La perfecta seducción de los bares con jardines: seis propuestas a puro cocktail y verde

Porque todo trago es más rico en un ambiente al aire libre, les traemos seis coordenadas de la vida nocturna porteña con espacios rodeados de verde/Desde Recoleta hasta San Isidro/Música en vivo, happy hours, cócteles de autor y ambientes muy instagrameables / ¿Qué pedir en cada uno?

El calorcito no terminó y nada mejor que un plan con cócteles de autor y aire libre para celebrarlo

La perfecta seducción de los bares con jardines: seis propuestas a puro cocktail y verde

Muchos elegimos las próximas coordenadas a conocer no solo por la calidad de su oferta foodie y coctelera, sino también por lo atractivo del espacio. Y, a decir verdad, no hay espacio más atractivo que el que incluye verde en la ecuación. Aire libre, plantas, luces y tragos de autor son los componentes perfectos para una noche despejada de calor. En MALEVA lo entendimos, y acá te dejamos seis lugares que cumplen con honores. Desde una mansión de estilo francés con un jardín muy genial, hasta un bar muy playero a pasos del río y de yapa una apertura súper cool:

1) MILION: UNA MANSIÓN FRANCESA CON UN JARDÍN DE CUENTO (ARTE Y HAPPY HOUR INCLUIDOS) / PARANÁ 1048 – RECOLETA

Un bar que decidió instalarse en una mansión de estilo francés y que ya con eso se ganó un espacio en la agenda de todo aquel que sepa de su existencia. Como toda gran casona, el jardín frondoso está incluido. Ahí, un par de mesitas vintage se mezclan con las plantas y bandejas girando desde tragos clásicos y de autor – de sus bartenders recién vueltos de Europa con las nuevas tendencias cocteleras – hasta etiquetas de vinos y espumantes (con un happy hour de 17 a 21h). ¿Un cocktail recomendado? El ¨Kirby¨, con Gin Bombay Sapphire, Martini Bitter, Bitter Angostura naranja, clara de huevo, jugo de pomelo y almíbar. Los sábados a la noche la cosa se pone un toque más movida con DJs en vivo. Además, en el tercer piso alojan un universo arty con muestras que cambian periódicamente, y el segundo piso se transforma en una cervecería boutique con arte interactivo y digital. En fin, un bar en un ambiente difícil de mejorar, con un jardín protagonista que la rompe.

2) LUCERO: UN OASIS SALVAJE, SECRETO E INSTAGRAMEABLE CON MUCHA MÚSICA EN VIVO / NICARAGUA 6098 – PALERMO VIEJO

A quienes los jardines verticales los siguen inspirando, este secreto verde palermitano es una parada obligatoria. La idea es ir a por tragos de autor en un escenario cuasi salvaje pero desde un paisajismo cuidado. Si de bebidas hablamos, hay birra y vinos pero la posta la tienen los tragos de autor con alternativas más jugadas – como el ¨Picaflor¨, con gin, limón, wasabi y azúcar negra -, hasta otras que son comodines infalibles (el ¨Fundador¨, por ejemplo, con Smirnoff, mango, limas, frambuesas y arándanos). Y atento al trago ¨MALEVA¨. Para comer, una carta acorde a la esencia de todo bar donde las hamburguesas y los sándwiches tienen el monopolio. Para darle un toque más al patio, el dato no menor es que hay DJs y música en vivo todas las semanas.

3) PARQUE: INSPIRADO EN PARQUES DEL MUNDO Y CON PLANTAS POR DOQUIER (Y TRAGOS DE AUTOR GENIALES) / THAMES 1472 – PALERMO VIEJO

Si abre un bar cuyo concepto es transportarnos, con su arquitectura, decoración y concepto, a los grandes parques del mundo, es fundamental que el verde esté en cada detalle. Y así fue como hicieron Parque, un espacio que desde que abrió fue un éxito. El jardín, si bien no abunda en metros cuadrados, logra envolvernos entre plantas en el techo, paredes y pisos, elementos de jardinería y, obvio, su emblemática enredadera de eucalipto en la barra. Los murales de flores y las hamacas complementan la energía y extienden el espíritu de aire libre incluso bajo techo. En cuanto a los tragos, la rompe el ¨Sareks Park¨ con vodka, limón, almíbar, té negro, cáscara de naranja, frutilla, frambuesa y pétalos de caléndula o el ¨Jasmund¨ con jaggermeister, pineral, almíbar de frutos rojos y jugo de maracuyá. La lista sigue y sigue, pero las opciones foodies tampoco se quedan atrás, con la intención de elevar lo gastronómico un poco más allá de las opciones típicas.

4) FEDRA´ S: TAMBIÉN INCLUYE RÍO Y SUMA VIBRAS PLAYERAS A LA ECUACIÓN / ALVEAR Y EL RÍO – MARTÍNEZ

San Isidro es el barrio ejemplar de los espacios verdes, y a veces suma un componente más: el río. Fedra´s es una de las opciones predilectas de zona norte que tiene un buen combo de ingredientes: tragos, comida, aire libre, verde, y el ruido de las olas de fondo. Con el estilo playero que caracteriza a la firma también creadora de Malloy´s, los cocktails que componen su carta son para todos los gustos. Clásicos y frescos, vas a poder encontrar desde caipis (la de maracuyá no falla) hasta mojitos. Su sector al aire libre es súper cautivador y envolvente: plantas colgando de las paredes, enredaderas, luces y árboles se fusionan con los toques en madera y lo convierten en un favorito local.

5) MAMBA: ¡EL NUEVITO! ALTA GASTRONOMÍA, DISEÑO, UN PATIO MUY COOL Y BUENOS GINS/ SOLER 5130 – PALERMO VIEJO

Hace dos meses llegó este restaurante y bar con la idea de fusionar la calidad de lo gourmet con la coctelería de autor y la arquitectura de vanguardia. En un espacio muy canchero nació, entonces, Mamba, donde la experiencia busca ser desde el paladar y los ojos. La pata coctelera se centra en la barra de 12 metros de largo bajo el mando de Federico Agostinelli donde la joyita prometen ser los gin tonics (hay hasta 10 variedades muy originales). Pero si ese cocktail no es lo tuyo, vas a tener de sobra para elegir. ¿Una bomba? El ¨Mamba Sour¨, con Jack Daniels, lavanda, lima y manzana. Su patio a puro neón, rodeado de plantas y al aire libre le termina de dar el toque. ¡Ah! Y atentos, porque también aloja eventos y live DJ sets.

6) LA MALBEQUERÍA: PORQUE EL VINO TAMBIÉN ES PROTAGONISTA, UN WINE BAR CON UN PATIO MARAVILLOSO / GURRUCHAGA 1418 – PALERMO VIEJO

Porque los wine bars también son bares, y porque una copita de vino encuentra su mejor ángulo si se toma entre verde y aire puro, La Malbequería tenía que estar en la lista. Una casona divina con toques vintage es uno de los hogares porteños del vino más lindos.  La puerta de entrada la enmarca una higuera de más de 50 años, y entre empedrados, mesitas de hierro, un estanque y plantas por doquier, tomar vino por copa – de alguna de las 250 etiquetas – nunca fue tan instagrameable. Si querés expandir tus horizontes vitivinícolas, chequeá sus redes porque arman degustaciones todas las semanas junto a su enólogo, Juan Argerich.

Fotos: gentileza bares mencionados.