Actrices y Aquellas noches, Aquellos días son los nombres de las dos series de atrapantes imágenes que componen la exhibición del fotógrafo francés LaurentThurin Nal en la Alianza Francesa de Av. Córdoba 946 (hasta el 21 de febrero). Por un lado, las más grandes actrices del cine francés fueron fotografiadas por el artista previo al encendido de la cámara o entre toma y toma. En una zona gris, desconocida, entre la realidad y la ficción. A su vez, anónimos personajes urbanos fueron retratados en fotografías en blanco y negro y estas, reunidas en grupos de a tres, son una invitación a que cada visitante pueda ser, a partir de lo que ve y de su imaginación, el guionista de su propia película. Maleva recorrió la muestra y habló con Thurin-Nal, para conocer y entender un poco más de su trabajo. Fictions, el nombre de la muestra.
¿Cómo fue tu acercamiento al mundo del cine?
Empecé sacando fotos de espectáculos. Y hace como diez años estoy trabajando más con la foto fija en cine. Es mostrar en una imagen lo que se puede mostrar o explicar en una hora y media de la película. No es sacar una foto de la escena, es sacar una foto que pueda hablar y que pueda hacer un resumen del film.
¿Cómo surgió Actrices?Yo no quería mostrar fotos fijas de una película que se pueden encontrar por todas partes. Y en el cine a veces hay que esperar mucho y una vez estaba al lado de Juliette Binoche hablando y en un momento hubo una luz muy buena. Le dije: “¿podemos sacar una foto?”. Es la foto del póster de la muestra, en la que no está Juliette la persona pública ni la privada o un personaje. Tampoco es un retrato de la actriz o una foto de la película. Ella está lista para actuar pero al mismo tiempo no es que está con la energía del personaje.
«Yo no quería mostrar fotos fijas de una película que se pueden encontrar por todas partes. Y en el cine a veces hay que esperar mucho y una vez estaba al lado de Juliette Binoche hablando y en un momento hubo una luz muy buena. Le dije: “¿podemos sacar una foto?»
¿Qué representa para vos Juliette Binoche? Está presente en muchas de tus fotografías.Es una de las grandes actrices francesas. Puede actuar en El paciente inglés o en Chocolate y al mismo tiempo en Bleu de Krzysztof Kieslowski, que es más una búsqueda artística. La podemos encontrar en todo tipo de películas. Encontré cien actrices francesas famosas, pero ella es la más profesional.
¿Por qué fue decidiste enfocarte más en actrices y no tanto en actores?
Con las actrices hay una cosa un poco distinta. Puede ser que tenga otra manera de fotografiar a una mujer y que varios directores quieran trabajar conmigo por eso. Lo seguro es que tengo una relación privilegiada con las más famosas actrices francesas y me parece que eso viene también del respeto que tengo para con ellas.
¿Y cómo describirías tu forma de fotografiar a las mujeres?
Lo que me interesa fotografiar es más una belleza interior. Trato de mostrar lo que hay adentro de la persona, por eso me gustan tanto las pinturas de Soutine. Me parece que la forma es tan fuerte que sentimos lo que siente la persona de adentro del cuadro. Me encanta la pintura expresionista, y me considero un fotógrafo expresionista.
Además de seguir conociendo a Binoche, también se puede ver a consagradas del cine como Jeanne Moreau, o en plena explosión y con un pie en Hollywood como la bella Mélanie Thierry. Es posible encontrar a Nathalie Baye estudiando un guión o al galán Guillaume Gouix en una pausa de rodaje. Micrófonos, monitores o apenas una parte de la cámara sirven para mostrar a las actrices en un momento muy particular, “a orillas” de la ficción.
«Con las actrices hay una cosa un poco distinta. Puede ser que tenga otra manera de fotografiar a una mujer y que varios directores quieran trabajar conmigo por eso. Lo seguro es que tengo una relación privilegiada con las más famosas actrices francesas y me parece que eso viene también del respeto que tengo para con ellas.»
¿Cómo llegaste a tomar estas fotos? ¿Cómo elegís el momento?
Lo importante para mí es elegir el marco. Porque cuando está listo, todo puede pasar adentro. Y en el momento estoy seguro de que va a ser una buena foto. Y puedo sentirlo porque estoy seguro de mi marco.
¿Y cómo es ese momento?
Es una cosa de alma, que se encuentra. Cuando doy con el marco y el momento preciso es un momento de encuentro. Y pasa algo que no puedo explicar, que para mí es arte y en el arte se necesita algo de misterio.
«Además de seguir conociendo a Binoche, también se puede ver a consagradas del cine como Jeanne Moreau, o en plena explosión y con un pie en Hollywood como la bella Mélanie Thierry. Es posible encontrar a Nathalie Baye estudiando un guión o al galán Guillaume Gouix en una pausa de rodaje. Todo en un momento muy particular, “a orillas” de la ficción.»
¿Con las fotos de Aquellas noches, aquellos días te diste cuenta al instante de que allí había algo interesante para fotografiar?
Cuando veo una escena o una cara que me interesa saco una foto sin pensar en un proyecto o en una temática. Viene de una emoción directa. Son fotos de la calle y pueden ser en un bar, en una estación. Al final voy con mis rollos al laboratorio y hay algunas que son bastante fuertes, misteriosas.
«Me dicen “explicame un poco más la historia de esta foto: dónde es, quién es, en qué año la hiciste”. Y yo no me acuerdo en qué momento la hice ni dónde. Lo que me interesa es lo que pasa en la imagen, la emoción. Pueden inventar y creer en todo. Y desde el momento en que pongo las tres fotos juntas pueden ser las fotografías de un film que no hiciste, de una película imaginaria.»
¿El público no se siente atraído en saber más de las personas que aparecen en estas fotos?Me dicen “explicame un poco más la historia de esta foto: dónde es, quién es, en qué año la hiciste”. Y yo no me acuerdo en qué momento la hice ni dónde. Lo que me interesa es lo que pasa en la imagen, la emoción. Pueden inventar y creer en todo. Y desde el momento en que pongo las tres fotos juntas pueden ser las fotografías de un film que no hiciste, de una película imaginaria. Como tengo experiencia en foto fija, con tres fotos sacadas en la calle puedo crear una historia como alguien que escribe un guión.
Cuatro trípticos componen Aquellas noches, aquellos días. Son fotografías de atmósfera bohemia, en blanco y negro y con fuertes contrastes de luces y sombras. Por ejemplo, en la serie Los olvidados, tres personas esperan, ven pasar el tiempo y son testigos de algo que no se sabe qué es pero que, imaginación mediante, cada uno podrá averiguar. En cambio en la serie Gatos monteses, una ¿pareja? corre y se persigue, en una escena, de un amor casi adolescente. Son fotos para utilizarlas a piacere de cada uno, según la historia que se quiera crear (y creer).
«Lo que me interesa fotografiar es más una belleza interior. Trato de mostrar lo que hay adentro de la persona, por eso me gustan tanto las pinturas de Soutine. Me parece que la forma es tan fuerte que sentimos lo que siente la persona de adentro del cuadro. Me encanta la pintura expresionista, y me considero un fotógrafo expresionista.»
¿Qué te sucede cuando ves tus fotos? ¿Se te ocurren siempre historias distintas?Puedo cambiarlas. Es como una puerta abierta a la imaginación. A mí me cuentan una historia y pueden contarle otra a la persona que ve la muestra. Pero también en un año o en dos horas puede cambiar. Funciona como la música. Escuchás una canción y te da fuerza. Y esa misma canción la volvés a escuchar y te parece triste y a otro lo hace feliz. Depende de cómo estés. Y la fuerza de la obra en la música como en la foto es de permitir abrir la imaginación.