De lunes a lunes, un plan para cada “mood”/La curaduría gastro incluye clásicos como Atalaya, barras de handrolls y hits del momento, como Orno y Antiche/Hablamos con sus creadores, arquitectos y bartenders/Además: el primer mini golf temático del país, para “viajar al espacio”.
Abrió a principio de este año y ocupa más de cinco mil metros adentro del shopping.
Mini golf temático, arte y propuestas gastro con onda: cómo es Ronda, el multi espacio del DOT que cambia la idea típica de un shopping. Por Camila Barreiro.
Todo empezó con una campaña que inundó las calles con una sola pregunta: “¿Qué c@rajo es Ronda?”. Y la respuesta no se quedó atrás de la expectativa. Porque, lejos de ser otro espacio en un shopping, Ronda desembarcó en el DOT con un diseño envolvente que incluye: opciones gastronómicas para todos los gustos, marcas de ropa curadas por el BAF, una galería de arte, bowling, obras de teatro breves, y hasta el primer mini golf temático del país.
Nació como respuesta a una demanda latente en la zona norte de la ciudad, y en sintonía con lo que está pasando ahí afuera. Su conjunción de propuestas conforma un espacio de más de 5500 metros cuadrados (techados y al aire libre) que tiene “un poco de todo” sin que eso signifique perder su impronta moderna y artística.
Sobre la curaduría de los locales de comida, Nicolás Bargagna -uno de los dueños del Grupo Enter- cuenta: «la selección de marcas gastronómicas en Ronda busca ofrecer lo mejor de lo nacional, combinando clásicos, como Atalaya, con propuestas emergentes que reflejan la nueva cultura gastronómica de la ciudad, como lo es Orno. También incluimos opciones internacionales, como Je suis Raclette (Suiza) y Handororu (Japonesa), entre otras».
Nicolás Bargagna -uno de los dueños del Grupo Enter- cuenta: «la selección de marcas gastronómicas en Ronda busca ofrecer lo mejor de lo nacional, combinando clásicos, como Atalaya, con propuestas emergentes que reflejan la nueva cultura gastronómica de la ciudad, como lo es Orno. También incluimos opciones internacionales, como Je suis Raclette (Suiza) y Handororu (Japonesa), entre otras»…»
Cada espacio está pensado para un momento y sabor del día: Koko Bao Bar, Fabric Sushi, Creperie, Carne, Il Quotidiano, Paolo Focacceria y Antiche son otras de las marcas elegidas para acompañar el proyecto.
Como la noche (o la tardecita) porteña amerita, la comida está secundada por un parador cervecero de Andes Origen y SED, una barra de cócteles a cargo del bartender Diego Zelaya. “El desafío fue armar una carta de tragos que acompañe las distintas propuestas gastronómicas. Por eso, la idea fue trabajar con bebidas fáciles de tomar como los aperitivos, tragos frescos, cítricos y ligeros”, explica Diego, que recomienda como “imperdibles” la Caipi de Estación (una reversión con moras y licor de cassis), el Gin tonic Ronda (“de esos que decís que me tomo mil”) y el Fernet con feca (que mezcla el café de especialidad con el clásico argentino).
«No solo hay 11 pistas de Paloko Bowling en la planta baja, sino que el primer piso agrega más actividades a la lista. Además de las tres salas de teatro con obras breves (de veinte minutos), se encuentran dos canchas del primer mini golf temático del país. Cada una de ellas invita a descubrir un universo y a probar suerte con sus nueve hoyos…»
Ronda pone foco al entretenimiento y a la posibilidad de saltar de una experiencia a otra, sin sentir que algo desentona (porque siempre se están abriendo nuevos universos). A cargo de la identidad visual estuvieron las arquitectas Inés Castagnola y Dolores Bacigalup, mientras que la dirección creativa del espacio la lideró Pablo Antonelli.
No solo hay 11 pistas de Paloko Bowling en la planta baja, sino que el primer piso agrega más actividades a la lista. Además de las tres salas de teatro con obras breves (de veinte minutos), se encuentran dos canchas del primer mini golf temático del país. Cada una de ellas invita a descubrir un universo y a probar suerte con sus nueve hoyos.
«Queríamos que la gente se sumergiera en universos maravillosos fuera de lo normal. Nos imaginamos un mundo de pura fantasía y naturaleza para uno, y un lugar perdido en medio del espacio para el otro», cuenta Mel Anton, diseñadora del mini golf. «Para el espacio pensamos en dos partes: una nave y el espacio exterior. Entonces uno ingresa y va pasando por las distintas partes de la nave espacial hasta que sale al espacio y viaja, como si flotara, por el universo».
«Ronda funciona como macro concepto donde “aunque no tengas plan, siempre hay un plan”, explica Pablo quien considera que el espacio tiene al arte como “una transversal ontológica”. De hecho, en la galería de arte Pared se prioriza exhibir a artistas emergentes; ahora hay obras e instalaciones de artistas como: Sam El Greco, Agus Chalupowicz (que reutilizó materiales de la demolición de los locales anteriores), Lucio Savant, Cino, Samot y Martín Levy…»
Ronda funciona como macro concepto donde “aunque no tengas plan, siempre hay un plan”, explica Pablo quien considera que el espacio tiene al arte como “una transversal ontológica”. De hecho, en la galería de arte Pared se prioriza exhibir a artistas emergentes; ahora hay obras e instalaciones de artistas como: Sam El Greco, Agus Chalupowicz (que reutilizó materiales de la demolición de los locales anteriores), Lucio Savant, Cino, Samot y Martín Levy.
«Creamos un nuevo segmento que responde a una tendencia global que busca que los shoppings se transformen en lugares de destino. En moda, se inspira en el proyecto Dover Street Market de Rei Kawakubo, creadora de Comme des Garçons», amplía Nicolás sobre el sector de ropa que cuenta con locales de Bestia, Oseo y Mich.
Ronda viene a desafiar el preconcepto que tenemos de los shoppings, para darle la vuelta con un plan para cada persona y un mood adaptado a la que la ciudad sale a buscar.
Galería:
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Las fotos: son todas gentileza de prensa de Ronda.