RECORRIDO PARA FANÁTICOS QUESEROS: SEIS PROPUESTAS CON NOVEDADES IMPERDIBLES / POR GISELA CARPINETA Y PANCHO BARREIRO

Para desmayarse: el nuevo local de Valenti en el shopping Alcorta 
 

 
El mundo está dividido en dos: los que los aman y los que los odian. A la hora de los quesos, no se aceptan medias tinta. Pero sí múltiples opciones: son los compañeros perfectos de todo aperitivo, ya sea una cerveza, un vermut o un vino rosado, y cada vez hay más locales que permiten disfrutar todas sus variedades.  Si sos del grupo de los fanáticos queseros, sumergite en este recorrido MALEVA soñado desde San Telmo hasta Retiro y desde Belgrano hasta Olivos.
 

El primer local de Valenti abrió sus puertas en 1951, en el viejo Mercado del Plata, y desde ese momento, se convirtió en uno de los puntos favoritos de los amantes de los quesos. Mientras que hoy ya cuenta con siete sucursales, la más reciente abrió en el tercer piso del Alcorta Shopping y fue una de las grandes apuestas foodies del 2017 del paseo de compras. Con múltiples opciones y una estética megacuidada, acá podés comprar productos por peso u ordenar tablas: en versión grande o chica, incluye desde Emmental francés hasta Mozzarella, Gouda, Fontina val d’aosta, Próvola ahumada, queso azul o Parmesano al aceto. ¿El plus? También sumaron la modalidad pick-up.
 

Para abrir el primer wine bar del grupo que lidera, el reconocido sommelier Aldo Graziani eligió una zona clave de la Ciudad: la esquina de Esmeralda y Paraguay. Ahí, desde mediados de 2017, ofrece una exclusiva selección de vinos de la distribuidora El Garage de Aldo, con un servicio diario que incluye entre 15 y 20 vinos para pedir por copa o por media copa. A esto, obviamente, se suma el maridaje perfecto: tapeo de quesos. Presentados en unas tablitas de madera, se venden por 60 gramos y tenés tres opciones: Brie, Mimollete y queso de Búfala. Recomendación personal: acompañá los quesos con un rosado fresco y de color claro, de esos levemente asalmonados que cada vez suman más adeptos.
 

Con cuatro sucursales y una propuesta que combina el vermut porteño con el tapeo español, La Esperanza de los Ascurra es de esas opciones con onda y buena comida que tiene a los quesos como protagonistas. Acá podés probar desde provoletas ahumadas, hasta boconccinos a la milanesa o burrata (un queso mantecoso y cremoso que se elabora a partir de la mozzarella de búfala), así como un clásico que pasa de generación en generación: queso y dulce para el postre. Pero además, en la nueva carta que acaba de lanzarse en marzo, se sumó una nueva opción: el triolet, un emblema del copetín porteño. Este trío de ingredientes incluye Sardo en aceite de oliva y se puede acompañar con las múltiples opciones de vermut que ofrece el lugar. Ideal para disfrutar acodados en la barra.
 

Con más de 400 años de historia, la raclette (queso fundido que se sirve con una base de papas rústicas y diferentes toppings como bacon, pepinillos o cebollitas) es un plato típico que se creó en el cantón de Valais. Desde mediados del año pasado se puede disfrutar en Je Suis Raclette, una de las últimas aperturas del renovado Mercado de San Telmo. En este local, que apuesta a acercar los clásicos de Suiza pero en formato street food, la raclette es el plato estrella: tenés varias opciones con carne mechada, con chorizo y salsa barbacoa, así como una propuesta veggie con vegetales grillados. Pero hay más opciones queseras: también tenés fondue de queso, o las papas rosti que se sirven tipo tortilla individual con queso raclette fundido encima.

Este lugar le hace honor a su nombre. Por donde mires, hay quesos, quesos y más quesos. Colgados, exhibidos en los mostradores e, incluso, en el sector más especial: la cava. En este sector vidriado vas a encontrarte con productos como el Parmigiano Reggiano, un queso parmesano italiano de consistencia dura y granular cuya producción se encuentra regulada por una Denominación de Origen Protegida. Además, acá podés comprar todo tipo de quesos al peso, como Brie, Pategrás, Cheddar, Mozzarella, Gouda o quesos cremosos, así como encargar tablas de fiambres o la selección especial de quesos.
 

El local de Olivos se trata de la última apertura de esta cadena foodie y en la que conviven distintos espacios en un mismo lugar: restaurante, pastelería, café, bar y deli, así como un rincón especial de Quesos y Charcuterie, un sector de exquisiteces para los amantes de los quesos y fiambres. Cuentan con diferentes tablas de quesos, en formato chico o grande, que incluye opciones como queso Pepato, Gruyere, Gouda, Fontina, Boconccinos o Caprice des Dieux, un queso de pasta blanda de origen francés imperdible. ¿Para acompañarlo? Vinos (también tenés vinos por copa), espumantes y una extensísima carta de cervezas argentinas e internacionales.
 
Fotos: gentileza web María José Bertonasco y locales mencionados.