Una infectóloga, un virólogo y un bioquímico del Malbran le cuentan a MALEVA qué puede pasar cuando termine la cuarentena. La buena noticia: si se cumple el aislamiento, en un mes las cosas pueden mejorar/»Incorporaremos costumbres de higiene que están buenas, y la vida social va a volver»/La clave: que no colapse el sistema de salud y que no todos se enfermen a la vez
Si acatamos el aislamiento, en un mes la situación podría empezar a normalizarse
En modo cuarentena: ¿Qué va a pasar después del 31 de marzo? / Los escenarios que nos esperan según tres expertos que consultamos. Por Agustín Gulman.
Encerrados y en cuarentena, un enigma invade a los mayores expertos en infectología, pero también a quienes permanecerán en aislamiento los próximos días con el objetivo de frenar la pandemia de coronavirus: ¿qué va a pasar luego del 31 de marzo? ¿Cómo seguirá el avance del COVID-19 en el país en los próximos días y qué se puede esperar para abril?
La duda no es menor: al menos por ahora, el 31 de marzo finalizarán las restricciones que forman parte del aislamiento social, preventivo y obligatorio, anunciado el jueves 19 de marzo por el presidente Alberto Fernández.
El miércoles 1° de abril los alumnos deberían volver a las escuelas y, si nada altera los planes, el país debería regresar lentamente a la normalidad perdida la semana pasada. Sin embargo, según le revelaron a MALEVA, los expertos que consultamos para esta nota, no descartan la posibilidad de extender la cuarentena con el objetivo de proteger la salud y evitar una crisis sanitaria.
«El virólogo e investigador del Conicet Maximiliano Wilda, le dijo a MALEVA que cuando pase el pico de la crisis «:no vamos a dejar de hacer un montón de cosas por miedo, no es compatible con una vida mentalmente sana. hay muchas prácticas que van a quedar incluidas en nuestro comportamiento que son buenísimas, como lavarnos las manos, no dejar cosas sucias, desinfectar superficies, pero no vamos a dejar de compartir el mate, ni dejar de hacer nuestra vida social…»
Para Gabriela Piovano, médica infectóloga del Hospital Muñiz, el pico de contagios de coronavirus se debería esperar para la próxima semana. La experta no descarta que, si la situación se agrava por la expansión del virus en el país, se deba extender otros 15 días la cuarentena. “Lo que nos espera – le dice por teléfono a revista MALEVA – es que aumenten los casos, porque van a crecer la cantidad de pacientes que se detecten con síntomas, sobre todo porque se espera que aún lleguen muchas personas del exterior que estuvieron en países con circulación del virus”.
Piovano detalla que aún no se ha detectado la circulación en el aire del coronavirus, y explica que hasta el momento son todos casos “importados” o “contactos estrechos”, es decir: personas que se contagiaron de alguien que regresó hace poco del exterior. “Si la gente se guarda en sus casas se corta la cadena epidemiológica. Los casos van a aumentar en los próximos quince o veinte días, máximo un mes, pero si se respeta la cuarentena obligatoria después ya no se van a detectar nuevos casos y el virus se va a solapar hasta desaparecer”, agrega la infectóloga.
Por su parte, el virólogo e investigador del Conicet, Maximiliano Wilda, aclara que “desde el punto de vista del virus, su comportamiento será independiente a las medidas de precaución que cada uno tome”. “No sé si se van a tener que extender o no las restricciones; lo que se puede modificar con estas medidas de aislamiento es la situación desde el punto de vista poblacional para ganar tiempo y reforzar los sistemas sanitarios, Puedo suponer que el 31, si se abre la puerta, todo va a ser un poquito caótico”, analiza.
En diálogo con MALEVA, Wilda señala que en cuarentena, al reducir el contacto entre individuos, se logra disminuir la posibilidad de contagio. “Tener controlada esta situación es clave para no saturar el sistema de salud”, explica, al tiempo que remarca que “el 80 por ciento de los infectados cursan el coronavirus con sintomatologías leves” que no requieren cuidados extremos. “Un poco más del diez por ciento (de los contagiados) van a requerir cuidado intensivo en hospitales”, dice.
“Este nuevo coronavirus no es muy diferente a cualquier otra infección respiratoria. Pasado este tiempo de 14 días, si no se presentó síntomas, quiere decir que no ha tenido la enfermedad, pero eso no quiere decir que no se pueda contagiar más adelante”.
-¿Pensás que después del 31 de marzo las precauciones o alguna limitación va a continuar vigente?
Wilda: hay recomendaciones clásicas para enfermedades infecciosas, pero no vamos a dejar de hacer un montón de cosas por miedo, no es compatible con una vida mentalmente sana. Hay muchas prácticas que van a quedar incluidas en nuestro comportamiento que son buenísimas, como lavarnos las manos, no dejar cosas sucias, desinfectar superficies, pero no vamos a dejar de compartir el mate, ni dejar de hacer nuestra vida social. Ahora va a haber una inercia de no juntarse, de tocarnos los codos (para saludar). La idea es que incorporemos lo más lógico, no lo de emergencia, que nos protege de muchas otras cosas.
“Si la gente se guarda en sus casas se corta la cadena epidemiológica. Los casos van a aumentar en los próximos quince o veinte días, máximo un mes, pero si se respeta la cuarentena obligatoria después ya no se van a detectar nuevos casos y el virus se va a solapar hasta desaparecer”, le cuenta a este medio la infectóloga Gabriela Piovano…»
Mientras tanto, en el Instituto Carlos Malbrán continúa el trabajo de los expertos para detectar nuevos casos. En la última semana avanzaron a un ritmo de 180 test diarios, aunque en los próximos días, supo MALEVA, comenzará el proceso de descentralización para que laboratorios de Capital Federal, Mar del Plata, Santa Fe, Chaco y Córdoba puedan realizar las pruebas y los hisopados faríngeos y nasales no deban viajar desde las distintas provincias del país hacia la Ciudad de Buenos Aires.
“Hay que ver cómo llegamos al 31 de marzo, pensar cómo la gente se tomó las medidas de aislamiento; hay variantes que no son sólo médicas, químicas o biológicas, como es el impacto en la economía del país”, explica a MALEVA el bioquímico del Instituto Malbrán, Javier Difilipo. “Tarde o temprano se va a contagiar un gran porcentaje de la población, porque es lo que está pasando en todo el mundo”, grafica. La clave, de cara a los próximos días, es reducir justamente al máximo el número de contagios para evitar que el sistema de salud, tanto público como privado, entre en colapso.
Por eso, los expertos y el propio Gobierno hablan de “achatar la curva”: implica que, como es imposible evitar los contagios, se deben extremar las medidas para que sea la menor cantidad posible, distribuidos en el tiempo para que el sistema sanitario pueda dar abasto, a diferencia de lo que ocurrió en enero y febrero en China y lo que ocurre por estas semanas en Italia y España, donde la pandemia parece incontrolable y la cifra de muertos crece a cifras astronómicas a diario: sólo en Italia, entre el viernes y el sábado hubo 793 muertes.
“Si todos nos enfermamos a la vez, vamos a saturar el sistema, como España e Italia, que se tomaron el problema a la ligera. Por eso la medida de aislamiento es fundamental. Hasta ahora, creo que se está trabajando muy bien y hay que ver qué pasa cerca del 31 de marzo”, explica Javier Defilipo, del Instituto Malbrán…»
“Si todos nos enfermamos a la vez, vamos a saturar el sistema, como España e Italia, que se tomaron el problema a la ligera. Por eso la medida de aislamiento es fundamental. Hasta ahora, creo que se está trabajando muy bien y hay que ver qué pasa cerca del 31 de marzo”, agrega Defilipo. Piovano, por su parte, señala que si todos los casos sospechosos mantienen el aislamiento, en las próximas dos semanas el 99 por ciento de las personas que estén infectadas ya va a haber expresado los síntomas. “China confinó a la gente cuando tuvo el virus circulando en el aire. A nosotros lo que nos espera es subir los casos”, advierte la infectóloga.
Fotos: son todas gentileza Unsplash