Dani Dini y su bici en el Tiergarten, uno de los parques imperdibles para pedalear
Berlín en bici: diez coordenadas imperdibles de una de las ciudades más «bike friendly» de Europa. Por Dani Dini (desde Berlín)
Pocas ciudades en el mundo son tan ‘bike-friendly’ como Berlín, la capital alemana y tercer destino más visitado de Europa. Allí conviven 180 nacionalidades diferentes y fue nombrada Ciudad Creativa por la UNESCO. Vibrante, cosmopolita, artística, rebelde y cultural, en Berlín la historia -lo que fue, pero a la vez, también, el futuro- está presente a cada paso, o mejor dicho… a cada pedaleada. No hay mejor manera de conocerla que ‘bicicleteando’ sus calles: con el viento en la cara y el sol incipiente del comienzo del verano en esta época del año, no puede ser más perfecto. En esta nota, va un recorrido MALEVA descubriendo Berlín literalmente parando y estacionando la bici durante un día entero, tal como hacen los locales para ir a trabajar, a pasear, o simplemente para moverse de un lado a otro, porque tienen a las bicicleta como medio de transporte principal. Aquí los diez puntos para probar y conocer la ciudad en dos ruedas.
1) LULU GULDSMEDEN HOTEL Y EL RESTAURANTE SEASON BERLIN: HOTEL BOUTIQUE CON UN RESTAURANTE DE COCINA NÓRDICA IMPERDIBLE
Guldsmeden es una cadena familiar de hoteles boutique de lujo con certificación Green Globe, con sede en Copenhague, Dinamarca, que en 2018 llegó a Berlín. Está en Postdamer Strasse, es un hotel ecológico y sustentable, y además allí funciona Sæson, el restaurante de cocina nórdica y de producto, donde se prioriza lo orgánico. En el hotel te prestan bicis para recorrer la ciudad durante todo el día.
2) POSTDAMER PLATZ Y SONY CINEMAS: UN LUGAR ESTRATÉGICO CON HISTORIA Y FUTURO
Postsdamer Platz está en el antiguo corazón de Berlín y hoy una de las zonas más modernas de la ciudad. Fue una de las plazas más bulliciosas de Berlín en el pasado, pero quedó arrasada durante la Segunda Guerra Mundial, y partida en dos por el Muro de Berlín. Hoy es el símbolo de la reunificación, con una serie de edificios que representan a la ‘nueva’ ciudad. Allí se hace la Berlinale, el famoso festival de cine. También está el Sony Center, un complejo de cines y restaurantes impactantes, que se caracteriza por una cúpula enorme de cristal y acero –obra de Helmut Jahn-. Todavía allí se conservan algunos restos del muro, y se conecta, muy cerca, con la Plaza de Brandenburgo (se puede seguir directamente el recorrido que cubría el muro hasta llegar a ella).
3) TIERGARTEN: ¡210 HECTÁREAS DE VERDE!
Es el parque más importante de la ciudad -y el segundo más grande después de Grunewald- con 210 hectáreas que son el pulmón verde del centro de Berlín. En uno de sus puntos, se puede ver Siegessäule, la Columna de la Victoria.
4) LA PUERTA DE BRANDENBURGO Y EL BUNDESTAG: SÍMBOLOS DE LA HISTORIA Y LA CIUDAD
La Puerta es una de las antiguas puertas de entrada a Berlín, y uno de los símbolos más importantes de la ciudad. Fue inaugurada en 1791 y es un símbolo del triunfo de la paz sobre las armas. Fue muy dañada durante la guerra, pero volvió a brillar tras la reunificación. A pasos de allí está el Bundestag, sede del Parlamento alemán.
5) BERLIN HOLOCAUST MEMORIAL: UN MONUMENTO CONMOVEDOR
Muy cerca de la Puerta de Brandenburgo está este monumento conmovedor que rinde homenaje a los judíos asesinados durante el Holocausto. Fue diseñado por el arquitecto Peter Eisenman y por el ingeniero Buro Happold. Es un campo inclinado de 19000m2, en la que hay 2711 losas de hormigón en distintas alturas. Atravesarlo, o simplemente contemplarlo, es conmovedor.
6) BICICLETEANDO POR MITTE: DONDE TODAS «LAS BERLIN» CONVIVEN
Es el principal distrito de Berlín y está en el centro histórico de la ciudad -la Puerta de Brandenburgo y el Reichstag son parte de él-. Mitte significa ‘centro’ en alemán, y lo interesante es que allí convive todo lo que es y fue Berlín: las cicatrices del pasado, los edificios históricos y toda la vanguardia artística y gastronómica actual. Paramos en Shiso, uno de los restaurantes populares, para probar una hamburguesa de carne wagyu y salsa picante, y seguimos de largo entre sus calles, llenas de galerías de arte y mucha onda.
7) UNA VUELTA POR EL MERCADO MARKTHALLE NEUN: 60 PUESTOS EN EL BARRIO TURCO (SUPER HIPSTER Y DE MODA)
Está en Kreusberz, el barrio turco (de moda y súper hipster). Son 60 puestos, la mayoría con productos orgánicos y todo tipo de gastronomía. El mercado original tiene 120 años pero en 2011 se renovó completamente. Aquí el recomendado es el Currywurst, plato típico: salchicha cocida a la parrilla con papas y ketchup, y también el spätzle. Para los más osados, hay un puesto que ofrece insectos fritos europeos, tipo snack.
8) CHECKPOINT CHARLIE: NO PODÉS NO TENER TU FOTO ACÁ
El Punto de control Charlie fue el más famoso de los pasos fronterizos del Muro de Berlín durante la Guerra Fría. En él se podía conseguir el visado para cruzar de Berlín Este a Berlín Oeste. Se encontraba en la Friedrichstrasse y abría el paso a la zona de control estadounidense con la soviética, donde actualmente se unen los barrios de Mitte y Kreuzberg. Sólo se permitía usarlo a empleados militares y de embajadas de los aliados, extranjeros, y trabajadores de la delegación permanente de la República Federal Alemana y funcionarios de la Alemania del Este. Desde el 2001 hay una réplica del cartel que años atrás advertía: ‘Está abandonando el sector americano’. Además, hay una pequeña frontera donde hacer fotos y una colección de fotos de la época, junto al Museo del Muro.
9) COOKIE´S CREAM: UN RESTAURANTE VEGGIE CON UNA ESTRELLA MICHELIN
¿Sabían que Berlín se autodenomina la capital vegana del mundo? Tienen más de 150 restaurantes veganos y vegetarianos y Cookie’s Cream es uno de ellos, galardonado con una estrella Michelin. Se puede comer a la carta o probar el menú degustación que va variando, acompañado de los vinos que forman parte de la carta que tiene una muy buena selección.
10) DEGUSTACIÓN DE CERVEZAS EN BRLOBEER: UNA FÁBRICA DE CERVEZA NÓMADE CON MESITAS AL AIRE LIBRE ¡IDEAL PARA EL FINAL DE LA PEDALEADA!
Es una fábrica de cerveza nómade, donde todo el proceso es sustentable, y la estructura está hecha con containers en un predio que incluye mesas al aire libre. Imperdible para cerrar el día a pura pedaleada con una buena degustación.
Fotos: Daniela Dini y Unplash