Mar y montaña como «paisajes sagrados»: ¿qué tipo de energía nos transmiten? ¿Cómo aprovecharla?

Son las dos cartas fuertes de la naturaleza en las vacaciones de verano/Cada una tiene sus simpatizantes, pero de lo que no hay duda es que tanto el océano como los imponentes cerros conmueven, revitalizan y nos transmiten una energía difícil de explicar/Hablamos con astrólogas y especialistas que nos orientan para entender qué hay detrás de los elementos, los puntos cardinales y el poder como «antídoto» de la naturaleza.

«La montaña llama a elevar el espíritu…»

Mar y montaña como «paisajes sagrados»: ¿qué tipo de energía nos transmiten? ¿Cómo aprovecharla? Por Azul Zorraquin.

¿Por qué un baño de mar revitaliza? ¿Porqué la montaña es un lugar sagrado? ¿Por qué al estar frente a ambos paisajes, nos sentimos conmovidos? MALEVA conversó con astrólogas para entender qué energía tiene cada punto cardinal, por qué, cuál es su riqueza y su potencia.

Los puntos cardinales, el elemento tierra y la montaña (que sostiene y desafía a la vez).

«La montaña, particularmente, tiene una energía que nos conecta con un nivel esencial: “Te lleva a aprender a sostenerte en un mundo, con firmeza, elegancia, dignidad y fuerza. La montaña también te desafía, porque para subirla o para llegar a contemplar lo que tiene para mostrarte, uno se tiene que despojar de ciertas cosas”, cuenta Agustina Malter, astróloga y mujer profundamente perceptiva…»

Cada punto cardinal, Norte, Sur, Este y Oeste, tiene una energía, un elemento, un arcángel y signos del zodíaco asociados. No es una ciencia exacta, es una de las tantas interpretaciones que se pueden hacer sobre la energía. Además, en algún punto, somos todos los elementos y todos los puntos. He aquí, el desglose:

Sur: Tiene que ver con el elemento tierra, y espiritualmente se denomina “El Camino Verde”. Lo gobierna el Arcángel Uriel. “Los elementales de la tierra son, por ejemplo, los duendes y así como el arcángel, tenemos que invocarlos. Lo que la tierra nos da, es la posibilidad de cristalizar nuestros proyectos”, cuenta María Aiello, terapeuta holística y gurú malevense. Quien elija zonas montañosas, o ciudades, porque en ellas también predomina el elemento tierra, es porque vibra este propósito. A su vez, este elemento está relacionado con tres signos del zodíaco: Tauro, Capricornio y Virgo. Son los signos que suelen concretar los proyectos.

La montaña, particularmente, tiene una energía que nos conecta con un nivel esencial: “Te lleva a aprender a sostenerte en un mundo, con firmeza, elegancia, dignidad y fuerza. La montaña también te desafía, porque para subirla o para llegar a contemplar lo que tiene para mostrarte, uno se tiene que despojar de ciertas cosas”, cuenta Agustina Malter, astróloga y mujer profundamente perceptiva. Además, para ella, la tierra tiene que ver con la estabilidad y el hecho de reconocer que tenemos un peso, que estamos plantados en la tierra, y que somos parte de ella. “En la montaña, yo haría un fuego que convoque y reúna. La montaña nos llama a elevar hacia el espíritu”, sintetiza.

Norte: está regido por el elemento fuego y por el Arcángel Miguel, y es dónde se encienden nuestros deseos; “Cuando nos sentimos apagados o tristes, encendemos una fogata y pareciera que nos purificáramos. Solamente con observar la llama de una vela y meditar, sentimos que nos encendemos. El fuego transmuta y transforma”, explica Aiello. Uno de los elementales para invocar sería, por ejemplo, la salamandra. Los signos de fuego, Aries, Leo y Sagitario, están fuertemente vinculados a este punto cardinal.

El agua y el mar (alquímico, que limpia, purifica y cicatriza).

“El agua purifica nuestras emociones. Cuando uno se mete al mar, la sensación es que sale revitalizado y renovado. El agua limpia nuestros cuerpos energéticos, espirituales, físicos y mentales”, amplía María Aiello, terapeuta holística…»

Oeste: el elemento que prima es el agua, y se lo llama “El Camino Azul”. Está regido por Gabriel, y los elementales del agua son principalmente las sirenas. “El agua purifica nuestras emociones. Cuando uno se mete al mar, la sensación es que sale revitalizado y renovado. El agua limpia nuestros cuerpos energéticos, espirituales, físicos y mentales”, amplía Aiello. Además, el agua de mar tiene yodo y sal, purificadora y cicatrizante, no sólo de heridas físicas sino también de dolencias emocionales. El agua de río, por el contrario, “nos endulza las emociones y nos purifica, pero de manera diferente”, explica nuestra gurú. Los signos de agua son Cáncer, Escorpio y Piscis.

El océano, Para Malter, “es un cuarzo. Amplifica lo que hay, y lo transmuta; te lleva automáticamente a un estado de meditación e introspección muy profunda, y a su vez te conecta con el alrededor”. Agus también cuenta que la sal del mar es un elemento súper alquímico; “la sal en la alquimia representa el cuerpo físico que queda después de la combustión, la sustancia material que sobrevive a la muerte y genera nueva vida”. Además, agrega que el agua de mar tiene un montón de minerales y nutrientes, que parten del origen de la vida, pues, entonces, ¿Cómo no va a ser sanadora? Agrega: “creo que toda agua es sanadora porque el agua es el manantial de la vida. Es como el amor”.

Este: es el “Reino Amarillo”, y corresponde al elemento aire, regido por Rafael. Los elementales del aire son las hadas; “le dan velocidad a nuestros pensamientos, para que podamos concretarlos”. Los signos zodiacales de aire son Géminis, Libra y Acuario.

La naturaleza como antídoto.


Más allá de esta guía, hay que entender que estamos rodeados de energía, porque toda la naturaleza lo es y esa energía, está limpia. “En cambio, los seres humanos a veces estamos con pensamientos negativos, emociones de tristeza, enojo o ira, y eso nos limita y nos frena. La naturaleza no está tan intoxicada como nosotros”, explica Aiello. Es decir, en algún punto, nosotros tenemos energía dual: luminosa y oscura. Si bien la montaña y la playa tienen energías puntuales, hay que tener en cuenta que justamente como todo es energía, ella va a influir en nosotros de una u otra manera, estemos donde estemos. “El bosque, la llanura, el desierto, todo puede ser. Uno de los lugares más energéticos del mundo es Capadocia, en Turquía, sumamente sagrado, y es un lugar árido, lleno de montañas, y las casas están construidas sobre la roca viva”. En fin, la naturaleza es sanadora en todas sus formas.

Escape de la matrix.


¿Cuándo? El momento favorito para conectar con la naturaleza es justamente la “vacación”, el momento en el que la gente necesita huir de la ciudad y del cemento, porque es como salirse por un rato del sistema y de la matrix. “El sistema nos ahoga y nos limita; tenemos que vestirnos de una determinada manera, estamos limitados por horarios y obligaciones”, explica Aiello, “y por ende uno busca lugares que den la sensación de libertad”. Después, depende de la energía y la naturaleza de cada uno, qué lugar va a preferir. Es interesante observarse y preguntarse, ¿Qué me palpita más?

María, por ejemplo, escorpiana de pura cepa, cuenta que ella necesita tocar el mar, verlo, sentirlo. Los signos de agua probablemente conecten con esa energía de manera más intensa, pero también hay que observar la compleja Carta Natal como un todo, junto a otros factores. La síntesis es que uno busca lugares donde sienta placer, comodidad, liberación, y eso se encuentra en la naturaleza per sé. Si uno logra identificar qué energía de la naturaleza lo amplifica, lo ayuda y lo potencia, ¡Bingo!

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Fotos: son todas gentileza de Unsplash (PH Blake Cheek, Tobias Keller, Kunal Shinde y Shane Rounce).