Las sierras de Córdoba por una cronista cordobesa: rincones, secretos y consejos, centímetro a centímetro

El verano 2020 es ideal para redescubrir esta provincia ¡que mide cuatro veces más que Suiza!/Nada mejor que la data de una local/Cada valle, cada pueblo, cada ruta/¿Qué trekking, qué restaurante, qué coordenada natural?/Desde la nueva ruta del vino hasta unos campos de lavanda super instagrameables pasando por un pueblo nada obvio con unas noches estrelladas únicas

Vicky Agulla, la autora de la nota. admirando la inmensidad desde el cerro Champaquí 

 

Las sierras de Córdoba por una cronista cordobesa: rincones, secretos y consejos, centímetro a centímetro. Por Vicky Agulla Tagle (texto y fotos, desde Córdoba)

La relación entre Buenos Aires y Córdoba es más que geográfica. Antiguamente, los cordobeses viajaban a Buenos Aires casi sólo por cuestiones laborales, cuando los porteños veían a las sierras cordobesas como una buena opción relacionada con curas médicas. Ahora, a los cordobeses nos encanta pasar días (y, noches, claro) en Buenos Aires para sumergirnos en la cultura porteña a través de sus teatros, museos, galerías y bares: mientras que a los porteños les copa la Provincia de Córdoba para pasar esos días «out of office» donde la naturaleza es la mejor escapatoria de la ciudad de la furia.

«Pero esta provincia tiene 165300 km² (¡cuatro veces más grande que Suiza!) donde se ubican las Sierras Grandes, las Sierras Chicas, sus cientos de ríos, miles de arroyos y varias localidades turísticas que son un must este verano…»

Pero esta provincia tiene 165300 km² (¡cuatro veces más grande que Suiza!) donde se ubican las Sierras Grandes, las Sierras Chicas, sus cientos de ríos, miles de arroyos y varias localidades turísticas que son un must este verano.

1) ASCOCHINGA: UNA ESTANCIA FABULOSA (PARQUE DISEÑADO POR THAYS, GOLF Y RESTAURANTE)

Cerca de Jesús María se encuentra Ascochinga, una localidad muy tranquila y tradicional donde se pueden hacer caminatas y salidas en bici hasta la bella Estancia Santa Catalina. Sobre la E66 se ubica La Paz, la antigua estancia de 1830 que perteneciera al Presidente Julio Argentino Roca y a su mujer Clara Funes, y que todavía conserva su esplendor de arquitectura neoclásica y su parque diseñado por Carlos Thays. Hoy es un hotel restaurante, y cuenta con canchas de polo y 18 hoyos de golf.

2) LA CUMBRE: ADRENALINA, UN CIRCUITO FOODIE CADA VEZ MÁS INTERESANTE Y CAMPOS DE LAVANDA SUPER INSTAGRAMEABLES 

Si te gusta la adrenalina o ver cómo otros disfrutan de ésta, La Cumbre es la posta. Esta ciudad es la meca de los parapentistas. Cuchi Corral es la capital de quienes se le animan al parapente. La Aeroposta es el aeródromo donde se aterriza, una postal para tomarse una cerveza y ver caer el día mientras estos pájaros humanos aterrizan su parapente.

En La Cumbre todavía se distingue la cultura de los inmigrantes ingleses que vinieron a construir la estación de tren; hay patisseries que conservan la elegancia inglesa en un vagón de tren como Viva la Pepa Patisserie; y como el té aquí es todo un ritual, una casa de té recomendada es: La Fonda de Cruz Chica. En cuanto a chef reconocidos, la estrella es Santiago Blondel oriundo de Bariloche que ganó el Prix Baron Edition Cuisine y abrió un chiringuito de autor llamado Di que Sí.

En La Cumbre también abundan los talleres de arte, como el del del escultor Matías Mischung que se puede visitar libremente. Los campos de lavanda son un spot muy instagramear en Punilla: Domaine de Puberclair es un complejo agro-industrial perfumista que forma parte de un emprendimiento familiar.

En sus paisajes, las flores violáceas encantan como si se trataran de los campos franceses de La Provenza. Además, el centenario y «very british golf» de la Cumbre resulta ineludible y aunque no juegues, sólo sentarte a tomar algo en la terraza del club es una delicia.

Un río de Traslasierra, el territorio más chill y bohemio de la provincia

3) CAPILLA DEL MONTE: TREKKING FUERTE Y ALMORZAR TRUCHA 

Hay muchos sitios imperdibles en la “ciudad extraterrestre” de Córdoba famosa por los mitos sobre los OVNI.  La caminata hacia el Dique Los Alazanes merece la pena y no es difícil, son cinco horas caminando por senderos marcados. El cajón es otro dique para pasarte un día entero nadando. Los Terrones es uno de los parques más especiales de todas las sierras y una obra de arte de la naturaleza. Un lugar con profundos cañadones de rocas anaranjadas y oasis de agua cristalina que crean un microclima húmedo y fresco perfecto para hacer una caminata refugiarse del álgido verano serrano.

El Cerro Uritorco es el pico más alto de la zona, así que se necesita ir preparado para un ascenso de 7 horas con un guía que se contrata ahí mismo. Para almorzar, el recomendado es La Tramontana, un criadero de truchas en un entorno serrano totalmente envolvente. Y, para los golosos, Sabia que Venias es un local de cocina de autor con recetas caseras.

4) COSQUÍN PARA ROCKEAR Y BIRRA AL ATARDECER EN LOS RÍOS SERRANOS

Y si de rock se trata, Cosquín es la meca, porque acá se despliega el festival más federal del país. El Cosquín Rock este año cumple 20 años y trae a los más clásicos artistas del Rock Nacional como Charly García, Las Pelotas, el pop de Babasónicos o Indios, las figuras más millennials como Lautaro Duque o el swing de Nathy Peluso. Si no tenés resaca se puede subir al Pan de Azúcar y si se quiere seguir de gira, llevarse una birras a los ríos de Cuesta Blanca o a Icho Cruz -que son de fácil acceso- o ir a zambullirse en la Cascada de Olaen, para sentirte mejor. 

Una cueva con inscripciones indígenas en Tulumba

5) CALAMUCHITA: RECORRER LAS FLAMANTES (Y CADA VEZ MÁS LOGRADAS) BODEGAS CORDOBESAS

El valle de Calamuchita tiene dos opciones bastantes diferentes, subir al Cerro Champaquí hacer el nuevo wine tour o simplemente deleitar los sentidos durante una sesión de spa del Complejo de Valle del Sol en Santa Rosa de Calamuchita.

El Champaquí es el cerro más alto de la provincia, subirlo es toda una experiencia. La forma más fácil es desde Villa Yacanto hasta el cerro Los Linderos, por un sendero de una hora. Y, al descenso, nada como cenar comida casera en Doña Custodia.

Pero en Córdoba no solo hay montañas, la provincia también tiene una rica y antigua pero desconocida y lejana historia del vino. Es la cuna del primer vino elaborado en lo que luego sería territorio argentino y enviado a la Corona Española a principios del siglo XVIII. En 2020 el Valle de Calamuchita contará con 7 bodegas de primer nivel frente al bellísimo espejo de agua del Dique Los Molinos. El nuevo tour de Córdoba Wine Travel propone un día diferente recorriendo las bodegas, degustando los vinos y disfrutando de excelente gastronomía local. Un viaje sensorial descubriendo la viticultura cordobesa.
Para dormir, las cabañas de Estancia Las Cañitas son el mejor hospedaje para ir con amigos, parejas y/o hijos.

6) TRASLASIERRA: UN VERANO MUY CHILL

Pasando la Pampa de Achala, el lugar de las sierras más imponentes de Córdoba es Traslasierra. En la localidad de San Javier se pueden alquilar casas o parar en casonas con todos los servicios incluidos como La Constancia. Al pie del cerro Champaquí, esta estancia de 1.200 hectáreas cuenta con una casa de ocho habitaciones y un departamento con dos cuartos en un lugar ideal para hacer trekking por senderos, cabalgatas por las montañas, pescas en los ríos con las vistas más imponentes de toda la provincia. Los fines de semana se comen asados en grupos y, hay servicios personalizados como masajes y reflexología.

El balneario con más onda de la zona es La Kiva, donde se pueden tomar smoothies con la mejor vista al río de Nono. En Feria de Artesanos de Villa de las Rosas donde, además de artesanías, hay puestos de comida vegana, vegetariana, integral, macrobiotica hecha con productos locales. Pero EL souvenir de regalo es una caja de alfajores de El Nazareno en Mina Clavero.

Sendero de Aschochinga

7) TULUMBA: UN PUEBLO ENCANTADOR (TE SENTÍS EN LA COLONIA) CON MUCHA HISTORIA

Una zona sin sierras y ríos, pero sí con un legado indígena y una geografía totalmente diferente es Villa Tulumba. Conocida por el Cerro Colorado donde los pueblos originarios adoraban al dios inca del Sol a través de sus pictografías, le han dado fama mundial a la región, proyectándose que el Cerro Colorado sea declarado Patrimonio de la Humanidad. Para viajar en el tiempo el hotel predilecto es “Andaluzía”, una casa de campo del año 1905 ubicada sobre el Antiguo Camino Real al Alto Perú. Ruta que antiguamente unía a Buenos Aires con la ciudad de Lima en la época del Virreinato del Río de la Plata. Sus calles son empedradas, el alumbrado público es de un matiz tenue que asemeja la época en que las farolas de la Villa se iluminaban a queroseno, por lo que las noches de Villa Tulumba se llenan de miles de estrellas en un cielo totalmente limpio.

8) UNQUILLO: EL LUGAR PARA DESCONECTARSE Y DEJAR PASAR EL DÍA SINTIENDO EL AROMA DE LAS FLORES

Unquillo siempre fue conocida como cuna de artistas tales como Lino Enea Spilimbergo, Guido Buffo o deportistas como David Nalbandian. Los principales centros de arte son el Spilimbergo, el Rivolta y Ciudad Estación Km 17,90. Pero para el resto de los mortales, Unquillo es un lugar para estar descalzo sobre el césped, acostado sobre una piedra dejando que el sol broncee la piel, sintiendo el aroma de las flores, que la brisa traiga buenas energías y olvidando que es lunes, miércoles o viernes porque en las sierras da igual el día de la semana, siempre es un buen momento para tomarse un descanso.

9) LAS ALTAS CUMBRES: PAISAJES GRANDIOSOS (NO DEJEN DE HACER UN PICNIC CON FERNET)

El Parque Nacional Quebrada del Condorito es el mejor spot para quienes les copa la idea de agarrar el auto e irse de trekking. El acceso al parque es por la grandiosa ruta de las Altas Cumbres que une Carlos Paz con Mina Clavero. Tiene diferentes senderos de distinta duración y dificultad; el más corto es de dos horas y va hacia el Balcón Norte y el más largo -con guía- de ocho horas hacia el Balcón Sur donde se puede disfrutar de avistaje de cóndores sobre las impactante quebrada. Al ser un parque, uno tiene la libertad de ir y venir por todos los caminos que están totalmente señalizados en un entorno 100% natural y hacer un picnic con el delicioso salame de Colonia Caroya y (¿por qué no?) un Fernet con Coca para cerrar la jornada.

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Fotos: la destacada es gentileza de Unplash