Koko Bao Bar incluso tiene su tienda online para vender su merch.
Desde medias hasta ¡Camisas! Es tendencia: los cafés y restós porteños están copando la ciudad con sus líneas de ropa. Por Belén Rodríguez Traverso.
No es loco ver a alguien llevando una tote bag estampada con el logo de una cafetería que conocemos, o usando una remera de su restaurante favorito. La comida reúne, los locales tienen sus clientes fieles y estos piden cada vez más “un pedacito de su lugar favorito” para llevarse a casa. A las bolsas de tela ecológicas – que ya vemos dando vueltas por todos lados -, se les suman remeras, gorras, pins, pilusos… ¡Incluso medias y camisas!
Cuando la marca tiene fuerza, y una identidad visual bien pensada, no hay límites; pueden plasmarla donde quieran. Desde MALEVA, hablamos con los creativos gastronómicos que encontraron en el merch una forma de perpetuar su imagen de marca y con otros que fueron impulsados por sus propios clientes a crear y vender estas líneas de accesorios. Les compartimos seis historias y toda la info de dónde conseguir los productos.
1) Koko bao bar: La cultura “cool asian” pisando fuerte.
No es coincidencia que un restaurante con una imagen de marca tan power haya nacido de tres dueños que vienen del mundo del arte y el diseño. Mateo, Ari y Den pasaron del rubro editorial y audiovisual al gastronómico sin escalas, con el lanzamiento de Koko Bao Bar, el restaurante asiático de platitos y baos que ya tiene tres sedes en capital.
Desde sus inicios, las tote bags formaron parte de su universo de marca. Pero, con cabezas tan creativas, estas fueron pensadas para generar un juego de intrigas; sólo llevaban el logo pero ningún nombre ni dirección. Al tiempito, se empezaron a cruzar en la calle o en las redes con gente luciendo la bolsa y la emoción fue total, “es como cuando tenés una banda y ves a alguien caminando al lado tuyo con la remera de tu banda”, cuenta sonriente Den. “Es una sensación tan linda”.
Ya con el negocio funcionando hace cinco años, se encuentran con más tiempo y energía para dedicarse a trabajar con ilustradores, diseñadores y proveedores que los ayudan a hacer tangibles sus sueños y fantasías. Para lograr este tipo de proyectos, la colaboración es clave y ellos optaron por buscar talentos a nivel federal para descentralizar y darle visibilidad al trabajo de personas de todas partes del país. “Nos dimos cuenta que es un espacio re lúdico para poder hacer cosas y generar nuevos contenidos”, explica su creadora. “Creo que nuestras ideas son infinitas, pero lo que nos limita por momentos es el cómo. Tenés que generar un producto accesible para las personas”.
Hoy en día, Koko Bao tiene más que una simple línea de merchandising. Ampliaron su radio y se insertaron en el mundo de la tienda online para venderle a todo el país. Ahí podés encontrar remeras y remerones, tote bags de distintos tamaños, gorras, mochilas, pilusos, pines, camisas… ¡Y hasta medias! La carita del niño, logo de la marca, es el indiscutido protagonista. “Para mi es super divertido”, confiesa Denise, “porque fusiona la gastronomía que es algo que amo con el marketing y la publicidad que es algo que también me encanta”.
En miras al futuro, la proyección es gigante. Tal es así, que en menos de un año podemos cruzarnos con una “Koko Tienda” física, dedicada exclusivamente a vender los productos que hoy están online y muchos más. “Esa es la dimensión que puede tomar una marca una vez que es marca”, explica su dueña. “Realmente es eso lo que generás: es un concepto tan grande que puede abarcar cualquier ala, podés hacer un montón de cosas, lo que quieras”.
Se consigue en su tienda online: https://kokotienda.com/productos/
2) Cuervo Café: la búsqueda del tesoro de una línea de accesorios con diseño.
La comunidad lo es todo en un local gastronómico. Los creadores de Cuervo Café lo tienen más claro que nadie, porque gran parte de lo que los ayudó a construir su marca, viene de esa comunidad que lograron forjar. Los chicos de Hueso, el estudio de diseño que hoy está a cargo de toda su imagen gráfica, eran clientes fieles (fieles, fieles, hablamos de todos los días) y quedaron tan copados con la propuesta del café que les propusieron colaborar desde lo que mejor saben hacer. Ahí, en 2018, nació esta increíble amistad que perdura hasta el día de hoy, donde se siguen reuniendo para reinventar la marca y salirse siempre de “lo que hace todo el mundo”.
“A partir de ahí se empezaron a generar piezas, casi como un juego entre nosotros de ida y vuelta, y durante muchos años no las usábamos porque no teníamos tiempo ni un objeto para plasmar todo ese material que hicimos”, nos cuenta Agustín, uno de los fundadores de Cuervo. “De a poco, con los mismos clientes que se iban acercando nos íbamos haciendo amigos y descubrimos que tenían proyectos que nos copaban también”.
Así, vinculando partes del ecosistema de clientela de Cuervo, sacaron sus primeras remeras con Revolver. Fue una tirada para el staff que, por decisiones de marca no usan uniforme, pero querían tener algo que los identifique. “Los que trabajamos acá somos hinchas de Cuervo”, confiesa entre risas su fundador. Esa producción inicial no tenía objetivo de venta alguno. Pero al instante apareció el público pidiendo las suyas y después de regalar un par decidieron hacer una tirada de unas 20 remeras. Para probar… volaron al toque.
Tiempo después, conectaron los diseños de Hueso con Bestia y salieron unos buzos producto de esa nueva alianza. Lo último que lanzaron la temporada pasada lleva la impronta de su imagen actual: imponente, con líneas gruesas y un look que va entre el cómic y los emoji, sin perder el aire cool de siempre. De esta reversión salieron remeras, tote bags y gorras.
En Cuervo trabajan el menú y la imagen por temporada, como las marcas de ropa. Es tal la vorágine de lugares nuevos que abren y estilos que se saturan, que el equipo se sienta a reformular su forma de comunicar año a año. Desde la forma de hablar hasta la paleta de colores y tipografías; pasaron por más de cuatro diseños de marca y siguen contando. De esa forma, logran siempre destacarse y subsistir en este panorama de competencia creciente. “Siempre que generamos un contenido así tratamos de hacer algo con eso porque le ponemos un montón de esfuerzo y cabeza a rediseñar todo el lenguaje, y queremos que quede plasmado en algún producto”, confiesa Agustín.
Hoy, si tienen suerte, pueden encontrar alguna gorra escondida tímidamente tras la barra entre las tazas, o unas remeras dobladas en algún mostrador. Su línea de merch no tiene mucha publicidad, es más un juego de búsqueda del tesoro: el que lo descubre, se lo lleva. Con producciones tan chicas, tener un objeto Cuervo es casi un privilegio de pocos, como formar parte de un club de marca vip.
Se consigue en sus locales: El Salvador 4580, Palermo/ Costa Rica 5801, Palermo/ Guevara 393, Chacarita.
3) Fukuro Noodle Bar: el “buhito” que se instaló en los looks de los clientes más fieles.
Si tenés clientes que vienen a consumir a tu restaurante fielmente durante 9 años, algo tenés que estar haciendo bien. Ese, sin dudas, es el caso de Fukuro Noodle Bar, el bar de ramen que logró sobrevivir a la pandemia gracias a esa lealtad incondicional y que ahora está a meses de celebrar una década de apertura.
“Tenemos una clientela muy fiel, de alguna forma es como un restaurante de culto”, cuenta Marilyn González, una de sus dueñas. “Durante mucho tiempo los clientes nos preguntaban, ¿tienen algo del buhito? ¿Algo que nos podamos llevar de recuerdo?” Y no fue hasta que se chocaron con la realidad desesperante del 2020 que el sueño de esas personas se hizo realidad. El verdadero: no hay mal que por bien no venga.
Durante ese período peligrosísimo para la gastronomía, sucedieron dos cosas que impulsaron la línea de merch de Fukuro. Cerrados y con un futuro estallado de dudas, decidieron vender varios de los muñequitos que caracterizan a la deco urbana de su local. Al ver el interés de la gente se les prendió la lamparita y se sembró el proyecto de lanzar una línea de juguetes propios del ramen bar. Pero la acción relámpago vino por otro lado, por el merchandising más clásico.
Como muchos restaurantes, tuvieron que implementar un sistema de delivery que antes no manejaban. Y es ahí donde decidieron agradecerles a los clientes infalibles, los que ayudaban a mantenerlos a flote. Lo hicieron nada más ni nada menos que enviándoles junto con su pedido unas tote bags con el famoso “buhito” de su logo estampado. Con el tiempo, a la línea de bolsas ecológicas le sumaron remeras y buzos con esa imagen asiática, divertida y urbana que define su identidad de marca.
En el 2023 festejarán su cumpleaños número 10 y, en ese marco, la idea es lanzar una línea especial de aniversario, que emane esa gratitud a la lealtad de los clientes de siempre. Con venta exclusivamente en su local, ya produjeron 4 lotes desde esa primera tirada. “Tiene muy buena recepción por parte de la gente”, confiesa Marilyn. “Lo compran para un regalo o para llevarse una partecita del lugar al que vienen hace mucho tiempo”.
Se consigue en su local: Costa Rica 5514, Palermo.
4) Kiddo: cumpliendo los sueños del consumidor fanático.
Del catador de hamburguesas reconocido en las redes como “Burger Kid”, nació este agosto una hamburguesería que parece que ya está cumpliendo con las pesadas expectativas de sus seguidores. “Con Kiddo mi idea fue lograr una hamburguesa que sea distintiva, con una imagen que también lo sea”, cuenta Alejandro, su creador. “Me propuse a mí mismo: si no logro que la imagen de marca sea llamativa y única, no hago nada”.
Como el diseño visual fue tan importante como el producto desde el principio, al instante en que se logró una imagen con la contundencia que el youtuber quería, se decidió hacer una línea de merchandising. “Eso también surge porque, de las cosas que me gustan mucho, me gusta ser como un fanático. Por ejemplo, si me gusta M&M, quiero tener algo además del producto comestible”, detalla el dueño. “Siempre me gustó el merch, me parece canchero, fresco y joven. Como a mi me gusta como consumidor, lo quiero dar también como dueño de una marca.”
Con una paleta de color bien personal y su mascota de marca siempre presente, se estamparon remeras de varios tamaños, gorras, tote bags y stickers que se pueden conseguir en flashcookie, la gran tienda online. “Es un desafío hacer una prenda más vestible y no tan de la marca, pero bueno es divertido”, confiesa Alejandro, quien trabaja en estos nuevos lanzamientos con su novia y el equipo de diseñadores de siempre. La idea es seguir ampliando esta línea de objetos y Burger Kid sueña con incorporar muñecos, si bien no es algo tan fácil de hacer (todavía) en Argentina.
Se consigue en su tienda online: https://kiddo.flashcookie.com/
5) Koi: ropa con un guiño al street art japonés.
Es imposible entrar a un local de Koi, o incluso a sus redes sociales, y no quedar fascinado con la imagen que manejan. Lograron, desde el principio, llevar el concepto de “cool asian” al extremo, con un fuerte estilo urbano que viene de la mano del tipo de comida que ofrecen: street food asiática con unos toques locales. “No nos gustaba la idea de que un restaurante siempre tenga que expresarse de la misma manera”, cuenta Juan Manuel López, uno de sus dueños. “Nosotros dijimos: me parece que acá podemos expresar un montón de formas más, siempre haciendo un guiño a la imagen del street art”.
Sus locales tienen una fuerte personalidad, con paredes full empapeladas con afiches de animé, luces de neón, tiras de cómics, una predominancia del color rojo y diseños en todos los detalles, incluso en las servilletas. Así es como aparecieron los primeros clientes pidiéndoles las remeras que el equipo usaba para trabajar. Una vez más: el público celebrando y buscando formar parte de la comunidad de su restó favorito. Decidieron ampliar un poco la gama y lanzaron buzos, conjuntos two piece, vestidos, stickers y llaveros, que les sacaron de las manos al instante. Fue ahí cuando entendieron que esto era grande.
Su creación más reciente son las gorras Koi, que sacaron a la venta para Navidad. “El lanzamiento de la gorra es para nosotros como un punto de partida de todo lo que se viene en el 2023 que es sacar la marca de merch y de indumentaria de Koi”, detalla su creador, preparándonos para un gran boom. “La idea es hacer algunas cápsulas en colaboración con diseñadores invitados y sacar pequeñas colecciones por temporada que representen a la marca pero que tengan también su propia personalidad”.
Se consigue, por ahora, en sus locales: https://koidumplings.com/
6) La Birra Bar: merchandising en manos de su club de fans.
Nació en 2001 como un proyecto familiar en el barrio de Boedo y en unos años llegó al resto del mundo, con sucursales en Madrid y Estados Unidos, donde ganó el año pasado el premio a la mejor hamburguesa del país. La Birra Bar logró todo lo que quería y más, porque el público fue siempre su mejor motor. Tanto es así que en el medio de este camino hacia la luna, apareció un club de fans y, con ellos, nació una línea de merch que va más allá de lo estético: marca pertenencia.
En su tienda online, donde ofrecen sus productos, podemos encontrar primero los clásicos como llaveros, pins, stickers, parches y remeras, todos exhibiendo el famoso pan con alas que identifica fuertemente a la marca. Si vamos un pasito más, también venden copas, vasos de whisky, paraguas y mini souvenirs. Su objeto de deseo: los vasos coleccionables con diseños de las ciudades donde actualmente está La Birra Bar. Por el momento son tres, pero sin dudas planean que esos diseños se vayan multiplicando.
Cuando hay un fan de fondo, la imaginación (y el entusiasmo) no tienen límites. Así es como decidieron explorar un poco más profundo en el universo del merch y surgió dos años atrás el proyecto “combos del mes”. Cada nuevo mes lanzan 40 combos a través de la tienda online que incluyen, no solo un menú real para consumir en la sede que elijan, sino también una miniatura coleccionable numerada que representa alguna de sus hamburguesas. Si hablamos de coleccionables, y encima limitados, ¡hablamos de otro nivel de comunidad fan!
Se consigue en su tienda online: https://labirrabar.mitiendanube.com/
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Fotos: son gentileza para prensa de todos los locales mencionados.