Ahora que Aperol dejó su huella en la Patagonia, se puede dar por inaugurada la temporada de invierno. Cada estación tiene su magia y Aperol hace brillar lo más lindo de cada una con su impronta hedonista y su estilo. En Bariloche organizó un #Sunset en plena cordillera patagónica para algunos afortunados invitados.
El encuentro fue en el lodge de Baguales que es una reserva de montaña ultra bucólica a ochenta kilómetros de la ciudad (un lugar al que viajan norteamericanos y europeos para practicar heliski, entre otras actividades). Los anfitriones y protagonistas del encuentro fueron la sommelier Agus de Alba y Fernando Trocca.
Trocca se encargó de los platos con sello patagónico (un delicioso cordero, entre otros) y Agus de Alba (reconocida dos veces mejor sommelier de Argentina y embajadora de la marca) de encontrarle los mejores maridajes.
La escena estuvo musicalizada por el DJ Panchi Grimaldi y tuvo la impronta de Aperol; banderines y mantas naranjas, y las típicas copas de Aperol Spritz.
«El encuentro fue en el lodge de Baguales que es una reserva de montaña ultra bucólica a ochenta kilómetros de la ciudad (un lugar al que viajan norteamericanos y europeos para practicar heliski, entre otras actividades). Los anfitriones y protagonistas del encuentro fueron la sommelier Agus de Alba y Fernando Trocca.»
«La primera variedad, elaborada por Agustina, fue un Spritz Cítrico que consta de Aperol Spritz y Sauvignon Blanc, con aromas y sabores a lima, limón, y una acidez vibrante que lo convierte. Esta opción es ideal como aperitivo.»
La degustación fue de dos variedades de Aperol Spritz.
1) La primera variedad, elaborada por Agustina, fue un Spritz Cítrico que consta de Aperol Spritz y Sauvignon Blanc, con aromas y sabores a lima, limón, y una acidez vibrante que lo convierte. Esta opción es ideal como aperitivo.
2) En segundo lugar estuvo el Spritz Clásico con Aperol Spritz y Espumante Extra Brut, un aperitivo donde las burbujas y la acidez del espumante aportan frescura y en paladar dejan una sensación seca y afrutada. En ambos casos, los vinos elegidos fueron Emilia, de la bodega Nieto Senetiner.
Aperol Spritz es un trago camaleónico que puede disfrutarse en distintas atmósferas, maridado especialmente y siempre con estas constantes: una rodaja cítrica, tres partes de espumante, dos partes de Aperol, y una de soda.
La próxima edición sucederá en el tradicional y exclusivo hotel Pire Hue, en la base del Cerro Catedral. Basta con cerrar los ojos e imaginar lo que promete Aperol, paciencia.
