La Mar, Tanta y ahora Barra Chalaca: breve guía para comprender (y diferenciar) a los restaurantes de Gastón Acurio en Buenos Aires

Con el reciente desembarco de Barra Chalaca, ya son tres las marcas del célebre chef limeño en Argentina/¿Pero qué ofrece y cuál es la impronta de cada propuesta?/Desde la más exclusiva a la más callejera/Además: qué pedirse en cada una.

El primer local de Barra Chalaca – la propuesta más popular y callejera de Acurio -, abrió hace pocos meses en Palermo (y van a llegar a nuevos barrios en breve). 

La Mar, Tanta y ahora Barra Chalaca: breve guía para comprender (y diferenciar) a los restaurantes de Gastón Acurio en Buenos Aires. Por Camila Barreiro para MALEVA.

Por cuestiones de geografía, un país no puede moverse de su ubicación. Está ahí, fijado en el mapa. Sin embargo, hay quienes encuentran maneras de hacerlo viajar y compartirlo con aquellos que están fuera de los límites territoriales. Si miramos a Perú, un claro ejemplo es el chef Gastón Acurio, que logró exportar sus platos y tradiciones a más de 60 restaurantes alrededor del mundo.  Algunos de ellos en Buenos Aires. 

El sello de la gastronomía peruana está, gracias a él, en unas diez marcas distribuidas por América Latina, Medio Oriente, Europa y Norteamérica. En la Argentina hay tres nombres propios con identidades diferentes: La Mar, Tanta y Barra Chalaca. 

Los socios del Grupo Acurio en el país cuentan que, al comenzar con La Mar en 2015, el mayor desafío fue el pescado. “Por esos años, el consumo de variedad fuera del salmón rosado y la merluza era casi nulo, hicimos un enorme estudio de mercado viajando por todo el Atlántico en búsqueda de proveedores que nos puedan abastecer. Mes a mes, y gracias al consumo que podíamos confirmar, llegamos a pescadores artesanales que nos empezaron a traer anchoas, pez limón, palometa de Mar del Plata y productos de zonas frías, como navajas, caracoles y hasta erizos de Ushuaia”, narra Marcos Meincke, socio nacional.

Cada una de las marcas de Gastón Acurio en la Argentina abre un abanico de posibilidades y propuestas. Y, bajo el ojo y capacitaciones del chef, se forman espacios que comparten tradiciones y sabores únicos. Pero para que no haya confusión, en esta nota de MALEVA te explicamos cómo es cada una de sus propuestas en Argentina, y en qué se diferencian entre sí. 

«Hicimos un enorme estudio de mercado viajando por todo el Atlántico en búsqueda de proveedores que nos puedan abastecer. Mes a mes, y gracias al consumo que podíamos confirmar, llegamos a pescadores artesanales que nos empezaron a traer anchoas, pez limón, palometa de Mar del Plata y productos de zonas frías, como navajas, caracoles y hasta erizos de Ushuaia”, le narra a MALEVA Marcos Meincke, socio nacional del grupo…»

1) La Mar: la «Reina» de Acurio en Buenos Aires / Arévalo 2024 – Palermo Viejo.

Como embajadora del grupo en el país, la consideran la “reina” de los restaurantes de Acurio. Su chef es Astrid Acuña, quien nació en Lima y trabajó en Astrid & Gastón, entre otros restaurantes (los invitamos a leer la nota que le hicimos a Astrid en MALEVA). 

“La carta la hacemos en conjunto con La Mar de Lima. Ellos nos mandan un formato respetando los mariscos y pescados de Argentina”, explica Astrid que recomienda probar el tiradito de pesca y la degustación de frutos de mar. 

El local de Buenos Aires ofrece también piezas de sushi y, sobre la elección de productos, cuenta: “Hay cosas que se encuentran en Perú y acá no, pero Argentina no tiene nada que envidiar. Con los insumos que conseguimos acá podemos trabajar muy bien. Los langostinos patagónicos son impresionantes, los chipirones y navajas, también. Siempre hay algo. Con lo cual, si bien no son los mismos productos, se pueden hacer platos muy interesantes y jugar con las estaciones”.

La barra está a cargo de Brenda Asís, que desarrolló un menú que mezcla los mejores sabores de Perú. ¿Por ejemplo? Un típico Chilcano (pero de la suerte) con Pisco Quebranta, jugo de aloe vera, jugo de limón y agua tónica. 

2) Barra Chalaca: el desembarco más reciente que emula a las barras callejeras de Lima / Arévalo 1392 – Palermo Viejo.

Con una identidad super diferente, la propuesta de Barra es transportar a los comensales a las típicas barras cevicheras de Perú. Esas que mezclan vista a la cocina, manteles de papel, paredes repletas de frases y recuerdos, con platos abundantes. Ahí donde te sentís en el puerto y parte de las costumbres populares, mientras probás platos clásicos pero bien resueltos a precios amigables. 

El tiradito de chucuito es un plato imperdible que tiene pesca fresca, leche de tigre, palta y oliva. Además, este local tiene la opción de optar por el picoteo: con empanadas chalacas, wantacos o croquetas. 

Como te ven te tratan y si te ven mal, te ofrecen un Curatodo: una bebida que preparan a base de hierba luisa, manzanilla y ananá, que promete hacerte olvidar los problemas (al menos un ratito). 

Spoiler alert: en junio van a abrir el segundo Barra Chalaca en Salguero y Libertador y en agosto inaugurarán otro en Roosevelt y Montañeses. 

3) Tanta: las recetas «familiares» en un entorno moderno y de negocios / Esmeralda 938 – Centro porteño.

Perú tiene más de 4000 variedades de papas nativas y una biodiversidad enorme que le permite a cada hogar tener una receta propia con la magia de las amazonas, el mar y la montaña. En el caso de Tanta, el foco está puesto en la cocina familiar y de tradición.

Es la apuesta más espaciosa de Gastón Acurio en el país, con más de 800m2 cubiertos, con vistas a la calle Esmeralda (justo en la Torre Bellini) y hasta un jardín de cristal que busca acercar la selva al epicentro de la ciudad.

El plato fuerte destacado es el Pescado a lo Macho, que se sirve con un arroz cremoso con fondo de langostinos y verduras y se corona con pesca del día a la plancha, mayonesa de rocoto y criolla clásica. Pero la clave es disfrutar de las entradas, como por ejemplo la típica Causa de Pollo o las Papas a la Huancaina. 

Un dato no menor es que Tanta tiene una sección de pastas, para aquellos que no se animen a probar tantos sabores nuevos. Sí, como esas abuelas que preparaban un menú para cada nieto. 

Claro que en todos los locales se sirven Pisco Sour con pisco peruano y se brinda por un viaje único a través de la gastronomía de Perú. 

/// Fotos: son todas gentileza para prensa de los restaurantes de Acurio en Argentina.

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