El genial mural que marca la ubicación «secreta» del Pollo Gómez
EN ARRIBEÑOS 3100.
No hay tantos bares en Buenos Aires donde se logre la magia de poder sentirte en una fiesta en una casa. Bueno, este es uno de esos lugares. Con su onda también de bar bastante secreto y luego de una gran remodelación que lo dotó de una doble barra, al Pollo Gómez se va a pasarla bien, a tomar tragos simples pero potentes, a escuchar música que siempre va in crescendo en espíritu a lo largo de la noche (alrededor de las tres de la mañana se empieza a cachenguear). Es el corazón hoy de la noche de Nuñez, y un lugar donde siempre te reciben con buena predisposición (incluso el vikingo de la entrada). También se puede ir a cenar, el menú va variando, pero oscila entre pizza, comida mexicana, bondiola, etc. Es una buena opción para empezar la noche en un lugar que sabés que se va a poner sí o sí.