En Le Blé, combinar cocina francesa con americana a la hora del desayuno es más que posible
“Desayuná como un rey, almorzá como un príncipe y cená como un mendigo”, recomienda la sabiduría popular. Porque la única forma de tener un buen día, es arrancarlo con energía. ¿Y qué mejor fuente de energía que un desayuno potente? En Francia, los elegidos son los croissants. En Estados Unidos, huevos revueltos y bacon. Y en Japón, arroz y pescado. Las reglas que rigen lo que es o no desayuno son invisibles, basadas en usos y costumbres, y por eso, aún más brumosas y quebrantables. ¿Quién dijo que una tostada es suficiente? ¿O que no se puede comer carne a la mañana? Ojo, no estamos hablando del tan popular brunch. Para aquellos que se despiertan un poco antes solo para poder desayunar como corresponde, para los que una torta y un café cuentan solo como postre, para los que siempre van a preferir la sal antes que la azúcar, y para los que buscan un buen plato a las 8 de la mañana, cualquier día. En Maleva seleccionamos los cinco desayunos más poderosos que despiertan hasta al más dormido.
Arranquemos con los clásicos. En estos incondicionales rinconcitos parisinos desplegados por todo Buenos Aires (y desde noviembre del año pasado en una simpática esquina frente a la estación de Vicente López), los huevos revueltos son moneda corriente. Servidos durante todo el día, con jamón, salmón o panceta, este favorito norteamericano le gana a cualquier medialuna. Otra gran opción es un Croque Madame con jamón, queso, bechamel y un huevo frito (por aquí nada de “fritos no por la mañana”). Y si queremos romper aún más con el estereotipo porteño, el “Desayuno de viaje” a $200 aprox., con huevos, salchicha y panceta dorada nos promete transportarnos a la tierra del sueño americano – y de los embutidos – aunque sea por unas deliciosas horas.
Un favorito personal que asegura que no por ser potente no puede ser saludable. En el corazón de Puerto Madero, esta joyita abre su cocina de 8 a 23h. Además de sus imperdibles Smoothie Bowls crudi-veganos (como el de kale, bayas de goji, granola vegana, coco y arándanos a $130), sus desayunos, que son todo lo que está bien (como Green Power a $185). Ol’ Days nos invita a probar cualquier ítem de su menú a primera hora. ¿Por qué no cambiar los típicos bowls de granola por bowls salados? El Quinoa Rainbow con choclo, cebolla caramelizada, palta, cherries, zanahorias asadas y rúcula a $190 o el Buddha Bowl (quínoa, porotos, espinaca hummus de palta y remolacha, bayas de goji y mucho más) a $220 son dos reversiones que acompañados con un super batido o un jugo prensado, valen la pena probar.
Una de las mejores ventajas de viajar es el desayuno del hotel, eso no es ningún secreto. Por suerte, no hace falta tomarse un avión para disfrutar de un amanecer así. UCO, el premiado restaurant emplazado en el espectacular Hotel Fierro, abre sus puertas todos los días a huéspedes y público general para invitarlos a disfrutar mucho más que solo su selección de panes, medialunas y scones caseros. “En UCO creemos que el desayuno es la comida más importante del día”, aseguran. Y lo demuestran. En su irresistible carta de desayuno, el plato único es el desayuno irlandés. Salchichas, morcilla, panceta, porotos, huevo frito orgánico y tomate grillado. Sí, morcilla. Una opción solo para los valientes –y los hambrientos.
Un simple concepto: #alldaybreakfast. Disponible de lunes a sábados hasta las 19.30h. tanto en el local de Belgrano como el de Palermo, el desayuno es la estrella de su menú. El Breakfast Bowl con quínoa, kale y huevos revueltos, la Breakfast quesadilla o el Breakfast Wrap, con kale como el común denominador entre todos ellos, tienen nombres redundantes porque no necesitan nada más. El plato perfecto para el desayuno no podía llamarse de otra forma. Al sumar uno de los mejores cafés de Buenos Aires – o un buen trago para los que necesitan algo extra, porque, de nuevo, no juzgamos el desayuno -, es la receta perfecta para tener un gran día.
Uno que no falla nunca. No se dejen engañar, porque que no esté bajo el menú de “Desayunos & Meriendas” no quiere decir que no sea justo lo que necesitas a las 9am. Un sándwich de berenjena y queso, un buen bagel de salmón y palta, o un chicken roll a $239 con queso fundido, tomates asados, cebollitas y palta. El perfecto almuerzo, o desayuno. Créase o no, cualquiera de estos tres platos puede acompañarse con un café porque, ¿qué no queda bien con café? Aunque ya que estamos por aquí, probar el Matcha Latte de un intenso color verde a $100 es un deber.
Fotos: gentileza lugares mencionados.