Un recorrido perfecto para cuando todo esto termine (o se flexibilice) y lo único que querramos es respirar aire puro y mover las piernas/Un itinerario, desde el río en Martínez hasta Victoria/Las paradas foodies y bares que no podés perderte/Además: ¿dónde recontra va dormirte una siestita al sol?
Tienda de antigüedades a pasos de Peru Beach, el bajo no puede más de lo pintoresco (y está cada día más lindo)
Patear la costa del Bajo de San Isidro: un must para cuando se libere la cuarentena (tomen nota de mis escalas favoritas). Por Azul Zorraquin.
Cuando todo esto termine, vamos a querer salir corriendo a tomar aire libre y gozar de la naturaleza. Te proponemos un circuito fresco, anti-encierro, para cuando podamos festejar el fin del confinamiento. De la mañana hasta la noche, con opciones de todo tipo para elegir, ¡no te pierdas este trazado! ¿Lo ideal? Moverte en bici.
1) ALMORZAR EN FEDRA ‘ S, DORMIRTE UNA SIESTITA AL SOL Y DESPUÉS CAMINAR HASTA PERÚ BEACH PARA EL ATARDECER / ALVEAR Y EL RÍO – MARTÍNEZ
La primer parada obligada es FEDRA’S (Sebastián Elcano 1750), en la bajada de Alvear y el Río. El lugar es muy pintoresco, e ideal para tomarse un licuado – o un trago-, algo para picar y después gozar de una siestita al sol, justo enfrente. La vista privilegiada de este spot, se extiende hasta Perú Beach, en un espacio verde súper ancho y amplio, donde uno puede relajar y disfrutar del verde como nunca.
2) HORNOBAR: UNO DE MIS RESTAURANTES PREFERIDOS DEL BAJO (TODAS DELICIAS AL HORNO DE BARRO) Y A POCAS CUADRAS, PARA DESPUÉS, HACER LA DIGESTIÓN CAMINANDO HASTA EL RÍO / ROQUE SAÉNZ PEÑA 1004 – BAJO DE SAN ISIDRO
Al seguir el recorrido por el bajo, uno de mis spots favoritos es HORNOBAR (Roque Sáenz Peña 1004). Es un restaurante que prepara casi todos sus platos al horno de barro y son exquisitos. Los mozos son simpáticos, el lugar es canchero y tiene un par de platos imperdibles: la empanada de camarón (de entrada), y de plato principal, el risotto o el wrap de ternera. Dos joyitas. Siguiendo por esta calle, desde Catalejo también se ve el río, imponente.
3) PERDERSE ENTRE LAS CALLECITAS EMPEDRADAS DEL MÁGICO CENTRO HISTÓRICO DE SAN ISIDRO (UNA «COLONIA AQUÍ NOMÁS», COMO ALGUNA VEZ LO DEFINIMOS)
El recorrido por el agua puede desviarse hacia el centrito y casco histórico de San Isidro, de calles empedradas, bien barrial, para detenerse en la librería Boutique o No Tan Puán, cuyo patio atrás tiene un aire especial. Uno puede sentarse a leer, escondido entre obras de arte, y pedir un tostado o una limonada.
4) SEGUIR HASTA VICTORIA QUE TIENE CADA VEZ MÁS OPCIONES (NO DEJEN DE IR A GOOD & GREEN, TODO UN FENÓMENO DE LA ZONA)
El trayecto por el bajo nos lleva hasta Victoria, un barrio que eligen muchos jóvenes, y que ofrece opciones de todo tipo. Uno de los mejores spots es GOOD & GREEN (Gral. Arias 2500), un almacén de comida saludable, ubicado sobre las vías del tren. La opción “G&G bowl” es deliciosa. ¿Lo más interesante? Exprimen al mango los nutrientes y crean parejas inteligentes entre ellos. Tienen opciones veganas también, y ofrecen helados a base de crema de coco y almendras.
5) Y A LLENARSE LOS PULMONES DE AIRE DEL DELTA EN EL TIGRE (Y PEGARSE UN PASEÍTO POR EL BOULEVARD ROQUE SAÉNZ PEÑA, ENTRE OTRAS PARADAS)
Para los amantes del helado, el recorrido post-almuerzo desemboca en la HELADERÍA VÍA TOSCANA (Av. Victorica 470), en la costa, frente al Río Luján, para muchos “la mejor heladería de Tigre”. Está ubicada a cuatro cuadras del Museo de Arte de Tigre, tiene tres opciones de gusto muy particulares: ricotta con miel, zanahoria con naranja, y ¡caipriña!
Para los amantes de la aventura, muy cerca del Museo también, se puede incursionar en el mundo del REMO. En Rowing Club o Tigre Boat Club, se pueden alquilar canoas e incluso tomar clases y pasear por el Delta, es un programa espectacular. Importante: llevar abrigo para cuando cae el sol.
Cruzando el puente sobre el río a la altura de la Estación Fluvial, se llega al mágico BOULEVARD SAENZ PEÑA, un polo artístico muy especial, que fusiona la gastronomía y el arte. El ALMACÉN DE ILDI Y TATI, (Sáenz Peña 1336) es una de las opciones más copadas que tiene. Es un lugar cálido, e ideal para disfrutar de un buen almuerzo o merienda. La lasagna vegetariana es uno de sus puntos más altos, y las tartas son un manjar.
Y PARA TERMINAR EL DÍA, UNA CERVECITA EN EL GALPÓN DE TACUARA –
Estamos llegando al final del día, y cualquier paseo, se culmina con un buen vaso de cerveza (y si es artesanal, mejor). El GALPÓN DE TACUARÁ (Gral. Arias 710) en San Fernando, es un galpón cervecero súper canchero, que tiene Happy Hour todos los días de 18 a 20 hs en pintas. El plato insignia es del de macarrones con queso fontina, provolone y gratinados, y se sirve con bondiola y salsa barbacoa. Una delicia. ¿La birra imperdible? La IPA San Fer: es balanceada, turbia y cítrica, y ¡se ganó una medalla en la Copa Argentina de Cervezas! Además de esta, tiene como 15 más, que son sello propio.
Para cenar, otra opción es EL BODEGÓN DE LOS INMIGRANTES (Av. Italia 1398). Es un clásico de la zona, un rincón pintoresco y barrial. Sus paredes, pintadas de amarillo chillón, visten escudos de todo el mundo. Los clásicos, como la milanga a caballo con papas fritas y la provoleta, no fallan.
Por último, una opción más gourmet, ya a la hora de pegar la vuelta, es BESTIA, (Primera Junta 702), que abre solo de noche y su sello distintivo son las cocciones ahumadas y fermentadas. Son expertos en carnes, y su corte T-Bone , por ejemplo, se madura en seco por ¡70 días! Tienen hamburguesa de pato y muchos productos ahumados, como las mollejas. ¿Qué se viene en la carta nueva? Tratar de ciervo, entre otras delicias. Dato de color: en la cuarentena, hacen envíos de carne envasada al vacío.
Fotos: Maleva – gentileza locales mencionados y Unsplash.