Desde un muy canchero (y recién llegado a la escena) local en Palermo que homenajea al Spritz con quince versiones hasta la primera propuesta de Argentina dedicada en exclusivo a los éclairs (delicia francesa)/Los locales con conceptos bien específicos van floreciendo con mucha gracia por la ciudad/Variantes para todo tipo de antojo
Spritzza abrió hace una semana y propone una fiesta del gran aperitivo italiano con ¡Quince versiones de Spritz!
Cuando hacer foco es un arte: siete propuestas foodies de Buenos Aires que se lucen con un producto o plato específico. Por Vicky Guazzone di Passalacqua.
Dicen que el que mucho abarca, poco aprieta. Y estos locales gastronómicos parecen haberlo entendido a la perfección: en lugar de cartas extensas y complicadas, ellos eligieron enfocarse en un único ingrediente y hacer de la especificidad su arte. Así, productos tan variados como éclairs, choripanes o sándwiches de milanesa, entre otros, fueron encontrando su templo en la ciudad. Allá deberían ir en procesión todos aquellos que compartan la inclinación. Y un disclaimer: sí, casi todos los locales están en Palermo. No cabe duda de que al realizar un experimento de este tipo, el barrio más trendy de la ciudad es el terreno fértil por excelencia.
1) Spritzza: larga vida y buen maridaje al spritz (tienen quince versiones) / Su canchera terraza con fueguito es muy lo más / Thames 1699 – Palermo Viejo
Es el más nuevito de la lista: fue inaugurado con los primeros fríos de marzo. Y aunque como su nombre lo indica aquí también hay lugar para la pizza (porque pocas cosas maridan mejor, en especial si es napoletana), el verdadero rey de Spritzza es el spritz. Este aperitivo clásico que en los últimos años tuvo una enorme reivindicación llega al podio de este movimiento con esta apertura que lo homenajea en 16 variedades. “Saliendo de la rutina de la típica forma con prosecco y soda, en Spritzza la versión es propia y artesanal”, describen sus creadores, cuyo ingrediente principal es el aperitivo Santinos Stevani’s, creado con un almíbar con piel de naranjas amargas.
Las variedades de spritz también pueden acompañarse con distintas entradas, perfectas para un tapeo al atardecer. Empanadas de langostinos fritas con masa casera y salsa de jalapeños, cilantro y lima, bruschetta de jamón serrano con mermelada de tomates y esferas de aceto y una fainá crocante con provoleta y cherries multicolor atraen desde la carta, compitiendo codo a codo con las pizzas napoletanas en horno de barro a leña. Aunque en pos de una cita romántica también podría considerarse algún postre bien italiano que acompañe el trago, como un tiramisú o el cremoso de chocolate con turrón y frutos secos.
Ubicado en la esquina de Thames y El Salvador, el local es despojado pero canchero, y su estrella sin duda es la terraza con mesas, sillones, un hogar con brasas y plena de verde. Lugar ideal para alzar la copa bien alto y brindar ¡Al son de Spritzza!, cual grito de guerra de la noche porteña.
2) Chori: haciendo cool y nutritivo un clásico, hay desde chorizos de cordero hasta veggies ¡Atentos a sus tardes de DJ! / Thames 1653 – Palermo Viejo
Pocas preparaciones más representativas de Argentina que el choripán. Por eso el éxito de Chori, una “choripanería al paso” con propuestas clásicas y también súper innovadoras y gourmet, era casi cantado. Lo único extraño es que no haya sucedido antes.“ En medio del boom de las hamburgueserías quisimos hacer algo más local, y agarramos un producto que no se había reversionado mucho y que a la vez estaba muy arraigado en la cultura argentina”, detallan sus creadores, Germán Sitz y Pedro Mojica, sobre su apertura en septiembre de 2016.
Con estética de cómic, primacía del amarillo y un local que siempre tiene cola en la puerta, esta creación de la dupla gastronómica fundadora de otros éxitos como Niño Gordo y La Carnicería se propuso llevar el choripán a un nuevo nivel. Uno que lo reviste con un velo cool, pero también lo vuelve mucho más interesante y nutritivo. Uno que comprende variantes como el “chorichanga”, con cilantro, miel de ananá, jalapeño encurtido y criolla de soja o el “chori san”, con pepino picante, mayo japo y cebolla. Los choris en sí mismos pueden pedirse de cordero, cerdo, jabalí y vegetarianos o reemplazarse por morcilla, y son producidos por completo en el local, como asimismo los panes, guarniciones, toppings y postres. Y en plan de acompañamientos, el plato no estaría completo sin adicionales como choclos con queso, verdeo, papa y tártara o una ensalada de vegetales a la parilla con una salsa de la casa. “Creamos el fast food argentino”, se enorgullecen Sitz y Mojica.
Y claro, al espíritu cool no puede faltarle una buena programación que acompañe el menú. Por eso vale la pena estar siempre atentos a las redes de Chori en espera de sus anuncios de DJs que musicalizan las tardecitas de viernes y fin de semana.
3) Choux Éclairs: productos como joyas / Juncal 4680 – Palermo
La clásica postal parisina sosteniendo un éclair en pleno Champs Elysées ahora es posible de replicarse aquí. Gracias a la dupla de un chef y una pastelera que se conocieron y enamoraron trabajando en el Hotel Alvear nació Choux Éclairs, una boutique dedicada 100% a esta preparación. Inspirados por un viaje de ella a París, decidieron imitar el concepto de Christophe Adam, uno de los chefs más reconocidos de Francia, creador de un local de éclairs en el que cada uno es tratado como una joya. “Eso es también lo que hacemos en Choux”, apuntan.
Así, el suyo es el primer local dedicado 100% a la elaboración de este producto en el país, y se jactan de hacerlo con categoría europea: materia prima de calidad premium, chocolate belga, pulpas de frutas naturales y materiales e ingredientes importados. Están presentados para elegirlos de a uno, tal cual joyas, y combinarlos en coquetas cajas perfectas para regalar o autorregalarse. Algunas de sus maravillas son el de 100% chocolate belga, el de vainilla de Madagascar con almendras caramelizadas y el de pistacho y frambuesa, uno más instagrameable que el otro. Además, todos los meses lanzan nuevos sabores de temporada y están atentos a fechas especiales, como las próximas Pascuas, donde se lucen con una rosca hecha con la misma masa de los éclairs.
Abiertos apenas en noviembre de 2020, casi todos los días deben colgar el cartel de “soldout” (dado que es un producto que debe consumirse dentro de las 24 horas, cuentan con stock limitado). Aunque casi todos los días también deben trabajar en educar al consumidor que los quiere “por docena” y que no siempre entiende que una versión no cueste lo mismo que otra, a causa de los diferentes ingredientes. “Sabíamos que iba a pasar y nos encanta ser los embajadores de los éclairs en Argentina”, sintetiza la dupla con una sonrisa.
4) Divino Budín: sabores artesanales y presentación deluxe (uno de sus éxitos es el de naranja, zanahoria y jenjibre) / Larrea 1472 y Juncal 2720 – Recoleta
Como toda alma dulcera, a Rose Coutinho siempre le gustaron los budines. Y como buena pastelera, una vez recibida le interesó la idea de especializarse en un producto en particular y así poder lograr la perfección del mismo. De esa unión, más la asociación con su pareja Cristian Pizl, nació Divino Budín, emprendimiento que hoy ya cuenta con dos sucursales, ambas además decoradas por la dupla, ya que Rose asimismo estudió Diseño de Interiores.
“Había un nicho de mercado latente en la búsqueda de productos artesanales gourmet con una presentación distintiva”, relata Rose sobre sus comienzos. El uso de moldes nórdicos y la consiguiente estética delicada y atractiva fueron uno de sus mayores diferenciales. El otro vital fue su enorme variedad de sabores y la producción artesanal, sin conservantes. Algunos de sus éxitos son el de naranja, zanahoria y jengibre, el de limón con frutos rojos y el de maracuyá con chocolate, todos nacidos de una primera inspiración en las recetas de la abuela de Rose. “La recuerdo siempre en la cocina agasajando a sus nietos, y me gusta innovar a partir de sus creaciones”, relata, evocando su infancia en su Brasil natal.
Con ganas y proyectos de abrir nuevas sucursales, por el momento la mayor novedad es la incorporación de una yerba mate con la que poder acompañar alguna compra: “se llama Casualidad y es de una empresa de producción pequeña en Misiones. Nos parece ideal para maridar con el budín”.
5) Les Macarons de París: convertirse en referente de una exquisitez centenaria / lesmacaronsdeparis.com.ar
En este caso el momento eureka también se dio con un viaje a Francia. Allí estaba Agustina Moreno en 2008 cuando probó por primera vez un macaron. Pero no fue hasta tres años después cuando logró masterizar la receta y abrir su primer local en Palermo. “Quería ser referente de los macarons en Buenos Aires, para que cuando la gente quisiera conseguirlos se dirigiera a mi local sin pensarlo. La respuesta fue excelente. Cuando te enfocás en un solo producto lográs obtener la mayor calidad”, detalla. Hacer foco no la priva de abrir un enorme abanico de opciones, que como un arco iris radiante de colores despliega chocolate, chocolate blanco, pistacho, arándanos, frutilla, limón, dulce de leche, naranja, coco,café y vainilla.
Aunque desde hace un tiempo ha cerrado el local a la calle, continúa su expansión y descubrimiento de este mundo en el universo online, que le resulta más redituable. Desde allí ofrece sus once variedades, se presenta para eventos o ferias y hasta planifica novedades en el menú. “Estoy pensando en incorporar sabores salados”, cuenta. En su tienda también pueden encontrarse objetos deco como llaveros de la torre Eiffel, guías de París y libros de recetas de esta dulzura centenaria que supo llegar a París a manos de los chefs pasteleros de Catalina de Médici.
6) Milanga & Co: oda al sándwich de milanesa / Av. Corrientes 920 – Microcentro
Otro ícono porteño que finalmente salda su deuda de local propio. Y que además lo hace en una de las avenidas más clásicas de la ciudad, la mítica Corrientes. Nacido en pandemia, la propuesta de Milanga & Co de convertirse en el primer fast food bien argento seguramente sobreviva al éxodo que vive esta zona tras el cierre de oficinas para pasar a trabajo remoto. Es que un buen sándwich de milanesa bien vale atravesar la ciudad y llegar al Microcentro.
Entre sus opciones hay milanesa de carne (de nalga), de pollo (supremas) y de berenjenas (la variante vegetariana), las primeras dos posibles de comerse en versión clásica, napolitana, completa (con huevo, jamón, queso, lechuga y tomate) o para picar. Como guarnición, no faltan las papas fritas, a caballo o con cheddar y panceta, pero también las ensaladas, incluyendo una César.
Con proyecto de interiorismo de Pablo Chiappori, esta propuesta dista mucho de ser uno más de los clásicos bodegones de la avenida. Su piso de damero blanco y negro, sus boxes de madera y su estética entre industrial y retro también son parte de la experiencia, jugando con el concepto de estación de tren y comida al paso y haciendo paladear el sabor de la nostalgia en cada bocado.
7) The Avocado Company: tributo a la palta / Soler 5999 – Palermo Viejo
Si el reinado de la vida fit tuviera un logo, sin duda sería una palta cortada al medio. Sus grasas saludables y su versatilidad para las preparaciones la convirtieron en uno de los alimentos más celebrados, y por eso no es sorpresa que desde julio de 2019 una esquina de Palermo le rinda tributo. The Avocado Company, de un sentador verde agua y detalles de deco con aires de selva tropical, nació a manos de amantes del producto que notaron que Latinoamérica aún era una zona virgen para explotar este fanatismo. “La respuesta de la gente fue muy positiva. Principalmente nos valoran por nuestras combinaciones exóticas de sabor y preparaciones osadas: es un ingrediente súper versátil que no solo puede comerse fresco sino que se puede preparar en salsas, postres, pastelería, panificados, fritarse, asarse, grillarse, encurtir…”, enumera entusiasmado José María Torres Alurralde, socio y barmanager.
Bajo esta premisa, el menú seduce con platos originales como ñoquis, ravioles, hummus y helado de palta, entre otras preparaciones. Y aunque el alto precio de este ítem (sobre todo fuera de estación) puede jugar en contra, en The Avocado Company se las ingenian para aprovecharlo al máximo y combinarlo con ingredientes que lo destaquen incluso en platos con menor protagonismo. Todo este optimismo los llevó a abrir una segunda sucursal medio año antes de la cuarentena, que por desgracia debió cerrar en este contexto. “Vamos a ver cómo evoluciona la situación y no descartamos franquiciar la marca”, comenta Torres Alurralde. Mientras tanto, abril inaugurará un nuevo menú que enfatice la propuesta ATP: para amantes de la paltapero también para celíacos, veganos y vegetarianos en general.
Fotos: son todas gentileza de los locales mencionados. La foto destacada corresponde a los éclairs de Choux Éclairs