Av. Libertador está llena de propuestas foodies gigantes, pero hay otras muy interesantes que, por ser más chicas, pasan desapercibidas / Desde una heladería artesanal con un jardín muy lindo, hasta un restaurante de tapeo gourmet genial / Desde Vicénte López hasta San Isidro
Entre las aperturas está Schock BA, una heladería artesanal con jardín ideal para dominguear una tarde de verano
Cinco rincones nuevos, foodies y secretos de Av. Libertador en Zona Norte
¿Secreto y sobre Av. Libertador? Sí, así es. Nos animamos a esa premisa porque, aunque sea una de las avenidas más transitadas de Buenos aires (y plagada de ofertas foodies de todo tipo) es muy difícil ver esos locales más modestos en cuanto a tamaño. Pasaste sobre cuatro ruedas y no reparaste en una nueva heladería escondida detrás de un patiecito muy cool, o en la nueva sucursal de una birrería artesanal con renombre. Todas novedades que muy probablemente nunca viste. Sobre esas más secretas te contamos desde MALEVA en esta nota:
1. SHOCK BA: UNA NUEVA Y PROMETEDORA HELADERÍA ARTESANAL CON JARDÍN AL AIRE LIBRE INCLUIDO / LIBERTADOR 14988, ACASSUSO
La comida es ciencia para muchos, y el helado es un capítulo aparte. Las heladerías tradicionales son parte del pasado y hoy, una nueva apertura implica un nuevo concepto. Así lo entendió Shock BA, que llegó hace unos meses con la idea de “enseñarte a ser sommelier heladero”, y convertirse en la mejor heladería artesanal de Buenos Aires. Pequeño objetivo, ¿no?
Detrás de un patiecito repleto de verde, mesas al aire libre y un mural colorido se esconde la novedad. “Querémos invitarte a que vengas a redescubrir la experiencia de probar el mejor helado artesanal de Argentina”, proponen. Y tienen el know how y los títulos para verificarlo: su Maestro Heladero, Ariel Seggeser, quien fue galardonado con menciones, premios y medallas de oro en concursos en Argentina y el mundo. Y la cosa no termina ahí. Las máquinas las trajeron directamente de Italia, y el paso final en la producción – que le dio su nombre – es un shock térmico. La lista de gustos es larga, así que vas a poder elegir tranquilo: frutales, chocolates, cremas (ojo con el cremino allá nocciola, de avellanas y variegato “nutella” en capas), dulce de leche, y una curiosidad: helado de expresso.
2. BIRRERÍA FUNES: UNA CADENA CON YA CUATRO SUCURSALES Y CERVEZA ARTESANAL DE ALTO NIVEL / AV. LIBERTADOR 15274, ACASSUSO
Plantaron bandera en Chacarita, San Telmo, Belgrano y, finalmente, Acassuso. Hace solo dos meses, este rinconcito cervecero de Libertador agrega una propuesta del palo por la Zona Norte, una que ya se hizo su nombre y ganó el respeto de miles de porteños (que en la amplia industria cervecera de Buenos Aires no es decir poco). Artesanal – tienen su propia fábrica en la que, también, hacen visitas guiadas con su brewmaster, Lucía Maschio, junto a una degustación infaltable – el lema bajo el que viven es simple: #Lahacemosylaservimos.
Pero, aunque la gama de birras es amplia, variada, cuidada y respetable, también la acompañan de una oferta gastronómica para que la panza reciba más que lúpulo y malta. Sándwich de pechito de cerdo, de pastrón (una vuelta original con masa madre, mostaza con pepinos y cebolla caramelizada), tortilla casera (un clásico), milanesas, berenjenas al escabeche y más.
3. EL CLUB DE LA MILANESA: UNA NUEVA Y MUY CANCHERA SEDE, CON MUY BUENA ILUMINACIÓN Y MUCHO VERDE / AV. LIBERTADOR 48, VICENTE LÓPEZ
Hace solo algunas semanas renovaron una sucursal que, escondida debajo de Puente Saavedra, regala un espacio a lleno de verde y muy amplio que todo fanático de la marca deberá conocer. Muy bien iluminado y con plantas colgando por doquier, se suma como otra alternativa al polo foodie de la zona – recordemos que a pocos metros está el aclamado Al Río –. Su menú ya lo conocemos: toppings a puro queso, algunos más clásicos como el capresse o la napolitana, y otros más bomba como la americana con cebolla caramelizada, panceta crocante, huevo frito y perejil. ¡Una opción a tener en cuenta para cualquier salida con amigos!
4. LARDO Y ROSEMARY: UN CAMUFLADO PERO GENIAL RESTAURANTE DE PLATOS DESCONTRACTURADOS Y GOURMET A LA VEZ / AV. LIBERTADOR 3810, LA LUCILA
No es tan nuevo, pero entra perfecto en la parte de “secreto” sobre Libertador. Chiquito y cuadrado, el vidrio que le hace de tapa a este rincón es muy fácil de camuflar entre otros edificios. Y qué pecado no registrar este gran restaurante. Lleva sus puertas abiertas hace menos de un año y logró consolidarse como uno de esos (pocos) lugares que pudieron combinar lo gourmet con lo callejero. Platos de “Street food” del mundo, pero con recetas refinadas que logran sabores especiales y que lo distinguen del resto de las propuestas. Si bien, de nuevo, la oferta foodie es más tipo tapeo, las opciones son bastante abundantes y, lo que no es menor, económicas para la calidad que ofrecen.
¿Qué vas a poder probar? Un roll de morcilla desgranada y hojas de acelga, espuma de queso, cracker de centeno y portobellos deshidratados, por ejemplo. Otra gran opción (y plato tendencia) es el bao negro, con tapa de asado braseada, salsa de fondo de olla, cilantro y remolacha. Ni hablar de la burrata con durazno, ciruela, tomate, flores, polen, garbanzos y arándanos. La carta fue diseñada por Paul Feldstein y Victoria Rabinovich, dúo creador de LUPA, otro restaurante promesa.
5. FOREST DAN: DOS APERTURAS CON MUCHA ONDA EN ZONA NORTE (¡UNA GRAN COORDENADA PARA IR CON AMIGOS!) / AV. LIBERTADOR 14656 (SAN ISIDRO) Y AV. LIBERTADOR 2363 (OLIVOS)
No una, sino dos aperturas sobre la avenida en cuestión. La primera en San Isidro, la segunda (y más reciente) en Olivos, a unos metros del consolidado polo foodie del que forman parte pesos pesados como Carne, Le Pain Quotidien y La Panadería de Pablo. Nació en La Lucila y siguió apostando por Zona Norte. Con un espacio moderno y canchero – luces colgando, plantas que caen, mesas de madera y un look muy industrial –, una carta bien americana y un poquito de esencia de barrio.
Forest Dan es uno de los preferidos para las reuniones semanales entre amigos. ¿Por qué? Por el ambiente urbano con buena música – incluídos DJs en vivo –, por la carta simple, pero con opciones para todos, y por la amplia variedad de cervezas, vinos y tragos (ideal para quienes no sean tan fanáticos de la birra).
Fotos: gentileza lugares mencionados