Buenos Aires siempre a punto: doce nuevos restaurantes de 2024, que abrieron hace nada, y merecen una visita

Desde un omakase en una cueva hasta una propuesta que literal, inventó su propio  concepto de cocina/Además: el rinconcito japonés donde se luce la música (y el whisky y platos nipones) y la nueva coordenada de carnes de una dupla que sigue conquistando la calle Thames de Palermo/Una lista con curaduría MALEVA para todos los gustos y situaciones.

Animales enteros y únicamente carne a leña: José el Carnicero es la nueva apuesta de los creadores de Niño Gordo. 

Buenos Aires siempre a punto: doce nuevos restaurantes de 2024, que abrieron hace nada, y merecen una visita. Por Fiamma Zampino para MALEVA.

En Buenos Aires puede pasar lo peor, una pandemia, una crisis económica que intimida, pero aún así la escena gastronómica no se detiene. Nuevos restaurantes abren sus puertas cada mes, expandiendo el horizonte culinario con una amplia variedad de propuestas para todos los gustos. Desde homenajes a la tradición familiar hasta experiencias gastronómicas innovadoras, la ciudad es siempre un escenario ideal para descubrir sabores nuevos.

«Situado en el corazón de Villa Crespo, Antro ofrece una experiencia culinaria diferente. Al llegar, te adentrás en una cueva a través de un camino de piedras, transportándote a la edad de piedra. Una vez dentro, el hipnótico sonido de la música tribal y la ambientación te sumergen en un estado de relajación y asombro…»

¿Cansado de la monotonía gastronómica? ¿Querés nuevas experiencias que te transporten a diferentes sabores y culturas? ¿O cuando salís a comer buscas la cocina tradicional y familiar de madres y abuelas? En estos meses de 2024, hay novedades para todos los gustos. Desde MALEVA te invitamos a descubrir estos doce restaurantes recién llegados que están empezando a escribir su historia en la ciudad:

1) Evelia: las pastas de la abuela del reconocido chef Máximo Togni / Campos Salles 1712 -Núñez

En mayo, Máximo Togni, reconocido chef responsable de Doggs y Tognis pizza y café, se embarcó en un nuevo proyecto culinario: Evelia, donde la protagonista indiscutible es la pasta fresca casera, elaborada con la misma pasión y dedicación que su abuela, Evelia Macchia, le transmitió desde pequeño.

Evelia era una mujer empoderada que, a pesar de su exigente trabajo como contadora, dedicaba los domingos a preparar cappelletti para 25 personas. Su pasión por la cocina y su cuidado por los detalles inspiraron a su nieto Máximo, quien a los ocho años ya sabía que su destino era ser cocinero.

En cada plato se refleja la alta italianidad que corre por las venas de Máximo, herencia de sus cuatro abuelos oriundos del norte de Italia. Las pastas son elaboradas con harina italian. Los rellenos son variados, desde clásicos los tortelloni de queso 4 esquinas y jamón cocido con estofado Evelia hasta creaciones como los cappelletti de hongo porcini y salsa de limón.

Para acompañar las pastas, Evelia ofrece una panera artesanal sin costo adicional, que incluye grisines y un delicioso pan estilo pugliese desarrollado en colaboración con Fran Seubert de Atelier Fuerza.

2) Casa Parra: platos abundantes y sin pretensiones en una casona centenaria / Virrey Loreto 3329 – Colegiales

Casa Parra abrió sus puertas en mayo, fruto del esfuerzo conjunto de un grupo de amigos apasionados y una chef talentosa, unidos con un objetivo claro: «crear un espacio donde la calidez y la buena comida se encuentren». Situada en una casona con más de 100 años de historia, la propiedad ha sido restaurada conservando muchas de sus piezas originales. Los pisos, ventanas y celosías mantienen un encanto nostálgico y auténtico, preservando la esencia de la casa.

El nombre, Casa Parra, se inspira en una parra situada en el centro de la cocina, que fue conservada durante la remodelación. “Lo que nos distingue es la calidez y el esfuerzo por ser un espacio acogedor. Queremos que cada visita sea como regresar a casa, donde te sientas cómodo y bienvenido”, explica Martín Lozano, uno de los encargados de hacer posible esta apertura.

La oferta gastronómica refleja este enfoque: platos abundantes y sabrosos, con un toque gourmet de la chef Lucila Rodríguez, quien ha trabajado muchos años junto a Narda Lepes en Lokanta. Algunos destacados del menú incluyen el ojo de bife con papas y salsa de hongos, y los gnudis de ricota con salsa de tomate, albahaca y ajo. Sin pretensiones excesivas, Casa Parra vuelve a las bases de la cocina casera y deliciosa, asegurando que cada bocado sea una experiencia reconfortante y memorable.

3) Bodegón Devoto: sabores de siempre en el barrio de siempre / Avenida Chivilcoy 3818 – Devoto

¿Ubicás cuando en el menú hay flan con dulce de leche y crema, milanesa napolitana y pastas? Hola, bodegón del amor. El local que abrió en abril, queda en el bello barrio de Devoto como su nombre lo indica, que está sumando cada vez más opciones. “Para nosotros, Devoto es la familia y los amigos de toda la vida, las risas compartidas y los sabores de siempre. Con eso en mente, pensamos una propuesta que refleje la sensación de casa, de barrio, con sabores sencillos, caseros y abundantes”, explica Sebastian Almeida, uno de los dueños junto a Santiago Castiglione.

Más que un restaurante, Bodegón Devoto es un homenaje a la cocina tradicional argentina, a esos sabores que nos acompañan desde la infancia y que nos hacen sentir en casa.

Al revés de lo que la mayoría puede creer la elección del nombre fue difícil. “Bodegón Devoto representaba nuestra identidad pero asumíamos una responsabilidad grande al apropiarnos del nombre del barrio. Finalmente lo tomamos con orgullo, pasión y dedicación”, afirma.

El espacio refleja a la perfección el concepto del bodegón moderno. Líneas simples, materiales cálidos y guiños al barrio y a tiempos pasados crean un ambiente hospitalario y familiar para compartir con amigos o en familia.

4) Antro: cocina en cueva, la innovadora experiencia que fusiona sabores de diferentes culturas / Gurruchaga 1145 – Villa Crespo

Situado en el corazón de Villa Crespo, Antro ofrece una experiencia culinaria única y revolucionaria. Al llegar, te adentrás en una cueva a través de un camino de piedras, transportándote a la edad de piedra. Una vez dentro, el hipnótico sonido de la música tribal y la ambientación te sumergen en un estado de relajación y asombro.

La propuesta de Antro reinventa el concepto omakase – «lo dejo en tus manos» en japonés -, combinando elementos de diversas tradiciones culinarias con un énfasis en el maridaje de vinos. El menú de 14 pasos invita a los comensales a confiar en la creatividad del chef y a disfrutar de cada plato con las manos, desde el pulpo confitado hasta los temakis envueltos en alga nori. La experiencia es complementada con una selección de más de 200 etiquetas de vinos y tragos de autor en un bar exclusivo.

Antro no solo es una comida, es un viaje sensorial que fusiona sabores y culturas en un ambiente inmersivo. Juan Pedro Pascucci, uno de los dueños, le destaca a MALEVA: «queremos que cada visita sea una inmersión en la atemporalidad, donde la comida y el vino sean protagonistas». En Antro, cada detalle está diseñado para ofrecer una experiencia gastronómica inolvidable en un entorno único.

5) Fico: donde la técnica y el producto se encuentran en cada detalle / Muñecas 775 – Villa Crespo

Fico suele significar ‘que hace, produce o convierte en’. Eso hicieron los chefs y pareja, Martín Sclippa y Estefanía Maiorano, cuando en marzo abrieron Fico. El proyecto nació durante la pandemia, cuando Martín y Estefi, después de haber estado a cargo de Narda Comedor, sintieron que era el momento de crear algo propio. La búsqueda del lugar adecuado tomó más de un año, evitando los polos gastronómicos y buscando un local con vida e historia.

En Fico, se elabora todo desde cero: el pan, la manteca, los fondos, caldos y hasta los helados, utilizando al máximo cada producto. “La propuesta culinaria es contemporánea, enfocada en el producto y con mucha técnica, sin encasillarnos en un tipo de cocina específico”, considera Estefi.

Ambos han logrado convertir este espacio en un lugar donde todos se sientan cómodos, ofreciendo platos que reflejan su pasión por los detalles y la calidad como con el paté de conejo con avellanas, gelée de oporto y un mix de verdes con vinagreta de mostaza o el calamar en su tinta relleno de chorizo, sésamo, crema ácida y pimiento asado. La estrellita: pollo, hongos, papas dauphine y berro.

6) Alcanfor: un refugio gastronómico en Villa Crespo que promueve el concepto «nose to tail» / Aguirre 949 – Villa Crespo

Bajo la dirección del chef Julián Galende y tras un prolongado proceso de gestación, en enero se establece Alcanfor. Con una trayectoria que incluye locales como «malba cocina» y «labro», Julián decidió materializar su visión de una cocina personal, sutil y delicada.

«Llegué a un punto donde me era difícil seguir trabajando en otro lugar. Había alcanzado un techo donde los cambios que quería realizar ya no dependían solo de mí», le confiesa a MALEVA. Busqué por casi todos lados, sabía dónde no quería estar, pero estaba abierto a las posibilidades. Encontré un local que se adaptara a mi presupuesto y que me gustara», explica Julián.

Villa Crespo, con su entorno de casas bajas, negocios y comunidad gastronómica cercana, se convirtió en el lugar ideal para Alcanfor. Con un fuerte enfoque en la sostenibilidad y la mínima huella de carbono, Alcanfor no solo es un restaurante, sino un espacio de encuentro para los comensales.

Su cocina se define por su enfoque en el concepto «nose to tail», promoviendo el uso integral de los alimentos para reducir al máximo los desperdicios. Desde los cortes más tradicionales hasta las partes menos conocidas, cada elemento se transforma en platos sabrosos, reflejando la filosofía de cuidado por el medio ambiente y la sostenibilidad.

Además, las cartas del restaurante están impresas en restos vegetales, como cebolla y palta, lo cual demuestra el compromiso con la reducción del impacto ambiental en todas las áreas del negocio.

7) Musgo: un restaurante que inventó un concepto muy original «el Patagandi» /  Influencia asiática y escandinava con productos patagónicos / Nicaragua 4758 – Palermo

Desde abril que en pleno Plaza Serrano, entre Borges y Gurruchaga, se asoma la apertura de Konstantin Voronin y Ksenia Romantsova, una pareja rusa, que enamorada de Argentina y sus productos, se mudaron al país para crear Musgo, un restaurante que fusiona la esencia de Asia y Escandinavia con los mejores productos patagónicos.

Konstantin, con su amplia experiencia culinaria, y Ksenia, con su expertise en el management japonés, han creado un menú único y detallista que refleja su pasión por la comida y el diseño. “Para nosotros la sustentabilidad es muy importante, siempre buscamos usar todo el producto”, afirma Ksenia. Un ejemplo de esto es el plato de trucha ahumada con crema de piel de papa, donde se reutilizan las pieles de la papa de otro plato. En la salsa asiática de las berenjenas fritas se utilizan verduras que ya no pueden usarse en otras preparaciones, logrando así un aprovechamiento del 100% de los ingredientes.

El Patagandi, el concepto del restaurante inventado por ellos, se inspira en el Japandi, un estilo de diseño de moda que combina la simplicidad y elegancia escandinava con la sofisticación y espiritualidad japonesa. Esta fusión se ve reflejada en cada detalle del local, desde la decoración minimalista con elementos naturales hasta la vajilla artesanal.

8) Yakinilo: un rinconcito japonés – con platos y whisky nipones, y muy buena música -, en Buenos Aires / Av. Dorrego 1551 – Chacarita

El 2 de abril, José Delgado, reconocido por su popular restaurante Cang Tin, inauguró Yakinilo. Este nuevo proyecto, cuyo nombre combina «Yaki» (por los yakitoris, el típico pollo a las brasas japonés) y «Nilo» (por los vinilos que suenan de fondo), surge de su pasión por la cocina japonesa y el deseo de compartir esta experiencia con dos amigos de la infancia. «Quería un lugar donde pudiera combinar nuestros mayores gustos: la comida, la música, el sake y el whisky japonés«, comenta José.

La elección del espacio no fue sencilla, ya que les tomó más de un año encontrar el lugar. Finalmente, hallaron un local pequeño a 10 cuadras de Cang Tin pero en lo que ya es Chacarita y no Palermo, que les permite recrear la atmósfera íntima de los izakayas japoneses.

Yakinilo ofrece un ambiente relajado y auténtico, donde los comensales pueden disfrutar de una experiencia gastronómica única. «Buscamos ofrecer un ambiente de izakaya, donde puedas compartir un buen rato con amigos, ambientado al estilo japonés con comida de primera calidad«, explica José. Con solo 12 lugares en la barra y dos turnos por noche, se recomienda reservar con anticipación.

Combinando productos locales con importaciones selectas como el karaage que es el pollo frito, las ostras, el onigiri y el tsukune (albóndiga de pollo con yema curada para dippear) y la ensalada de papa japonesa, el restaurante ofrece sabores que transportan a los comensales directamente a Japón.

9) Feriado Cantina: barrio, vermú, vereda y largas sobremesas / Washington 3498- Coghlan

Feriado nace como una marca de vermú desde el mismo centro de Temple, el lugar que creó el gin Bosque, galardonado como el mejor gin contemporáneo a nivel mundial. A partir del éxito del vermú, surge la idea de crear un espacio que lo complemente, dando lugar a la cantina Feriado que, respetando su nombre, abrió las puertas el 25 de mayo.

La elección del espacio en Coghlan responde a la idea de crecer en los barrios, acompañando la búsqueda de lugares no tan tradicionales y rompiendo con el circuito gastronómico habitual. La intención es sembrar nuevos polos gastronómicos y acercarse a la gente, generando una mayor conexión con el entorno”, afirma Gonzalo Llaneas, responsable del local.

Lo que distingue a Feriado es su enfoque en la experiencia y la personalización de la atención, creando un vínculo cercano entre el espacio, el equipo y los clientes. Sin pretensiones, buscan dar lo mejor de cada producto, haciendo sentir a los comensales bienvenidos y valorados.

La cocina de la cantina incluye comida clásica como buñuelos, croquetas, pizzas a medio molde en horno de barro, pastas con salsas caseras, milanesas, supremas, tortillas (babe por default) y flan mixto. Las preparaciones son simples y directas, pero con un gran cuidado en la elección de materias primas y su elaboración, ofreciendo platos reconfortantes y bien ejecutados.

El ambiente de Feriado es relajado y pet-friendly, banderines colgados, fotos en las paredes y platos que se sirven en bandejas plateadas de acero típicas de cantina pero las servilletas cumplen para limpiar bien.

Los lunes, martes, miércoles y domingos de 10 a 1 am y los jueves, viernes y sábados de 10 a 3 am (y, por supuesto, los feriados), Feriado Cantina se encuentra abierta, invitando a disfrutar del barrio, el vermú, la vereda y largas sobremesas en un ambiente cálido y amigable.

10) Pauka: esencia asiática, espíritu latinoamericano y alma mediterránea en una casa histórica / Bonpland 1932 – Palermo

En marzo de 2024, Pauka abrió sus puertas con el objetivo de brindar una experiencia única que combine platos de alto nivel con una coctelería innovadora. Surgido a fines de 2023, Pauka es el resultado de cinco meses de arduo trabajo, establecido en una antigua casa de principios del siglo XX en Palermo Hollywood. «Buscamos una fusión perfecta entre lo antiguo y lo moderno, y el Buda de cuatro dimensiones en la entrada simboliza ese equilibrio», comenta Sergio Pauca, chef y sushiman.

La propuesta culinaria es una auténtica celebración de la cocina fusión Nikkei, una mezcla exquisita de sabores japoneses y peruanos. “El objetivo era lograr una mezcla equilibrada de estilos que combinara la esencia asiática, el espíritu latinoamericano y el alma mediterránea”, afirma.

Cada plato es una narrativa en sí misma, diseñada por Sergio para despertar los sentidos y ofrecer una experiencia multisensorial. Entre las especialidades destacan el ceviche con wasabi y las entradas calientes que fusionan Oriente y Occidente. La carta de vinos, desarrollada por la sommelier Traianna Rosas, complementa perfectamente esta propuesta con vinos sin filtrar, orgánicos y ligeros, alineados con las últimas tendencias.
La ambientación está cuidadosamente diseñada para transportar a los comensales a un santuario de la gastronomía.

La iluminación tenue, la sofisticación del terciopelo y la calidez de la madera crean una atmósfera cálida y elegante. La coctelería, a cargo del premiado bartender Leandro Milan, ofrece tragos que sorprenden por sus texturas, frutas, especias y presentaciones innovadoras. «Cada detalle está pensado para que nuestros clientes vivan una experiencia inolvidable desde que ingresan hasta que se van», concluye Sergio.

11) José El Carnicero: mucho trabajo, un lugar hecho a medida, y toda «la carne al asador» / Thames 2316 – Palermo

Diez años después de abrir La Carnicería, Germán Sitz y Pedro Peña vuelven al producto más icónico de la gastronomía con José el Carnicero, un restaurante que rinde homenaje al asado criollo.

A lo largo de la última década, el dúo ha consolidado su presencia en la escena gastronómica de la ciudad con otros exitosos proyectos como Niño Gordo, Juan Pedro Caballero, Chori, Paquito y Los Jardines de las Barquin. Ubicado, obviamente, en la calle Thames, justo enfrente de La Carnicería, su primer proyecto, esta nueva apertura es el regreso a la carne y el asado. «José el Carnicero trae el modo de asar del asador criollo, muy utilizado en el interior del país y cada vez menos frecuente en Buenos Aires», comenta Germán Sitz.

La carne se cocina exclusivamente con fuego a leña, evitando el uso de gas, y se trabaja con animales enteros y piezas de gran porte, siempre asegurando la trazabilidad y calidad de los productos. El espacio del restaurante, que incluye una barra alrededor de los asadores, un cómodo salón y un patio, refleja la esencia argentina con heladeras de carne a la vista y detalles de diseño que complementan la experiencia culinaria.

La carta ofrece una fusión de sabores europeos y asiáticos con la cocina argentina, presentando platos como el paté de pollo, lengua a la vinagreta, ojo de bife con manteca de trufas, y corderos y lechones del asador, acompañados de guarniciones reinventadas como papas rejilla y una original ensalada Caesar.

La oferta se completa con una selección de vinos impecable y tragos de la casa, destacando un notable vino propio del restaurante. En conjunto, José el Carnicero no solo homenajea la rica herencia del asado argentino, sino que también la reimagina.

12) Uddo: sushi y otsumami en un barrio que no tenía propuestas de este estilo. / Miguelegtes 688 – La Imprenta

Hace menos de un mes, Uddo comenzó a recibir comensales en un barrio que necesitaba una propuesta culinaria innovadora. Este restaurante promete revolucionar la oferta gastronómica de Las Cañitas. Uddo, que significa «madera» en japonés, refleja su nombre en la decoración del local, donde la madera es protagonista, creando un ambiente descontracturado que invita a relajarse y disfrutar.

Desde sushi tradicional hasta fusiones innovadoras, el menú se destaca por su meticulosa selección y tratamiento de ingredientes. Cada pieza de sushi y cada plato de cocina asiática fusionada son el resultado de un proceso cuidadosamente trabajado, desde el arroz hasta la proteína utilizada.

Uddo no solo ofrece una experiencia culinaria de alta calidad, sino que también rompe con lo protocolar, ofreciendo un ambiente relajado y para todo tipo de público. Abierto de lunes a sábados, inicialmente solo por la noche, se presenta como un lugar ideal para aquellos que buscan una comida asiática exquisita en un entorno cómodo.

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Las fotos son todas gentileza para Prensa de los doce restaurantes mencionados.