Anthony Vásquez, de La Mar, uno de los chefs anfitriones
Si tu mamá es una persona que disfruta sorprenderse con la buena gastronomía en serio, una exploradora foodie de restaurantes, alguien que sonríe más cuando llega a la mesa un plato que promete ser una fiesta para los sentidos que una cartera, en MALEVA pensamos cinco situaciones de Bigbox en los mejores restaurantes de Buenos Aires para que le regales y que no fallan. Y lo mejor de todo que tiene un año para disfrutarlas, que son comidas para dos personas y que a vos te simplifica la vida, porque podés comprar los regalos online en este link: http://bit.ly/2xOV8GN
Reservás, te sentás en alguna de las mesas de los geniales locales shabby chic de Pani, le decís a la moza/o que tenés una Bigbox ¿Y que es lo que sigue? Dos mini club waffle (con lomito ahumado, cheddar, palta, huevo, cebollitas caramelizadas, bacon); una porción de batatas Pani; dos mini repermitido (milanesita de quinoa en pan brioche, con queso, rúcula, tomatitos secos y mayo de zanahoria); un scon dulce de salmón ahumado y creamcheese; un scon de queso con lomito de cerdo; una porción de empanabritas (empanaditas fritas de brie con miel); un cheesecake bien argento o una chola; dos stella artois o dos bebidas sin alcohol o dos infusiones a elección.
Este es un menú especialmente diseñado por el chef crack de la mar y discípulo directo de Acurio, el peruano Anthony Vázquez (ver #EligenLosChefs malevense con él como protagonista). La selección se basa en los mejores productos del Atlántico. Agua la Boca: Pa’ mi barrinto, comenzamos con el cebichito: elección entre ceviche mixto o de Miraflores; Suave causita, ahí te pongo algo! (Causa criolla o limeña); un sanguchón pa’ que no reclames: Trucha Burger; pa’ que te vayas con el corazón contento, te llanan la panza con este arrocito: norteño o con mariscos; suspiro limeño; shot de café y una copa de vino por persona.
Este restaurante de Recoleta es una de las coordenadas foodies italianas más aclamadas de la ciudad. Daniele cocina con el talento, el aprendizaje y también el conocimiento ancestral de su isla. Para él cocinar es también una conexión emocional y le sale de mil maravillas. ¿Qué va a disfrutar tu mamá? Unas bruschettas – vegetarianas, carnívoras o de mar acompañadas de un Aperol Spritz; un antipasto italiano elaborado con quesos y fiambres importados; un vino blanco a elección de Daniele; un duo de pastas como se hace en las viejas cantinas italianas; un Maccheroni con melanzane y gnocchetti alla campianese y un vino tinto a elección de Daniele. Para el dolce: nada mejor que conocer la Sardinia con Seadas, un clásico; se acompaña con un vino dulce y café.
El regalo consta de distintas – y muy genuinas – piezas exquisitas de la gastronomía de la tierra del sol naciente. Todo con el entorno único del jardín japonés (para sentirte en Kyoto en Palermo). ¿Cómo es la degustación? cinco unidades Harumaki (arrolladitos de carne y cebolla); 10 piezas de Akita roll (roll de langostino rebozado frito, queso philadelphia y palta cubierto con huevo elaborado con técnica japonesa); 6 piezas de Sake Nigiri (de Salmón rosado fresco); una copa de vino y bebida sin alcohol por persona.
Inspirado en las antiguas ferias europeas y en los bodegones porteños Buenos Aires (pero con una vuelta de tuerca más glamorosa); El Mercado es un ambiente con carácter e historia donde tu mamá va a disfrutar, al calor de su horno de barro, de una experiencia gastronómica sublime. Veamos algunos platos: de entrada, sopa del día; dos empanadas de carne cortada a cuchillo; tortilla de papa, chorizo colorado y cebolla con ensalada mixta; de principales no se pierdan su genial entraña grillada o la pesca del día marinada, también sale super su risotto o tagliatelle carbonara. De postre: el panqueque con dulce de leche es lo más.