De los creadores de Uptown BA, emblemático bar neoyorkino que revolucionó – y revoluciona – la ciudad, se viene una novedad también alineada a la Gran Manzana, pero con otro protagónico: el whisky. Bourbon, Brunch & Beer es una whiskería americana con más de 70 botellas de Bourbon, Rye y Tennessee whiskey que, combinado con ocho canillas de cerveza importada – de Alemania, Inglaterra, Bélgica y más – y una propuesta de Brunch los viernes y fin de semana, se postula como un bar súper original y de vanguardia. Un ambiente relajado, una carta foodie bien americana con toques gourmet (con opciones como Mac&Cheese, Hot Dogs y, por supuesto, hamburguesas, estas de receta secreta), la idea es fusionar lo cool y distendido con la calidad y exigencia. La coctelería está a cargo de Gastón De Genaro, Brand Ambassador de Jack Daniels, clásica marca de whiskey. En fin, un universo revolucionario de esta bebida está llegando, y va mucho más allá del clásico concepto de bar.
La mística asiática copó la ciudad, y cada nueva apertura redobla la apuesta. Esta vez, la novedad – nueva en serio, abrió hace apenas una semana – es Hattori Hanzo, un bar gastronómico que no apunta solo a una genial oferta coctelera (de autor, por supuesto), sino que también busca el diferencial en las alternativas foodies. Porque los bares gourmet – nunca tan lejos de la hamburguesas y los nachos con cheddar – existen, y valen mucho la pena. Acá, el tapeo asiático tiene la posta. Opciones como Tataki Hattori (lomo de ternera marinado en salsa oriental, sellado a la plancha y cortado en finas láminas) se mezclan con los clásicos dumplings, spring rolls, sushi y más. Si te agarra sed, una joyita es el “Kill Bill”, con vodka, sake, frutos rojos, jugo de limón, syrup, menta y angostura.
Y todavía nos falta hablar del espacio, que con una ambientación asiática cool, es el broche de oro. Carteles de neón – pasaje de ida sin escalas a Tokio –, un mural de arte asiático hecho por Maximiliano Bagnasco, una terraza con deck de madera, un jardín vertical y una cascada de agua (a lo feng shui, claro). En fin, una propuesta que apunta alto y que hay que conocer.
La revolución del fernet es real y tiene una casa predilecta. Fernets nacionales e internacionales, típicos trapizzinos para picar, tragos de autor – con fernet, claro, pero también bebidas típicas italianas – y un restaurante. Todo eso es La Fernetería, un espacio dedicado a esta bebida que es orgullo nacional y que la lleva a otro nivel. Apenas entrás, te vas a encontrar con La Fernetería Aperitivo, un espacio donde vas a poder degustar cinco variedades de fernet en combinaciones más clásicas: cola, pomelo, tónica, jugo de naranja o soda. Para acompañar, el maridaje perfecto. Los trapizzinos, que van desde mortadela con pistachos, polpette, berenjenas parmegianas, salame o jamón crudo y muzzarella, y fior de latte con pesto.
Pero detrás de unas imponentes cortinas de terciopelo – a lo película de Hollywood – está el tesoro más gourmet de la propuesta: La Fernetería Bar & Eatery. Moderno, rústico, sofisticado y con una barra de mármol que se lleva todas las miradas, esta segunda versión recibe cocktails de autor de la mano de Matías Merlo, Mona Gallosi, Sebas Atienza, Federico Cuco y Gon Cagado. Pero la oferta no queda ahí, porque el otro show – en este caso foodie – involucra pastas amasadas en vivo, listas para degustarse. Porque, como todo lo que implica inspiración italiana, se centra en las pastas. Opciones como mafaldini con cordero especiado o agnolotti de ricota de oveja son los favoritos.
Fotos: gentileza espacios mencionados.