En “A diez manos”, la cumbre gastronómica en José Ignacio de cinco de los chefs más gravitantes del país ideada por Mauro Colagreco, o en la fiesta de fin de año de Narbona en Punta del Este, o en un ciclo en el último piso del Sheraton de Mendoza, o en el Faena, o en Pony Line. En cuanto evento, acción, o fiesta interesante y sofisticada se haga últimamente fue apareciendo la sigla SRZ. Las iniciales de Soledad Rodríguez Zubieta, la “DJ»(aunque con válidas razones ella reniega de que se la defina así) de la radio Metro desde hace diez años, quien viene desarrollando un concepto novedoso en la bella profesión de musicalizar: la de decoración sonora. Que es justamente saber acompañar con el sonido exacto, más conveniente, distintas situaciones. Erigir paisajes sonoros ¿Y ella cómo es? Tiene mucho estilo (de diez chicas en una cuadra, seguro es la que te parece más canchera por como pisa con onda, por su look – que se ve en las fotos -), no es antipática pero tampoco es muy expansiva: no sonríe de más y responde lo justo. Tampoco es pedante (aunque su nombre se haya mimetizado con la escena más top). Es una persona relajada, orgullosa de su trabajo, y está viviendo un gran momento. También está llena de proyectos (sobre todo la entusiasma que Modular, su emprendimiento y radio online siga creciendo). Maleva charló con ella, una tarde tibia de linda resolana, en un bar de Nuñez.
Musicalizás ¿Pero te gusta bailar?¡Sí, me encanta bailar, siempre me gustó! A veces en las fiestas me aparto un poco para bailar, y siempre me gustó bailar Hip Hop y sus derivados.
Leí que nunca te van a ver volver tarde a tu casa, tipo altas horas de la madrugada
(Risas) ¡Eso estuvo un poco sacado de contexto! Pero es cierto que nunca busqué eso ni me interesa pasar música en discotecas. Puedo hacer una fiesta y me encanta, te voy a hacer bailar a la gente, pero siempre de una manera diferente, corriéndome del lugar común. Lo que yo hago es diferente, tiene que ver con musicalizar situaciones, momentos, espacios, y no con la pista.
Te gusta combinar lo musical con lo diurno ¿Nos explicás ese concepto?
Justamente, es una manera de explicar que lo que hago es más amplio que ir y pasar música en una fiesta. Tengo una visión sobre lo que hago, una formación, veo más cosas que trabajar de DJ.
«Nunca busqué eso ni me interesa pasar música en discotecas. Puedo hacer una fiesta y me encanta, te voy a hacer bailar a la gente, pero siempre de una manera diferente, corriéndome del lugar común. Lo que yo hago es diferente, tiene que ver con musicalizar situaciones, momentos, espacios, y no con la pista.»
¿Y cómo fue esta evolución hacia la “decoración sonora”?
Es una consecuencia, no lo busqué, yo arranqué por el lado de la musicalización pero después me fui perfeccionando cada vez más.
¿Hay un estilo tuyo de musicalización muy preciso o depende del caso?
Correrme del lugar de DJ tiene que ver con eso, al DJ vos lo llamás y hace su onda en tal pista. Yo no, yo puedo hacer una comida para sesenta personas donde busco generar estados de ánimo, puede ser tanto bailar como acompañar el placer de un plato increíble.
Mencionanos alguna situación de ese tipo que se haya dado últimamente y que te haya complacido mucho.
Estuvo muy bueno el A Diez Manos en Uruguay. Para mí musicalizar esa cena fue muy importante porque fue un momento gastronómico muy alto, y a la vez algo muy sencillo, en José Ignacio con una calle cortada. Fue una puesta simple pero muy linda, musicalicé esa escena y me parece que fue algo que gustó mucho (nota de la revista: los 5 chefs anfitriones fueron Mauro Colagreco, Darío Gualtieri, Narda Lepes, Fernando Trocca, y Germán Martitegui.
¿Qué opinás de la noche en Buenos Aires, del circuito de fiestas, de la música que se pasa?
Opino que no hay nada.
¡Fuerte la respuesta!
Es que sí, hay pobreza de propuestas, no hay muchos espacios donde se escuche buena música y haya situaciones de club, eso falta desde hace mucho tiempo.
¿Por qué no hay escena?
Es complejo, hay cuestiones locales y cuestiones internacionales, no hay más mainstream, está todo muy raro, no sé, Cromagnon tuvo un poco que ver.
¿Qué te cansa o te molestas de la escena electrónica (de la que queda)?
Creo que hay cierta parte de la escena que no renovó su sonido, que para mí ya está, que quedó en el dos mil, ese algo que tiene que ver con la electrónica más pura, que ya no me mueve, no me interesa, me parece que ya fue. Hay ciertos estilos de la música electrónica que no evolucionaron en su sonido y eso me aburre, pero que se yo, hay chicos jóvenes de 23 años que lo están descubriendo, pero yo ya lo escuché hace mucho. Es que en realidad no hay escena, no pasa nada, y antes había.
«Estuvo muy bueno el A Diez Manos en Uruguay. Para mí musicalizar esa cena fue muy importante porque fue un momento gastronómico muy alto, y a la vez algo muy sencillo, en José Ignacio con una calle cortada. Fue una puesta simple pero muy linda, musicalicé esa escena y me parece que fue algo que gustó mucho»
¿Tarareás en la calle?
No, pero sí me pongo a cantar si escucho algo que me gusta, como cualquier persona.
¿Y existe la musicalización de tus propios momentos?
Sí, eso sí. Sobre todo lo hacía antes. Si me iba de vacaciones planeaba la música en función de como podía estar el clima, de cómo iba a ser el lugar, de su cultura, también que libros iba a leer. ¡Muy conceptual! Cuanto más me empecé a dedicar a esto menos lo pude hacer porque, en casa de herrero…
¿Cómo encarás el trabajo de ir descubriendo cosas y no hacer lo mismo que el resto?
Escucho música todo el tiempo e intento bajarme álbumes completos. Por otra parte frecuento blogs de música, escucho radios online, mucho soundcloud. Son distintas maneras que me van aportando música para las cosas que hago. Toda mi vida me pasó que escuchaba un disco y elegía un tema que no era el que circulaba. Es una cuestión de criterio de selección.¿Y qué tipo de música te gusta?
En líneas generales siempre me gustó lo rupturista, me interesan las formulas cuando recién aparecen, no presto mucha atención a lo que hacen los DJS, sí a las bandas nuevas. Pero tampoco sigo una banda en particular.
¿Cuándo estás al frente de la musicalización de un evento, descubrís comportamientos en la gente que te llaman la atención, que te resultan curiosos?
Descubrí la efectividad de ciertos temas y que la gente responde muy bien, vas leyendo y descifrando perfiles, este publico tengo que ir por acá y este por allá. Busco la cosa inesperada siempre, me gustan los cortes, generar un clima parejo y de golpe meter un corte e ir a un lugar que nada que ver. También me pasa que me cruzo con públicos que siento que son muy míos porque se fascinan con la música que pongo, gente que sabe de música pero no tiene nadie que les hable porque en las radios no pasan la música que les gusta, en las revistas tampoco la encuentran y hacen una búsqueda totalmente independiente y llegan a veces a mí música.
«Hoy en la noche de Buenos Aires, en la escena, no hay nada, hay pobreza de propuestas, no hay muchos espacios donde se escuche buena música y haya situaciones de club, eso falta desde hace mucho tiempo.»
¿Cómo vivís estar haciéndote cada vez más conocida? ¿Cómo vivís este momento?
¡Qué momento (risas)! ¡Son diez años de trabajo lo mío! Como me estoy haciendo un poquito más conocida ahora hay cierta gente que tal vez piensa ¿de dónde saliste? Pero son diez años, pasa que antes mi espacio era más chiquito. Igual en este “momento” estoy muy contenta, me copa mucho. Disfruto estar pensando nuevos proyectos relacionados con la música. El año pasado desarrollé una plataforma de radios online, ahora estoy con un proyecto increíble de una rocola online que no puedo contar mucho más. Y después está Modular con gente que le presta cada vez más atención. Lo lindo de esta profesión es que es muy nueva y no tiene límites.
Contanos una faceta tuya hedonista
¡Yo soy hedonista! Mis amigas siempre me lo dicen. Lo mío es puro placer, no paro de trabajar, pero no paro de trabajar porque me da placer lo que hago, es un entusiasmo tremendo, a veces pienso que no puede ser que esté trabajando si esto es puro placer. Es mi vida, ser tan fanático de lo que uno hace es un privilegio. Y después me gusta mucho comer y beber, soy del espumante y el vino.
¿Cuáles son tus proyectos para 2014?
Este año seguro que quiero desarrollar un poco más mi radio Modular, que haya infinitos canales más, y también me interesa que estén Rama y Rubin. Rama es musicalizador, Rubin además es músico. Están en radio modular. Modular ya tiene una audiencia que no es tan chiquita porque son dos mil personas que la escuchan todos los meses, dos horas de promedio, va creciendo muy boca a boca y el que la escucha es muy fanático.