UNA APUESTA POR LA BELLEZA EN MOVIMIENTO


Roxana Grinstein, directora del ballet contemporáneo del IUNA, eminencia de la danza
 
Una apuesta por la belleza en movimiento. Por Andrés Kilstein.
En su living cuelga una figura de madera, esbelta y contorneada, que representa a una bailarina moviéndose con destreza y suavidad. Uno más entre varios ornamentos, pequeños y sutiles, de nacionalidades diversas que pueblan la casa. Pero la silueta colgante parece tener un lugar destacado en la sala, que nos arroja una tenue evidencia sobre el oficio de la dueña. Roxana Grinstein es una de las más reconocidas coreógrafas de danza contemporánea de nuestro país. Directora del ballet contemporáneo del IUNA, titular del teatro El Portón de Sánchez y docente de la actividad, sus obras han sido exhibidas alrededor de todo el mundo. Es precisamente en este teatro donde se estrenará el sábado 24 de agosto su nueva creación Lub Dub. Esta pieza y la disciplina en la que se enmarca fueron los temas centrales de la charla con Maleva.

SU TAREA POCO TIENE QUE VER CON UN PROGRAMA DE TELE

Aunque recientemente masivos programas televisivos con certámenes de baile dieron exposición a coreógrafos, permitiendo una explosión de las academias de ritmos populares y de la danza como pasatiempo, Roxana sabe que su tarea es otra cosa: mucho más ardua. “La danza contemporánea es más difícil para ver y menos popular. Nuestro espectador pertenece principalmente al ambiente artístico, aunque todos los coreógrafos desearíamos que nos viera un público general” reconoce.

Moderna y experimental: la danza contemporánea
 

 “La danza contemporánea rompe con la forma de ver el cuerpo de la clásica. La clásica te propone un torso estático con brazos y piernas en una posición radial. Con la contemporánea aparece la redondez del cuerpo, el uso de la relajación, del piso, de la inversión del eje”.

 

LOS GUIÑOS POPULARES EN ALGUNAS OBRAS

Con todo, las obras contemporáneas pueden ser disfrutables cada vez que tienen referencias populares, como es el caso de Cenizas de tango, donde el gancho, obviamente, es el sonido del arrabal: “el público general se relaciona bien con mis obras porque no soy una directora muy hermética. Siempre hay algo donde el espectador puede poner el pie, por ejemplo, la belleza de la luz o la emoción que transmiten los cuerpos”.

EXPERIMENTACIÓN = SUTILEZA Y SENSIBILIDAD

Quizá uno de los motivos por el cual la danza contemporánea demanda tanta sutileza y sensibilidad en la lectura es por su inclinación por lo experimental. La disciplina misma pareciera ser una experimentación sobre la rigidez de la danza clásica. “La danza contemporánea rompe con la forma de ver el cuerpo de la clásica. La clásica te propone un torso estático con brazos y piernas en una posición radial. Con la contemporánea aparece la redondez del cuerpo, el uso de la relajación, del piso, de la inversión del eje”.

La coreógrafa asegura que ya no existe la rivalidad danza contemporánea vs danza clásica
 

¿QUÉ HAY DE LA RIVALIDAD CON LA DANZA CLÁSICA?

La rivalidad que alguna vez existió entre clásica y contemporánea se ha extinguido para dar lugar a un respeto mutuo. “Un buen ballet clásico es de una belleza y exquisitez increíbles. Pero lo vas a ver con el pensamiento del momento en qué fue hecho. En la actualidad el esquema y la imagen del cuerpo son diferentes” – afirma la coreógrafa, quien remarca que los biotipos (es decir, los tipos de cuerpos valorados en cada disciplina) no coinciden y la bailarina contemporánea es menos esbelta y más acrobática, menos sutil y con más velocidad y destreza.

A UNA BAILARINA SE LA PUEDE RECONOCER HASTA CUANDO SACA LA BOLSA DE BASURA A LA CALLE

Como buena coreógrafa, Grinstein sabe distinguir a una bailarina con sólo mirarla y cree que la condición se manifiesta en cualquier actividad de la vida cotidiana. “Cuando recoge la bolsa de la basura, con un ángulo cercano a los 90 grados, ya te das cuenta que es una bailarina. Si la llamás y se da vuelta, tiene una manera de girar que no es la del común de la gente. Y muestra una forma más libre de relacionarse con otros cuerpos”.

Ensayo de su nueva obra: Lub Dub

 
 

NI DESORDEN NI IMPROVISACIÓN (AUNQUE PAREZCA)

Es difícil imaginarse, para quien no está comprometido en la actividad, la manera de crear una coreografía, representarse y ordenar sus componentes y transmitirlos a los intérpretes. Para Grinstein se trata de una idea inconciente que sola y lentamente comienza a emerger. “Pareciera que soy desordenada para componer, pero finalmente soy ordenada. No parto de la improvisación, sino que tengo un concepto, pongo una pauta y desde allí mi elenco improvisa. Soy de direccionar mucho” – confiesa.

INSPIRACIONES INSÓLITAS (COMO UN CANARIO QUE NO PODÍA VOLAR)

Por supuesto, la obra recibe inspiración en fuentes muy diferentes, que Grinstein reconoce incluso como insólitas. Por ejemplo, en su pieza El destino que usted desea alcanzar se encuentra momentáneamente bloqueado (2002) el detonante es el mensaje de la telefonista que todos conocemos. “Me preguntaba cómo puede ser que una llamada telefónica sea nuestro destino. Me puse a pensar la importancia de la comunicación, el destino colocado en el teléfono o un dispositivo tecnológico; y sobre eso trabajé”. Más exótica aun es la inspiración para dar a luz En cero (2006), basada en su experiencia de poseer una canario que no podía volar. “Cuando tuve un pájaro con problemas neurológicos, lo llevé al veterinario y me dijo que era un pajarito de piso. Esa frase me impactó. Quise trabajar con la idea de perder la esencia que te diferencia, como era el caso de mi pajarito de piso”.
 

«Grinstein sabe distinguir a una bailarina con sólo mirarla y cree que la condición se manifiesta en cualquier actividad de la vida cotidiana. “Cuando recoge la bolsa de la basura, con un ángulo cercano a los 90 grados, ya te das cuenta que es una bailarina. Si la llamás y se da vuelta, tiene una manera de girar que no es la del común de la gente.»

 

LUB DUB (SU NUEVA OBRA) Y LAS “PEQUEÑAS INDIGNIDADES COTIDIANAS”

Lub Dub, la obra que estrena el 24 de agosto en El Portón de Sánchez, refiere al sonido del latido del corazón, el que deben escuchar los médicos para saber que todo está bien. Aquí Roxana Grinstein explora “las pequeñas indignidades de la vida cotidiana” y para ello recurre a dos metáforas. La primera se construye con un cassette para que los chicos aprendan las tablas de multiplicar por repetición; un cassette que encontró de casualidad buscando música para sus hijas y que, para la obra, fue intervenido y revisionado por Martín Ferrés, el bandoneonista de Bajo fondo.

Lub Dub plantea el sometimiento del cuerpo con las zapatillas de danza clásica

 
 

LAS ZAPATILLAS DE DANZA CLÁSICA SOMETEN AL CUERPO

La segunda metáfora recae en las zapatillas de punta de la danza clásica. “Para subirse a las puntas hay un sometimiento del cuerpo. Es curioso como las zapatillas de punta direccionan a un tipo de movimiento y te ubican el cuerpo de una manera, diferente a estar descalzo. Colocar el cuerpo contemporáneo dentro del calzado de clásico nos demandó un tiempo de investigación”.
 

«Lub Dub, la obra que estrena el 24 de agosto en El Portón de Sánchez, refiere al sonido del latido del corazón, el que deben escuchar los médicos para saber que todo está bien. Aquí Roxana Grinstein explora “las pequeñas indignidades de la vida cotidiana.”

 

DESPUÉS DE TODO: UNA APUESTA POR LA BELLEZA

La obra hace una clara apuesta por la belleza, sin por eso abandonar la reflexión. Y esto, afirma Grinstein es una marca de autora que aleja a la creación de las tendencias recientes en el campo contemporáneo donde “la violencia se ha instalado como paradigma o como moda. Hay mucho prejuicio hacia lo poético; lo feo y lo violento se encuentran más permitidos”- explica la directora. Sin embargo, Lub Dub se proyecta entre los bosques de la metáfora y el lirismo donde “el latido del corazón es la metáfora misma de la Humanidad”.