La bodega sanjuanina lanzó Callia Criolla, un vino elaborado con la icónica uva criolla chica, 100% autóctona, revalorizando este varietal y reafirmando su compromiso con la herencia vinícola del país/El evento de lanzamiento en la Quinta Anchorena en San Isidro fue un pintoresco viaje en el tiempo/Fresco, ligero pero con personalidad y una relación precio-calidad difícil de encontrar.
Callia Criolla y una etiqueta que describe en imágenes el ADN del espíritu argentino.
Entre pulperías secretas, próceres y pastelitos: así presentó Bodegas Callia su último lanzamiento; Callia Criolla, un vino testigo de la historia argentina.
Si hay un vino que fue testigo de la historia Argentina, que estuvo presente en las mesas y en los brindis de los momentos más icónicos – como la Revolución de Mayo o nuestra declaración de la Independencia – para la sorpresa de muchos, no es el que primero salta a la cabeza: es la Criolla.
Para acompañar este boom argentino que está tiñendo todo de celeste y blanco, y reconectarnos con nuestra historia y con nuestras raíces a través de una copa de vino, Bodegas Callia lanzó Callia Criolla, la última novedad de su portfolio. Este lanzamiento revaloriza un símbolo de identidad natural, un puente entre generaciones y un reflejo de la historia del país.
«Con este lanzamiento buscamos reconectar a los consumidores con una parte esencial de nuestra historia vitivinícola a través de un vino con gran intensidad y frescura y con un paso ligero, alineado con las tendencias actuales de consumo», expresa Araceli Cristian, Brand Manager de Bodegas Callia…»
Y, para sumergirnos en el espíritu de época, el evento lanzamiento fue un túnel del tiempo a la Buenos Aires colonial, con la Quinta Anchorena de San Isidro como el entorno ideal. Ingresabas con una palabra clave a la pulpería secreta donde te servían una copa de Criolla clandestina (ya que, como cuenta el historiador Felipe Pingna, el único vino permitido en aquel momento era el que venía de Europa). Alrededor, circulaban personajes de la época, mesas con delicias criollas clásicas – desde humitas, empanadas y guiso de lentejas hasta pastelitos de membrillo – un show de Folklore, mini obras de teatro y una charla del historiador argentino que fue convocado por Bodegas Callia para narrarnos la historia y anécdotas de “La Criolla”.
Con este lanzamiento, la bodega devuelve a la Criolla su lugar en las mesas argentinas, donde siempre perteneció, resignificándola con una mirada actual, pero sin perder su esencia. Así, vuelve a hablarnos de lo que somos: un país apasionado y orgulloso de lo propio.
Callia Criolla está elaborado con uvas 100% Criolla Chica, provenientes de viñedos antiguos ubicados en el Valle de Tulum, San Juan, con más de 75 y 85 años de antigüedad, representando con autenticidad la tradición vitivinícola sanjuanina. Es un vino fresco, ligero pero con personalidad, que combina con todas las comidas que amamos los argentinos, y a un precio sugerido que sorprende por la calidad que regala: $5.900.
«Para reconstruir esta historia, convocaron al historiador Felipe Pigna, un enamorado de la identidad argentina, que se sumó a este proyecto para hablar sobre la Criolla, no solo como un ícono cultural argentino, sino también como protagonista de la vitivinicultura de nuestro país. «Como testigo de nuestra historia, la uva Criolla desempeñó un papel clave en numerosos eventos que moldearon nuestra identidad nacional. Acompañó los brindis revolucionarios y celebró los grandes triunfos patrios…»
«Con este lanzamiento buscamos reconectar a los consumidores con una parte esencial de nuestra historia vitivinícola a través de un vino con gran intensidad y frescura y con un paso ligero, alineado con las tendencias actuales de consumo», expresa Araceli Cristian, Brand Manager de Bodegas Callia. Y agrega: “La historia de la uva Criolla fue nuestra gran fuente de inspiración para este lanzamiento. Queremos compartir cómo esta cepa acompañó momentos clave de la historia de nuestro país.”
Para reconstruir esta historia, convocaron al historiador Felipe Pigna, un enamorado de la identidad argentina, que se sumó a este proyecto para hablar sobre la Criolla, no solo como un ícono cultural argentino, sino también como protagonista de la vitivinicultura de nuestro país. «Como testigo de nuestra historia, la uva Criolla desempeñó un papel clave en numerosos eventos que moldearon nuestra identidad nacional. Acompañó los brindis revolucionarios y celebró los grandes triunfos patrios», comenta el autor del libro “Al gran pueblo argentino, salud”. Toda esta historia se puede descubrir a través del código QR en la contraetiqueta de la botella, así como en la web de la bodega.
En la nueva etiqueta – que, sin dudas, llama mucho la atención – se destaca el trabajo conjunto realizado por el prestigioso estudio de diseño Boldrini & Ficcardi expertos en el diseño de etiquetas de vinos y la ilustradora Marianela Euliarte (@marianclick), quien dio vida al concepto de argentinidad mediante la creación de personajes y escenarios inspirados en nuestra historia. En la pieza conviven símbolos argentinos de distintas épocas que reflejan el orgullo de lo que nos une como nación.
Callia Criolla se suma al portfolio de Bodegas Callia, integrado por los varietales Malbec, Cabernet Sauvignon, Syrah, Merlot, Chardonnay, Sauvignon Blanc y Syrah Rosé; los blends Syrah-Malbec y Syrah-Cabernet; y los espumantes Brut Nature y Extra Brut. La exquisita propuesta de la bodega sanjuanina se completa con sus líneas Callia Tardío, Esperado y Contracara.
Galería:
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Las fotos: son todas gentileza para prensa de Bodegas Callia.