MALEVA en Uruguay. Desde Punta Ballena hasta José Ignacio, metimos un scouting con mirada MALEVA por los paradores con más estilo en busca de las mejores barras y sus preparaciones más interesantes/Además: qué pasa en cada una de las playas.
El lounge de Mansa, chill y natural: uno de los nuevas coordenadas inevitables del verano esteño.
MALEVA en Uruguay / Hay match, paradores y tragos, un solo corazón: dónde tomar los mejores cócteles con los pies en la arena en Punta del Este. Por Vicky Schirinian desde Punta del Este para MALEVA (texto y fotos).
El verano tardó un poquito en llegar en la costa esteña, con los últimos días del año fríos y algunas lluvias para la primera semana de enero, al fin llegó el calor a Punta del Este y es un planazo pasar el día entero en la playa, yendo de la sombrilla al mar, ida y vuelta. A cierta hora de la tarde aparecen tal vez ganas de tomarse un rico trago en un lindo parador con vista al mar por eso en MALEVA estuvimos haciendo un scouting por algunos clásicos y algunos nuevos paradores de playa que redoblan la propuesta gastronómica, mucho más allá del choclo, el pancho y la gaseosa, con cartas de comida que incluyen sushi y hasta cheeseburguers y cartas de tragos super sofisticadas que nada tienen que envidiarles a los mejores bares de cualquier capital del mundo. Aquí están y estos son nuestros elegidos.
«Apenas llegué al nuevísimo Mansa sentí que estaba en el Caribe: árboles que dan sombra, tótems de madera, mobiliario de ratán y un mar celeste transparente al frente. Mansa es el nuevo parador de playa del Hotel Serena en la parada 24 de la mansa, que con nueva administración se animaron a crear un restaurante de playa sofisticado. El trago que mejor representa a este lugar es el Caribe del Este que fue literal lo primero que pensé cuando entré. Es un trago que se sirve en un vaso de coco, con ron, piña colada, jugo de ananá prensado en frío y una crema de maracuyá helada…»
1) El Chiringo José Ignacio y su trago de la casa: el Botánico.
El parador cumple este año seis temporadas y se instala cada vez más y mejor en su lugar en el mundo: la Playa Brava de José Ignacio. Buena onda innegociable y lindo ambiente para disfrutar de su carta de comida variada, para todos los públicos, sabores del Río de la Plata con influencias del Mediterráneo, ingredientes locales frescos y en su mayoría orgánicos. El trago de la casa es el Botánico que, como su nombre lo indica, está compuesto por bebidas a base de hierbas y complementos frescos y herbales. Tiene cynar, jugo de limón, almíbar, menta, tónica y Fernet.
2) Imarangatú y un trago ochentoso: Daiquiri con un twist.
En la Parada 7 de la mansa se encuentra Imarangatú, un parador elevado sobre la playa con vistas a la Isla Gorriti. En este punto tan emblemático de Punta del Este recomendamos tomarse un trago nostálgico, pero en su versión moderna: el Tropical 80’s que es una reversión del daiquiri clásico batido, súper fresco y tropical como bien dice su nombre. Sus ingredientes son: ron dorado, vermú bianco, jugo de limón, almíbar simple y jugo de ananá. Todas las tardes en este parador suena algún DJ diferente, por lo que es ideal ir a la tarde y disfrutar de buena música, buenos tragos y el mágico atardecer sobre el mar.
3) Bikini Bistró y una caipi Malibú.
En la playa Bikini en Manantiales inauguró este año un nuevo parador: Bikini Bistró. De los mismos dueños del parador que está sobre la playa y del mítico restaurante Cactus y Pescados, este bistró planea estar abierto todo el año con un salón cerrado con un gran deck, con vistas panorámicas al mar. Nos recibe Emiliano su bartender que viene desde La Plata y nos prepara la Caipi Malibú, una caipiroska endulzada con coco. Sus ingredientes son: vodka, ron de coco, limas, kiwi y jugo de limón. Una delicia.
4) Chicho Chihuahua y un buen Aperol.
El parador gay friendly de la playa naturista Chihuahua nos propone que probemos su trago de la casa que se llama Pomelote y está hecho a base de Aperol pero con pomelo y garnish de romero. Súper fresco y bien amargo, ideal para acompañar comidas o tomarlo junto con algún aperitivo al atardecer.
5) Olaf (en Punta Ballena) y el Clericó.
Este pequeño y lindo parador en Punta Ballena se caracteriza por su propuesta cultural sumada a la gastronómica y de coctelería. Todas las tardes hay música en vivo, casi siempre jazz y bossa nova, para acompañar el atardecer. Sin dudas una bebida característica de la playa Solanas es el Clericó y en Olaf lo preparan muy bien: mucha variedad de frutas y mucho hielo.
6) Mansa Beach Club y un trago muy caribeño.
Apenas llegué al nuevísimo Mansa sentí que estaba en el Caribe: árboles que dan sombra, tótems de madera, mobiliario de ratán y un mar celeste transparente al frente. Mansa es el nuevo parador de playa del Hotel Serena en la parada 24 de la mansa, que con nueva administración se animaron a crear un restaurante de playa sofisticado. El trago que mejor representa a este lugar es el Caribe del Este que fue literal lo primero que pensé cuando entré. Es un trago que se sirve en un vaso de coco, con ron, piña colada, jugo de ananá prensado en frío y una crema de maracuyá helada por encima. Es un trago ácido y dulce al mismo tiempo. Además, preparan un Negroni del Mar que tiene vermú macerado en cacao belga y sal marina trufada que le da un toque especial, como recién salido del mar.
7) Montauk by The Grand Hotel y el Clarita Sour.
Montauk By The Grand Hotel es el parador de playa de The Grand Hotel. Ubicado frente al edificio principal, cruzando la Rambla, en la parada 10 de la Brava. Un espacio interior playero, descontracturado, con lámparas de fibras naturales, cañas y madera y una amplia galería, abierta y fresca, invitan a pasar un momento en familia y amigos todos los días de verano. Respondiendo a la tendencia de los tragos sin alcohol, elegimos de Montauk el Clarita Sour que tiene jugo de frambuesa, aquafaba (o merengue vegano), jugo de naranja, lima y bitter. Y el trago que lleva el nombre del parador es un Gin con pomelo, albahaca, aguamiel y almíbar.
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Foto Imarangatú: es gentileza del parador.