Uno de los mejores 15 bares del mundo se esconde debajo de una frondosa e instagrameable florería
Nadie puede negar que un espacio con flores es inevitablemente más lindo. Ramos de colores, verde en todos sus formatos, aromas distintos y el mejor costado de la naturaleza llenan cualquier espacio de cuatro paredes con un toque estético y crean una atmósfera especial. Y, con este manifiesto, salimos a buscar cinco espacios que, además de vender flores y crear ramos a medida, ofrecen desde experiencias gastronómicas hasta objetos de decoración. Cócteles de primera, cafeterías de especialidad, una galería mágica escondida en Palermo y más coordenadas llenan sus espacios con las más lindas flores y se convierten en imperdibles primaverales. Obvio, los compartimos con ustedes:
Imposible no liderar la lista con este – cada vez más – afamado bar. Ah, porque sí, existe una florería que también es bar. Y, aunque pareciese imposible que su renombre y prestigio aumente, Florería Atlántico logró, recientemente, un ranking impensado incluso por los soñadores más enérgicos: estar dentro de los mejores 15 bares del mundo. El bar creado por el famoso Tato Giovannoni logró sobresalir no solo en Argentina, no solo en Latinoamérica. En el mundo, y según la clasificación de The World’s 50 Best Bars.
Una vez puesta la vara bien alta, pasamos a contarles más. Desde afuera, la florería es digna de ser la tapa de semejante bar oculto. Este espacio es, a primera vista, una frondosa meca para los amantes de la primavera donde también venden vinos varios, poblada por todos los colores e inevitable de querer fotografiar. Una introducción impecable, tanto que, a pesar de su inmensa popularidad, muchos pasan sin percatarse de la naturaleza dual de aquel rincón porteño. Pero, el segundo capítulo escondido – fiel representante de la movida speakeasy – está en el subsuelo. Cócteles intachables para paladares de lo más exigentes (como el Pacto Melusiano con camus, Sauvignon blanc, manzana orgánica, limón y chancaca), una carta inspirada en las principales corrientes migratorias, y un ambiente entre elegante y cool.
Si es la casa del diseño, la que reunió toda actividad epicúrea y toda situación placentera en un mismo lugar, debían incluir una florería. Estéticamente impoluta, Casa Cavia nos conquistó por los ojos desde el vamos. Sede de un restaurante, una librería, una editorial, un jardín y un bar, acá lo de “florerías que son más” queda, incluso, un poco chico. Porque este espacio no se agota en ninguna de sus alternativas, sino que las converge para crear un micro mundo para todos los sentidos.
Blumm Flower Co., la atracción que nos compete, fue creada por Camila Gassiebayle, licenciada en Curaduría y Gestión de Artes Visuales. “La florería nació de la pasión por el campo, las flores y la belleza. Creemos que la esencia de lo bello se encuentra en la contemplación de la naturaleza”, cuentan desde adentro. Con ese lema se dedican a realizar arreglos florales exclusivos y personalizados. “Sentimos que la presencia de las flores transforma el ambiente, modifica a las personas, vitaliza la atmósfera con poesía, elevando los sentidos”. Junto a su propuesta, un restaurante alta gama, un jardín ideal para tomar el té, una librería que, a su vez, es un espacio privado para comer… en fin, se entiende: una convivencia entre múltiples circunstancias disfrutables (e instagrameables, desde ya).
En un polo foodie en plena ebullición, Olivos sigue sumando propuestas seductoras tanto desde la estética, arquitectura y diseño, como desde las opciones gastronómicas. En esta ocasión le toca a Malagrino, un nuevo espacio para desayunos, almuerzos y meriendas con un jardín al final y, como ya se imaginan, una florería.
Lola Flores eligió instalarse no como una clásica florería, sino como una opción de jardinería y diseño entre pastelería de autor, cafetería de especialidad, opciones foodies para toda hora y una arquitectura que va perfecto con la energía de la zona. Una apertura novedosa y llamativa entre vidrios, madera, lámparas de diseño y un jardincito divino. Ya se imaginarán que la combinación entre florería y cafetería es, por lo menos, atractiva.
Un tanto secreta, esta galería se refugia detrás de un portón negro y esconde, dentro, un espacio que bordea lo mágico. Decoración, gastronomía y, claro, flores llenan la vibra de este secreto palermitano. Una auténtica galería de diseño que es una experiencia en sí misma, cuyo diseño, además de admirable, podés llevártelo a tu casa. Muebles, vajilla, libros, lámparas y más objetos seleccionados crean un ambiente entre net, bohemio, rústico, canchero y cool.
Oriundo de Punta del Este, el espacio que montaron sobre el corazón porteño reúne, en un pasaje híper fotografiable y colorido, aromas de todo tipo. Por un lado, de los ramos de flores y, por el otro, de la creación de Inés Bertón, la número uno si de té se trata. Tealosophy, su creación, regala al espacio aromas de todo tipo y suma magia al corredor. Y Decata completa la experiencia, con una opción cafetera y pastelera. Porque claro que debía haber, entre plantas, flores y diseño, un spot para sentarse a tomar el té.
En el tesoro más ovacionado de San Telmo, su histórico mercado, Maevia glorificó el pequeño rincón que se adueñó hace menos de un año, con colores y naturaleza. Naná y Juan viven en el barrio hace ocho años, y lo eligieron para abrir esta tienda botánica que nació desde el amor por la zona, la pasión por la naturaleza y la inspiración que Maevia Noemí Correra les transmitió: una botánica especializada en orquídeas y descubridora de nuestra flora patagónica. De ella, el nombre de este proyecto, tributo al universo cautivador de las flores y plantas.
Pero, como toda coordenada presente en esta nota, no decidieron agotarlo ahí. Además de las flores, los ramos y los arreglos en verde per sé – y sin alejarse de la naturaleza y lo natural –, sumaron productos de cosmética natural cruelty free, jabones orgánicos, velas de cera de soja, aromatizantes, ramilletes de sahumado, y más. “Quisimos profundizar la propuesta desde una mirada más amplia de la botánica y sus propiedades”, nos cuenta la pareja creadora.
Fotos: gentileza lugares mencionados.