Desde una pizzería con muchísimo ambiente y muy jugada hasta una vermutería y una esquina en la que hacen una «red velvet» gloriosa/En los últimos meses este círculo verde del norte porteño dejó definitivamente su vieja impronta clásica de barrio para convertirse en una de las coordenadas más agitadas y efervescentes de la ciudad
El Bolichito, una esquina que cautiva con sus picadas y productos gourmet y orgánicos
Parque Saavedra en la cresta: ocho propuestas que mezclan el placer foodie con el aire libre. Por Camila Barreiro.
Además de su increíble espacio verde ideal para acomodarse sobre el pasto y disfrutar del sol, hacer deporte y pasear a las mascotas (no solo perros, hay un mini pig dando vueltas), Parque Saavedra se convirtió en un polo foodie en ascenso que promete seguir sumando novedades. MALEVA recorrió los alrededores del parque en busca de las propuestas imperdibles de este verano. ¡Conocé las opciones que van de increíble pastelería hasta el cada vez más pedido vermut!
1) Gula: la esquinita con – según sus fans -, las mejores medialunas de Buenos Aires / Muy geniales los dibujos en la espuma de sus cafés (¡la boa del Principito!) / Atención esmerada / Avenida Crisólogo Larralde 2801
Nada más argentino que el café con leche y medialunas. Nada más rico que darte ese gusto en Gula, donde hornean, según esta cronista, las mejores medialunas de Buenos Aires (comprobado). Las cocinan al recibir un pedido, así que es imposible que no estén frescas. Además, sirven los cafés con diseños sobre la espuma que son capaces de alegrar corazones y cambiar días (te puede tocar la boa de “El Principito” o el escudo de tu equipo de fútbol). Pero lo más dulce de esta esquina saavedrense no es su pastelería (turgentes tortas, cuadraditos y medialunas rellenas) sino su atención, que se ganó el amor de cada uno de sus clientes.
Piolar Borio parió este proyecto hace más de cinco años junto a su pareja, Hernán, y actualmente lo llevan adelante con Coni y Milu, su hermana menor. Siempre vivieron en la zona y les gusta redescubrirla saliendo a comer en los nuevos (y super viejos) proyectos. “El 80% de mi carta está hecha pensando en el bajón. Ahora estamos volviendo a agregar cosas que sacamos durante la cuarentena y queremos sumar unos waffles de medialuna” -cuenta – “Gula es mi tercer hijo, de hecho mis hijos están siempre acá. Cuando volvimos a abrir fue porque un chico que se había quedado varado nos pidió que le mandemos medialunas para su mujer que estaba sola y embarazada. Ella lloraba y nos agradecía. Al día siguiente una pareja amiga de ellos nos pidió lo mismo. Volvimos a empezar así y descubrimos que teníamos clientes por todo Buenos Aires”.
2) Moshu: un clásico y moderno del boulevard que rockea con su deliciosa Red Velvet | Moldes 3802
Si no probaste la Red Velvet de Moshu, salí corriendo a hacer tu pedido y después seguí leyendo (no, no estamos exagerando). Esta esquina se destaca por sus desayunos y meriendas. Te recomendamos acompañar su cafetería de especialidad con las tortas (sí, todas), el sableé de almendras y los scones. Si preferís lo salado, el bagel de salmón ahumado, palta, cebolla morada, rúcula y queso crema con eneldo es un imperdible.
Cuando abrieron hace casi cuatro años se convirtieron en una suerte de oasis en un boulevard cuasi desierto. Hasta la arquitecta que ayudó a Lucas Villalba, dueño del emprendimiento, le dijo que estaban locos por la zona elegida. “No había propuestas de calidad que brinden una experiencia distinta, por eso al año alquilé Jornal. Nosotros somos del barrio y no aparecía nada. Había una esquina medio abandonada sin carteles, toqué timbre y me lo alquiló a las tres semanas. Mucha gente me decía ‘qué bueno que abren un local de Palermo en Saavedra’. Me parece bien haber impulsado el polo, aunque una cosa es García del Río y otra el parque. Somos un peso pesado del barrio y tenemos cientos de clientes por día, pero nos parece bien que haya ofertas para todos”, agrega.
3) Jornal: con la harina como vedette, una panadería de masa madre que conquista con sus pastas boutique / García del Río 2802
El boulevard de García del Río se viste y vuelve más llamativo con la vidriera de Jornal que luce unos increíbles croissants, panes de chocolate, baguettes, focaccias y varios productos de masa madre que deslumbran desde la vista y el sabor. Ahora, además, agregaron pastas boutique para cocinar en casa que incluyen sabores de autor, propuestas veganas y hasta menúes infantiles. Nuestra recomendación: los casoncelli rellenos de trucha ahumada, queso brie y pickles de hinojo (podés comprar salsas envasadas al vacío, la de crema con alcaparras y eneldo es un fuego). ¡Obvio que acompañamos con una baguette alucinante y los croissants que son su caballito de batalla!
A pesar de ser un éxito como restaurante desde 2019, Jornal sufrió el golpe de la pandemia porque no podían trasladar su experiencia a un box. “Estuvimos un mes cerrados. Después, tiramos las paredes abajo y empezamos a hacer pan de masa madre a mayor escala, hacemos mil por día”, cuenta el dueño del emprendimiento, Lucas Villalba. “Como todo lo que tiene harina nos atrae, las pastas surgieron de manera natural. Contratamos a un experto que nos asesoró por seis meses y empezamos a elaborar pasta boutique”, explica. Aunque por ahora la propuesta es take away, planean volver a abrir el restaurante en abril para disfrutar in situ de esta experiencia de panadería y viennoiserie (que ovacionan los franceses).
4) Beltrán: salir al living de un amigo, que prepara vermut casero y recetas familiares mientras pone discos de vinilo | Capitán General Ramón Freire 3702
Beltrán es una invitación al living de una casa. De hecho su dueño llevó su sillón, su tocadiscos, sus libros preferidos y sus vinilos. Roque, el creador del proyecto cuenta: “trabajo con un amigo y los dos hacemos todo. Fui mezclando cosas que me gustaban a mí. Hago los escabeches y voy cambiando el menú. El provopan (queso provolone, cebollas y morrones asados en pan de molde) es la vedette, está desde que empezamos. Las empanadas tienen como 30 años, es una receta de mi abuela. Siempre estoy acá, voy eligiendo la música, siento que le hace bien al lugar”.
Los vasos en los que sirven el vermut casero fueron regalo de una casa cercana cuyo dueño había tenido un bar en la juventud. La esquina de Freire se convirtió en una suerte de bar parroquial, donde los vecinos se acercan religiosamente a sentirse como en casa, sugerir discos y hacer amigos.
5) La Épica: cuando disfrutar de una pizza con sangría y reposera se convierte en un must / Avenida Melián 4092
Abrieron sus puertas (o levantaron la cortina) en la pandemia y ya es imposible pasar por los alrededores del parque sin ver sus cientos de reposeras de colores ocupadas por gente que disfruta de una sangría o un moscato y una buena pizza napolitana al horno de barro (tenés que dejar tu DNI y te entregan una sillita por persona). Cada semana lanzan variedades fuera de la carta, aunque siempre se puede pedir la infalible “Franchute”, que tiene queso brie, panceta y pesto de tomate.
Apostaron por adquirir una casita frente al parque porque les llamaba la atención la tranquilidad y la inmensidad, después de su primera apertura en Belgrano (La Fina), y no les podría haber salido mejor. Con la terraza (con una super vista al parque) inaugurada y con música, La Épica se ganó ser un hito del parque en poco tiempo. Por sus pizzas italianas, por su vermutería pero, sobre todo, por su onda.
6) Tu Bolichito: un legendario de la zona que se reinventó y ahora es un delimarket Besares 3599
Quesos y salames de Tandil, vinos orgánicos, cerveza tirada y “muchos cachivaches” construyen a la perfección esta esquinita que mira al parque y propone un escape de la Ciudad por un ratito. ¿Cómo? Quizás porque está un poco más retirada del parque frente a unos murales del Cabildo, tal vez con sus mesas y sillas de metal, su interior revestido en chapas o sus cientos de productos que no parecen posibles de encontrar a tan pocas cuadras de la General Paz.
Gabriel abrió “Cornelio Saavedra” en 2010, era papá primerizo y un amigo le propuso dedicarse a la gastronomía. Como vivía cerca ¡y no había ni un kiosko en la zona! les pareció un gran momento para emular propuestas que solo se veían en Palermo. “Metimos mucho laburo para que el barrio crezca, desde pintar el Cabildo enfrente nuestro hasta traer un proyector para proyectar videos en la ochava contraria. Hicimos un mural auspiciado por la Comuna sobre Cortázar y hasta quisimos ser padrinos de las plazoletas que estaban descuidadas”, cuenta. Con la pandemia empezó a perder las ganas de seguir, hasta que conoció a Santiago, que más joven, dio el empujón para empezar de nuevo con conceptos nuevos. Con el parque reinventado como punto de encuentro, este Bolichito que ofrece picadas, sandwiches y vinitos para acompañar las juntadas entre amigos.
7) Dandy: un diseño imponente que corona el final del parque con su fast food de calidad / Pinto 3880
Que una cadena desembarque en el barrio coronando el final del parque (donde se convierte en el boulevard de García del Río) fue un hito que marcó al lugar de nacimiento de Goyeneche y el Mono Gatica. Ahora es un clásico ver las filas para conseguir una mesita y disfrutar de un trago o café amparados por esa suerte de invernadero gigante que es Dandy (con su versión deli al lado). Dandy es una apuesta segura, para aquellos que buscan calidad, gastronomía moderna y simple, con un precio lógico.
8) Cesta: un adelanto / opciones para un picnic super cool | Avenida Melían 4002
Si sos de la idea de aprovechar el parque para tirarte sobre el pasto, esta es tu apertura. Los chicos de La Épica lanzan Cesta como una opción de take away super deliciosa de la mano del chef Takehiro Ohno. Tendrán sándwiches, ensaladas, carnes en diferentes cocciones y con las opciones veggies como vedettes de la propuesta. Con panes, postres y bebidas, vas a poder disfrutar de uno de los mejores días de pic-nic (además, como su proyecto hermano, prestan lonas y canastas).
///
Fotos: son todas gentileza de los locales mencionados. La de Cesta es ilustrativa y es gentileza de Unsplash.