La maravillosa decoración de Boticario
La Semana de la Coctelería ya está entre nosotros: hasta el 20 de mayo estamos celebrando la tercera edición de este ciclo organizado por BA Cóctel, que se propone reunir a bartenders, bebedores, marcas, cocineros y la comunidad toda en eventos pop up, en clases y talleres, en tours cocteleros y, claro, en las infaltables barras de Buenos Aires. En la página web oficial (http://bacoctel.com.ar/semanadelacocteleria/) se puede encontrar el detalle del cronograma de encuentros y actividades, además de las promociones vigentes en cada bar participante (¡son más de 45!), pero acá en MALEVA te contamos cuáles son los 5 lugares que tenés que visitar para sorprenderte no solo con el paladar. Escenografías, fantasías, historias, glamour clásico: un viaje a universos paralelos a través de templos del buen cocktail.
La última y más imponente sucursal de los anticuarios de Gabriel del Campo, en una de las avenidas más lindas de Buenos Aires, inauguró su barra con asesoría de Sebastián Atienza. Un bar de impronta tana en el corazón de un galpón atiborrado de reliquias, donde se pueden pedir tragos como el Sporco: Campari, gin Mare, salmuera de alcaparras y Cinzano Rosso 1757 con albahaca.
De los mismos propietarios de The Harrison Speakeasy, Uptown lleva la apuesta de bares secretos y escenográficos a otro nivel: se ingresa por la boca de un subte neoyorquino, se llega a una planta subterránea donde hay un vagón real y luego se termina en una poderosa barra, con protagonismo del bartender Luis Miranda. ¿Para beber? Esta semana, el curioso Vip Rosé: Carolina Herrera 212 Vip Rosé, Absolut, Chandon Rosé, cordial de sandía y jugo de limón.
De la misma mente que creó el exitoso Chupitos, nació la idea de Boticario: Juan José Ortiz es el artífice de una elaborada fantasía, inspirada en los antiguos boticarios -valga la redundancia- y farmacias, que ofrece cócteles con ingredientes caseros y brebajes en frascos a la vista. El trago: una versión de Old Fashioned con Jim Beam macerado en granos de café y pimienta roja, bitter artesanal y azúcar especiada.
Aunque la estética oscura y teatral remita, sin lugar a dudas, a las obras del director de Blue Velvet y Twin Peaks, Suspiria es también un homenaje al trabajo de otros cineastas como Darío Argento (Suspiria) y Stanley Kubrick (The Shining). Fede Cuco, bartender y alma máter, no hace nada a medias y este bar es una muestra de ello. En este rincón mágico y conceptual, se puede pedir El Tiempo Es Oro: un cocktail a base de Ketel One, jugo de lima, elíxir de sauco, soda casera de lima y polvo de oro.
Sillones de cuero, alfombras, veladores, arañas de techo, velas eléctricas, cortinas de terciopelo, barra de mármol, piano de cola y, en territorio Faena, alguna inevitable cabeza de animal embalsamada: The Library Lounge, el bar ubicado junto a la piscina del hotel en Puerto Madero, es un espacio kitsch que por excéntrico no deja de ser lujosísimo, elegante y glamoroso. Vale aprovechar esta ocasión para acercarse a un lugar poco frecuentado y pedir un Onix: Glenmorangie Single Malt 10 años, jerez, menta, almíbar de canela y jugo de naranja.
Fotos: gentileza bares mencionados.