Museos de arte contemporáneo, galerías, y hasta instalaciones murales en paredes milenarias. A continuación algunos lugares clave en la escena del arte contemporáneo romano.
Fundado a fines del siglo XIX y principios del XX como la Galería Municipal de Arte Contemporáneo, el Museo D’Arte Contemporanea-MACRO propiamente dicho inauguró su sede original en 1999 en el residencial barrio de Nomentano en Roma. De famosa fábrica de cervezas italiana a museo de arte contemporáneo: Luego de una importante restauración el MACRO ocupa el edificio donde se encontraba la antigua cervecería Peroni-hoy una de las más representativas de Italia-, construido a principios del siglo XX. La exhibición de fotografía documental “Ritratto di quartiere. Dallo stabilimento Birra Peroni al MACRO” dio testimonio de las transformaciones del entonces edificio industrial ahora museo durante el “Novecento” italiano. Una segunda sede, llamada MACRO Future, se encuentra en dos salas del antiguo matadero de Testaccio, tradicionalmente de clase trabajadora romana, hoy en día este barrio se caracteriza como una locación donde la cultura y el arte se han apropiado de galpones y edificios abandonados, con manifestaciones culturales dirigidas a un público joven. El “Mattatoio” (o matadero– como se lo denomina comúnmente), es testigo del paso del clasicismo a la modernidad arquitectónica romana, es considerado uno de los edificios más emblemáticos de la “arqueología industrial” romana aún existente y en uso, por su estilo monumental y racional de finales del siglo XIX. Durante el verano europeo y hasta noviembre se puede ver Roma Pop City 60-67, exhibición que tiene a la ciudad durante los años sesenta como protagonista de uno de los momentos más emocionantes y estimulantes culturalmente.
BONUS Track – arqueología industrial italiana en la FONDAZIONE PRADA DE MILÁN.
La apropiación de edificios industriales en Italia por museos y fundaciones de arte es algo en crecimiento, lo vemos en la recientemente inaugurada Fondazione Prada en Milán. Remodelada con materiales de vanguardia por el estudio OMA, dirigido por el aclamado arquitecto Rem Koolhaas siguiendo la premisa que el arte sea exhibido y compartido con el público general, la nueva sede en Milán ocupa hoy lo que fue la destilería Società Italiana Spiriti.
Ubicado al norte de la ciudad en el barrio de Flaminio, este museo se presenta a si mismo como “(…)el primer museo nacional italiano dedicado a la creatividad contemporánea.” Tal como dice el título, todo allí mira de una u otra manera al siglo XXI, con vocación no solo de preservación patrimonial (tradición fuertemente italiana), sino también como espacio de experimentación e innovación cultural, reflejando los contenidos estéticos actuales. Siguiendo esta línea es clave que el diseño arquitectónico fue proyectado por la talentosísima y recientemente fallecida arquitecta Zaha Hadid, quien experimentó principalmente con hormigón, acero, y vidrio para lograr las formas innovadoras del edificio. Con arte y arquitectura como las dos líneas de contenido, el MAXXI expone paralelamente su colección contemporánea, instalaciones permanentes de los artistas Anish Kapoor, Sol Lewitt y Maurizio Mochetti, y exhibiciones temporales como la actual SUPERSTUDIO 50. En esta exhibición, un grupo de arquitectos durante la década del sesenta en Italia, decide pensar a la arquitectura como un sistema teórico-en vez de practico-, de búsqueda de problemas-en vez de resoluciones-, y principalmente motor para la creación de nuevos mundos. Por otro lado, el MAXXI presenta la exhibición Benvenuto! Sislej Xhafa. Xhafa, nacido en Kosovo, quien residió en Italia y actualmente en Estados Unidos, es responsable entre otras obras del pabellón clandestino de Albania en la Bienal de Venecia. Para esta exhibición reflexiona, “La realidad es más fuerte que el arte. Como artista no quiero reflejar la realidad, pero si cuestionarla”.
Causando un gran revuelo en la incipiente escena del arte contemporáneo romano, el galerista irlandés Lorcan O’Neill abre esta galería en 2003 en la zona del Trastevere, adelantándose casi cuatro años al magnate del arte Larry Gagosian quien recién en 2007 abrió una filial de su ‘imperio’ galeristico en Via Francesco Crispi 16. Gagosian Roma ocupa un espacio ovalado en un edificio Neoclásico en el centro histórico romano. O’Neill, amigo de muchos artistas pertenecientes al grupo Young British Artists (YBA), presentó exhibiciones de la ‘rockstar’ del arte británico Tracey Emin, Sam Taylor-Wood, del pintor y escultor alemán Anselm Kiefer, como así también de una camada de artistas jóvenes italianos como Pietro Ruffo, quien forma parte de la colección permanente del MAXXI. Actualmente se puede ver la exhibición grupal Like a Bird, Not a Feather, de los artistas Martin Creed, Giorgio Griffa, Anselm Kiefer, Richard Long, Luigi Ontani. Siguiendo la tradición italiana de reutilizar de edificios antiguos, la Galleria Lorcan O’Neill abrirá un segundo espacio en los antiguos establos del Palazzo Santacroce del siglo 17.
De iglesia a galería de arte contemporáneo de punta. Recientemente inaugurada en 2015, la galería de arte contemporáneo neoyorkina fue la primer galería de ese origen en abrir un espacio en Roma, puntualmente en el Trastevere (Via dei Vascellari 69), en la que fue la iglesia Sant’Andrea de Scaphis del siglo octavo D.C. El galerista británico tenia el ojo puesto en este edificio desde hace más de diez años; en palabras de Brown,“No es que estaba buscando abrir un espacio en Europa. Estaba buscando abrir este espacio en este edificio”. En cuanto a la modalidad de exhibición, y casi como un desafío, se destaca la aproximación no convencional con la que Brown trabaja el espacio, con una propuesta diferente a las de las galerías que maneja en Nueva York, tratando de preservar la calma característica del edificio. Exhibiciones como la de Sturtevant, artista ‘apropiacionista’ norteamericana, sobre la obra de Robert Gober, o la reciente UniAddDumThs del artista británico Mark Leckey, que trabaja sobre el arte post-internet, y el propio imaginario del artista a modo de ‘hard-drive’. Obras e imágenes digitales de temática arcaica y exótica se entremezclan en este espacio no convencional.
Locaciones inesperadas es lo que define a una gran parte de los espacios contemporáneos en la ciudad eterna. En este caso el aclamado artista sudafricano William Kentridge, presentó Triunfos y Lamentos, la obra más ambiciosa del artista hasta el momento, consistente en un mural a modo de friso de 500 metros de largo nada más y nada menos que en los muros del denominado “Lungotevere”, la calle construida a lo largo del río Tíber. La novedosa técnica con la que fue realizado consiste en un sistema de limpieza con agua y presión que “borra” (o limpia) la patina natural de los muros de mármol travertino, formada por acumulación de sedimentos a lo largo de los años. Utilizando una suerte de esténcil se fueron “limpiando” los negativos de las siluetas de 10 metros de alto que forman parte de una procesión de figuras, características de la poderosa estética del artista presente en sus pinturas y dibujos. Ubicada en Piazza Tevere, en el muro oeste entre los puentes Sisto y Mazzini, la obra explora las tensiones de poder en la ciudad eterna, desde el pasado al presente, representando las mayores victorias y derrotas de Roma, de la mitología a nuestros tiempos. La inauguración de este friso mural tomó forma teatral donde dos bandas procesionales de marcha con músicos italianos y sudafricanos, y un teatro de sombras en vivo “activaron” la pieza que funcionó como telón de fondo.
BONUS TRACK 2: GALERÍAS DE ARTE EN LUGARES INESPERADOS.
Durante los años noventa, bajo la iniciativa de tres amigos, Galleria Continua abrió sus puertas en el edificio de un antiguo cine de la ciudad italiana de San Giminiano, en el corazón de la Toscana. El hecho de estar situada en un lugar suspendido en el tiempo, alejado del ritmo de las grandes ciudades, y de los típicos espacios de exhibición, hacen de Galleria Continua un espacio único y magnético donde grandes artistas (entre los cuales el argentino Jorge Macchi) despliegan anualmente exhibiciones memorables en el antiguo cine de la ciudad. Tanto la inusual locación como el lugar geográfico inesperado juegan un rol de privilegio activando temáticas de exhibición dignas de museo de arte contemporáneo más que de galería de arte.
