nos ayudan a entender el peso de los tonos, las formas, los gestos y sobre todo aquello que no decimos, cuando el cuerpo se expresa por nosotros y es más poderoso que la palabra.

 

7) GONZALO BECCAR VARELA: LOGRAR OBRAS QUE SON BELLEZA QUE RENACE DE LAS CENIZAS Y COMPOSICIONES EMOTIVAS

Los trabajos de Gonzalo pueden apreciarse como un conjunto más que como piezas separadas, unidas por una sutil línea de pensamiento e intención. Así al menos se percibían en su última muestra individual «Es otra cosa» en la galería Acéfala donde se respiraba un aire de quietud y soledad como respuesta a algo que había sucedido antes, pero que el artista ocultaba – ¿quizás caos, destrucción, ausencia? -, no importa, ya que lo relevante es lo que él confecciona con eso que queda y da como resultado composiciones emotivas y suaves. Esto que vemos es lo permanecerá, lo que renace de las cenizas para destacar la belleza en lo que muchas veces ni siquiera nos detenemos a apreciar.

 

Fotos: gentileza artistas mencionados.

 

Galería: 

Por Camila Lamarca

 

Por Gonzalo Beccar Varela

 

Por Santiago Gasquet