Siempre a metros de bellos mares. Primero fue en octubre, en Mirazur, el restó del chef argentino Mauro Colagreco en la Costa Azul francesa (restó que ostenta dos estrellas michelins). Ahora fue en las arenas uruguayas de José Ignacio. Cinco cocineros argentinos – Colagreco, Germán Martitegui, Narda Lepes, Fernando Trocca y Darío Gualtieri – se unieron con la idea de acercar sabores, productos y vinos argentinos a diferentes escenarios del mundo. La cita esta fue en la calle del Mostrador Santa Teresita, en José Ignacio, Uruguay, el nuevo emprendimiento de Trocca, donde 60 invitados del HSBC ( auspiciante del evento) se regocijaron – en una larguísima mesa que parecía llegar a la orilla – con los platos preparados por cada uno de los chefs. Eligieron hacerlo cerrando la calle. “Como una forma de recuperar esa sana costumbre de compartir la casa en un espacio vecinal”. La apertura tuvo como sello el clericó preparado por Tato Giovanonni (un gran defensor de los clericós, ver nota en MALEVA: http://malevamag.com/el-viaje-de-tato-giovanonni-por-la-carta-de-floreria-atlantico/ ) y el cierre goloso de Florencia Courreges, pastelera uruguaya del Mostrador Santa Teresita.
«Siempre es a metros de bellos mares. Primero fue en octubre, en Mirazur, el restó del chef argentino Mauro Colagreco en la Costa Azul francesa (restó que ostenta dos estrellas michelins). Ahora fue en las arenas uruguayas de José Ignacio. Cinco cocineros argentinos – Colagreco, Germán Martitegui, Narda Lepes, Fernando Trocca y Darío Gualtieri – se unieron con la idea de acercar sabores, productos y vinos argentinos a diferentes escenarios del mundo. La cita esta fue en la calle del Mostrador Santa Teresita, en José Ignacio.»
El menú – saboreen en la imaginación – fue el siguiente: Pulpo con papas frías limón confit y vinagreta de mole (Fernando Trocca); Tomate relleno con burrata, caldo de tomates y migas. (Narda Lepes); Brótola con duraznos asados al cedrón y mouseline de cebollas tiernas (Mauro Colagreco); Pescado fresco azafranado, ceviche de vegetales, quínoa crocante, emulsión de brandade, brotes, hojas y flores. (Darío Gualtieri); Cordero crocante – verduras asadas – tomillo quemado (Germán Martitegui). “Esta idea – comenta Colagreco (la semana que viene vamos a publicar una nota que le hicimos) – la imaginé como el mejor homenaje a mi terruño, queremos demostrar que en Argentina existe una generación de cocineros que están haciendo un muy buen trabajo. Perú, México y Brasil son actualmente los faros de la cocina latinoamericana, con una rica cultura gastronómica de raíces autóctonas, pero nuestro país tiene lo suyo, mucho potencial y mucho por mostrar, de eso se trata.” El alma mater de la iniciativa, además de Colagreco, es la periodista gastronómica Raquel Rosemberg, cabeza y motor atrás de los dos eventos. “En largas charlas suelen nacer sueños, algunos se realizan”, escribió en su blog, les dejamos, con su permiso, claro, su reseña…”esta vez hubo aire marino…http://saboresquematan.com/2014/01/16/diez-manos-en-uruguay/”
