"AUN SIN CÁMARA, ESTOY TODO EL TIEMPO BUSCANDO LA FOTO". JULIA RAMOS, LA CHICA HOLBOX

*ABAJO DE TODO, LA ENTREVISTA FILMADA.

 
Por Santiago Casanello
En muy pocos meses – abrió a fines de marzo – Holbox  se convirtió en una de las galerías de fotografía más vitales de Palermo. En sus paredes cuelgan las realizaciones de fotógrafos consagrados pero también – y es lo que le da el toque distintivo – las de jóvenes talentos. La fundadora y mente en acción detrás de Holbox (el nombre es por una isla de la Riviera Maya) es Julia Ramos. Una chica con una onda entre rocker – se siente plena tirada en el pasto de un festival de rock – y tradicional (por ejemplo, adora la equitación y vende caballos). Julia es alegre, te recibe a las diez de la mañana con buena y movida música y se ríe después de cada frase. Aunque también es algo tímida y pensativa. Tal vez a Julia la defina de algún modo su fijación como fotógrafa con los paisajes nevados, que a ella no le parecen tristes sino bellos y entrañables. Precoz emprendedora – tiene 22 años – se recibió de fotógrafa profesional en la Escuela Andy Goldstein.
Contanos cuál es el espíritu de Holbox
Es un espacio que da oportunidades a los fotógrafos que están empezando, para que se pueda conocer su trabajo, criticárselo y si gusta, exponérselo. Para alguien que recién empieza es extraño porque no hay muchos lugares en el país que den esa oportunidad. Eso por un lado. Y por otro lado, para los fotógrafos reconocidos es un espacio dedicado ciento por ciento a la fotografía y así va a seguir siendo. Eso está bueno. Ayer vino un chico que nos mostró su material y dijo que se sentía importante porque le estábamos prestándole atención a su fotografía. Lo que queremos es fomentar la fotografía como arte en el país. Otro punto importante es que manejamos un rango de precios bastante amplio, desde 100-150 pesos para arriba. Es una buena forma de promover el arte para todos. No solo para coleccionistas con mucha plata. Sino también para los que quieren empezar a coleccionar arte, pero de modo tranqui, también puedan hacerlo.
¿Y cómo se te ocurre crear Holbox?
La idea me aparece cuando estaba cursando el año pasado el último cuatrimestre de la facultad. Empecé a plantearme qué hacía después de egresarme. Y me levanté un día y se me ocurrió esto. Pensé también que si quería abrir una galería iba a necesitar un curador o curadora. Entonces hablé con Mariana Maggio quien había sido mi tutora de tesis y como me gustó como curó mi tesis pensé: “que me cure todo”. Se prendió y empecé a buscar locales. Y así arrancamos y abrimos en marzo. Yo traje algunos fotógrafos, Mariana otros. Los fuimos seleccionando y arrancamos con 14 fotógrafos fijos, ya son 17 y seguiremos creciendo de a poco. Otras galerías tal vez les dan a fotógrafos que arrancan un espacio chiquito o hacen una muestra muy de vez en cuando.
Pasemos a vos ¿Qué día hiciste el clic en el que decidiste ser fotógrafa?
¡Me re acuerdo! Fue en 2008. Me habían quedado dos materias de publicidad para rendir en marzo – yo estudiaba marketing – y fui el verano a Punta del Este, me levanté un día de la mañana, agarré todos los libros y me dije “qué pocas ganas tengo de estudiar esto, yo quiero sacar fotos”. Y ese mismo día me metí en la página de Andy Goldstein.
¿Cuál es la primera foto que sacaste que realmente te gustó?
La primera que dije “uy, está buena” fue la de las patas de un caballo, en 2007, sin tener ningún tipo de formación. Me acababa de comprar una cámara réflex. Hasta el día de hoy me sigue pareciendo una de mis mejores fotos. Tenía 17 años.
¿Y la última foto que sacaste?
En París, a la Torre Eiffel. ¡Bien cliché!
¿Cuándo estás sin una cámara, qué cosas delatan que sos fotógrafa?
Que estoy todo el tiempo buscando la foto en todo lo que miro. Cada cosa la miro de otro modo, no importa el lugar, el día, se da todo el tiempo.
¿Algo en particular que te inspire?
Sí, tres cosas son fundamentales: los caballos, la nieve y la música. Y también andar en auto me re inspira.
En auto…¿Y a qué se debe?
A que me relajo, pongo música fuerte, abro la ventana y entro en estado zen. Me olvido del tráfico, no me importa nada.
¿En tu preferencia por los paisajes nevados hay una mirada melancólica?
No, para nada. Aunque cada uno puede tener su propia mirada subjetiva cuando ve esas fotos y percibir melancolía o nostalgia. O alegría. Lo que fuere. Está en uno. Hay miles de factores por los que a una persona se le produce una sensación u otra al observar una foto.
¿A quién retratarías en sepia?
A uno de mis caballos.
¿Y en blanco y negro?
A alguien cercano a mí, que quiera mucho, como un amigo por ejemplo.
¿Las cámaras digitales democratizaron la fotografía o devaluaron la profesión?
Le aportaron algo novedoso y la sociedad en general ante los cambios, especialmente los tecnológicos, se inhibe. Entonces los critican, les buscan las cosas malas y les encanta decir de qué manera un invento destruye lo anterior. Pero no necesariamente es así. Hoy en día hay un montón de gente  está empezando a sacar fotos con rollo, son dos cosas distintas, dos modos diferentes de hacer fotografías. Y que se pueden complementar, hacer al mismo tiempo. Yo saco fotos digitales y con rollo también. Una no mata a la otra ni la desplaza, es una cuestión de gustos. Y además hay una realidad: la fotografía digital desde un punto de vista económico es más accesible. Porque comprar el rollo, los químicos y armar todo el laboratorio en tu casa, es un proceso. Claro que si querés comprarte una súper computadora para revelar digitalmente te sale mucha plata.
¿Cuál fue tu primer pensamiento hoy al despertarte?
Que tenía que llamar a la contadora para decirle algo que ni me acuerdo. Un bajón mi primer pensamiento del día.
¿Y el segundo?
Mejor, que me quería comprar una guitarra. Y fui, y me la compré, acústica.
O sea que tenés otras vetas artísticas…
Sí. A mí me encanta dibujar. Con lápiz. Y ahora estoy poniéndole pilas a aprender a tocar la guitarra.
Volviendo a la fotografía ¿Cuál es el límite?
Se me ocurre la foto del nenito en África que lo está por atacar un buitre. Creo que el fotógrafo se suicidó por que en vez de ayudar al chico le sacó una foto. ¡Yo ahí hubiera ayudado al chico! Fotos después podrás sacar 20.000.
¿Y cuál va a ser tu próxima tanda de fotos?
Ya la tengo pero no la edité. Estuve en Europa viendo festivales de rock, y saque varias fotos.
Tenés una veta rockera.
Sí, me encanta el rock, escucho todo el día, voy a todos los recitales que puedo.
¿Y a qué músico le harías una sesión de fotos?
A una banda que recién arranca y nadie conoce. Todo lo demás ya está quemado. Más allá de que uno pueda ponerlos en situaciones nuevas pero ya tienen 400 millones de fotos. Y los nuevos se van a copar más con las ideas de fotos que les propongas.
¿Teniendo en cuenta tu linaje – Julia es hija del fundador de Ámbito Financiero Julio Ramos – no te ves como reportera gráfica?
La verdad que no, aunque en el futuro uno nunca sabe.
(Hasta el 18 de agosto, expone en Holbox Pato Rivero, con una selección de obra que brinda homenaje a la moda, en donde se destacan Pablo Ramirez, Maria Pryor, Martin Churba, Nadine Zlotogora, Laura Valenzuela, Andres Baño, Fernando More, Santiago Artemis, la brasileña Pio Rio Branco, Marcelo Senra y Evangelina Bomparola)
Dirección de Holbox: Costa Rica 4737 , Palermo Soho, a menos de un minuto caminando de Plaza Armenia.
Fotos y video de la nota: Paula Eleod.